Finalmente, y tras dos audiencias realizadas el viernes 11 y el lunes 14, la jueza porteña Elena Liberatori ordenó a la empresa pública porteña SBASE hacer algunos cambios en el sistema tarifario del subte.
Las dos audiencias en el juzgado duraron largas horas y por momentos la discusión fue muy tensa. De ellas participaron las partes involucradas en la causa: el diputado del MST Alejandro Bodart, autor del recurso de amparo contra el tarifazo del subte; el gobierno macrista, representado por el Procurador General Adjunto, y SBASE, representada por varios de sus gerentes.
Todos ellos estuvieron acompañados por sus respectivos abogados, que en el caso de Bodart fueron los compañeros Pablo Vicente y Carlos Lucero Paz, ambos del CADHU. A la segunda audiencia también asistieron el diputado Pablo Bergel y la ex diputada María José Lubertino.
Algunas rebajas…
- En su fallo, de 17 carillas, la jueza Liberatori dispuso tres modificaciones concretas:
- Crear un abono nuevo de 20 viajes, que hasta ahora no existía, lo que favorece al pasajero menos frecuente.
- Que ninguno de los abonos con descuento por acumulación tenga fecha de vencimiento, ya que hasta ahora vencían al mes calendario.
- Que se computen como días hábiles los feriados y días sin servicio, ya que hasta ahora los descuentos por cantidad de viajes sólo eran aplicables en tres de los doce meses del año.
- Son beneficios parciales, que por cierto no se hubieran logrado si el diputado Bodart no hubiese presentado su amparo y refutado uno por uno los falsos argumentos del gobierno macrista, siempre funcional a la concesionaria privada Metrovías.
- No corresponde que por un servicio de subtes que es malo, y que además el gasto total en transporte es mayor porque gran parte de los usuarios debe combinarlo con tren o colectivo, encima lo paguemos caro para cuidarle las ganancias a Metrovías.
…aunque insuficientes
Bodart reconoció las mejoras dispuestas en la resolución judicial, aunque de todas maneras las consideró claramente insuficientes. Es por eso que en estos días está presentado la apelación al fallo ante la Cámara.
¿Por qué insuficientes? En primer lugar, porque las rebajas no abarcan a aquellos pasajeros que no dispongan de dinero para comprar los abonos por adelantado. Además, el fallo tampoco incluye otras alternativas, como por ejemplo un descuento de la tarifa en las horas pico, lo que beneficiaría a los trabajadores.
Sobre todo, el diputado Alejandro Bodart cuestionó que no se hubiera suspendido el aumento y por ende rebajado la tarifa al valor anterior: 3.50 pesos. Es que el viernes 11 la jueza había ordenado a SBASE presentar la estructura de la tarifa a 4.50 pesos, bajo apercibimiento de suspender el aumento.
Los funcionarios de Macri no presentaron nada de eso, ni el viernes ni tampoco el lunes, y trajeron los mismos y viejos papeles truchos con que habían argumentado el anterior aumento, de 2.50 a 3.50 pesos.
Esta falencia la reconoce Liberatori en su propio fallo, donde señala que lo presentado “de modo alguno constituye lo requerido… Ni siquiera se aportó algún documento elaborado para responder… Sólo se presentó por segunda vez un documento que ya obraba en autos”.
Es decir, aun cuando no se justificó el aumento a 4.50 pesos, la jueza no lo suspendió como había solicitado Bodart.
Una pelea que no terminó
Aparte de presentar la apelación, tanto en este amparo como en el que Bodart presentó el año pasado -y por el cual el juez Pablo Mantaras suspendió el anterior aumento por ocho meses- sigue pendiente de resolver la cuestión de fondo. Esto es, la falsedad de los costos operativos que la empresa Metrovías «dibuja» y que SBASE repite, que han sido cuestionados por la Auditoría General de la Ciudad.
Es más: según el artículo 7.2 del Acuerdo de Operación y Mantenimiento (AOM), firmado entre SBASE y Metrovías en abril de 2013, “de verificarse un aumento de tarifa, deberá reducirse el subsidio asignado mensualmente mensurando el mayor ingreso económico por venta de pasajes del operador”. Más allá de nuestra crítica global a dicho AOM, que prorrogó la privatización del subte, en estos dos años los subsidios a Metrovías subieron un 40% y la tarifa un 309%. Aumentar ambos rubros a la vez es una estafa.
Este año Metrovías recibirá 980 millones de pesos en subsidios. Si lo dividimos por la cantidad de pasajeros pagos, la Ciudad subsidia 3.66 pesos por cada boleto. Como según la Auditoría la tarifa técnica es de 5.01 a 5.62 pesos, si a esa cifra le restamos los 3.66 de subsidio el boleto al pasajero debería costar entre 1.35 y 1.97 pesos. Aun dando por válido el supuesto “aumento del 16% en los costos” que dijo el gobierno macrista en este último aumento, el boleto debería costar de 1.57 a 2.29 pesos y Metrovías no podría decir ni mu.
En el camino de luchar por la reestatización del subte bajo control social, Bodart y el MST vamos a seguir peleando contra cada injusticia que se cometa.
Pablo Vasco
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