En los últimos días, varias denuncias por maltratos y abusos a usuarios volvieron a poner en debate el servicio privado de acarreo de vehículos y el estacionamiento medido en la Ciudad.
El sistema de grúas y acarreos porteño está concesionado desde 2001 a dos empresas privadas, STO-Dakota y SEC-BRD, que se dividen la Ciudad en dos zonas para prestar el servicio. El contrato venció hace años, pero la Legislatura fue prorrogando la concesión a las mismas empresas. En noviembre de 2011 se votó la Ley 4.003 con un nuevo régimen para el servicio, que establecía que si luego de un año no se licitaba, pasaría a ser estatal. En diciembre de 2012 venció ese plazo, pero se volvió a prorrogar hasta junio de 2013. Por eso el año pasado nuestro diputado Alejandro Bodart presentó un proyecto de ley para que, estando vencido el plazo, el servicio pase al Estado. La Ciudad puede hacerlo, costaría mucho más barato, se evitarían los abusos y habría un control directo.
Más parquímetros, más negociado
En diciembre de 2013 se aprobó la Ley 4.888 para licitar el servicio de grúas y acarreos por 10 años y además extender los parquímetros a casi media Ciudad. La ley aumenta de 4.800 a 170.000 parquímetros, con zonas y tarifas diferenciadas. Lo aprobaron el PRO y la mayoría del bloque K. Bodart votó en contra y sostuvo su propuesta de estatización.
El Ejecutivo abrió la licitación en junio de este año y debe adjudicar el servicio a fin de año. Entretanto, siguen las mismas empresas. Pero días atrás el juez Francisco Ferrer hizo lugar a un amparo y frenó la licitación hasta que se resuelva un planteo de inconstitucionalidad de la ley.
Los números de la estafa
Al inicio de la gestión de Macri el acarreo tenía un precio de 59 pesos, hoy cuesta 450. Es decir que se le habilitó a las empresas un aumento del 762 % en 7 años, mucho más que cualquier índice de inflación.
Según la Secretaría de Transporte porteña, en 2013 las empresas levantaron 300 autos por día. Como le pagan a la Ciudad apenas 55 mil pesos por mes de canon, con menos de medio día de acarreo ya lo cubren. Algunas ONG, como Defendamos Buenos Aires, estiman que se acarrean mil autos por día. Si tomamos estos números, el canon se vuelve incluso más irrisorio.
Hasta 2007 a los dos empleados que operan la grúa los acompañaba un policía de la Federal, al que la empresa debía pagarle como adicional. Pero la gestión macrista decidió reemplazarlos por 168 agentes de tránsito, que no les cuestan un solo peso a esos prósperos empresarios. El colmo es que además la Ciudad le paga a SEC y STO montos millonarios por “ajustes de mano de obra y arreglo de camiones”:
2010 10 millones
2011 28 »
2012 32 »
2013 49 »
2014 54 «
El gobierno macrista sostiene que los sistemas de estacionamiento medido y acarreo son para desalentar el uso de los automóviles particulares, pero no toma las medidas para mejorar el sistema de transporte público. Seguimos insistiendo en la propuesta de Bodart: para que no sean unos pocos vivos que levantan la plata con grúa a costa de todos los porteños, hace falta estatizar el servicio.
Iván Amado
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