El proyecto de la Unidad Popular de Víctor De Gennaro, presentado en su lanzamiento como una alternativa progresista y de cambio, no pudo escapar a la lógica de los que eligen como estrategia la centroizquierda clásica: vino de fracaso en fracaso y terminó abonando a lo peor de la política tradicional que dijo combatir.
Haciendo gala de un notorio oportunismo, la UP que otrora lanzaba diatribas contra el PJ y el ex gobierno K, hoy mendiga un lugarcito en el rompecabezas de la interna pejotista que los lleva a plantear la unidad con personajes tan nefastos como Felipe Solá, ex gobernador de la Pcia de Bs. As. Tristemente recordado por los patacones y la gestión de la crisis post 2001 contra los trabajadores y responsable político de los asesinatos de Kosteki y Santillán. Que Víctor De Gennaro, quien se postula como intendente para Lanús, declare que toma como modelo al pejotista Ferraresi de Avellaneda, es una clara confesión de parte de este derrape político. Una inexorable dinámica de los proyectos que nunca se plantearon superar los marcos del modelo capitalista y por ello terminan asociados a los viejos partidos del sistema.
M.P.
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