Durante los 5 días de esta heroica lucha, compartimos con los trabajadores de la 60 muchos momentos. El corte de la Panamericana, la olla popular, las asambleas, las marchas al Ministerio, y también enfrentamos juntos el gigantesco despliegue represivo. Después del paro, volvimos a charlar con algunos de ellos. Hablamos con Miguel Sotelo, integrante del Cuerpo de Delegados, y con Martín Schermer de la Agrupación “Al Volante”.
¿Qué balance hacen de la reciente lucha?
Miguel: El 80% de los trabajadores tenemos mucha antigüedad y la empresa quiso eliminar las tareas livianas siendo que hay muchos trabajadores en esa situación. Ahora estamos en conciliación hasta el 26, y mientras tanto, la empresa especula con que haya gente que vaya arreglando individualmente y de esa manera se van sacando los de mayor antigüedad. Por ejemplo los que tomaron, están sin tareas designadas todavía, pero igual les tienen que pagar.
Martín: El balance es en parte positivo porque se demostró la unidad y la fuerza de la gente. Sabemos que DOTA es un imperio, la gente toma cada vez más conciencia y se suma a la pelea. Lo negativo es que esta lucha no era solo por los 4 despidos.
¿Cómo se enfrentó la represión?
Martín: Al votar continuar la medida en la asamblea del jueves y estirar hasta el sábado, tiramos al máximo la cuerda. La gente venía votando todo en asamblea y estaba dispuesta a resistir. Y por eso enfrentamos al operativo monumental que armaron.
Miguel: Nosotros empezamos a ver que venían cada vez más choferes debajo de la lluvia torrencial a resistir y a acompañarnos, y bueno, eso abrió la negociación.
¿Cómo sigue la lucha?
Martín: Por ahora el paro está suspendido. La gente sabe que vienen por el cuerpo de delegados y no vamos a permitirlo.
Miguel: Hay que saber que el punto más fuerte que tenemos es que movemos 250.000 personas a diario en provincia y Capital. Cuando para la 60 se produce un serio conflicto. Hasta la presidenta tuvo que mencionarnos. Hay que esperar las negociaciones. Si vemos que hay buenos resultados se evaluará en asambleas. Y allí como siempre, iremos decidiendo que hacer. Hay que superar puntos débiles que tenemos, por ejemplo a pesar que llevamos el apoyo, no pudimos parar en solidaridad con otras líneas como sería la 25. Estamos pensando como apoyar más así esto se extiende.
Entrevistó: Ana Urruti