A diferencia del paro del 4 de abril pasado, cuando la conducción del gremio de los judiciales se negó a convocar a asamblea para discutir nuestra posición, esta vez, producto de la fuerte presión a favor del paro, la AGEPJ debió convocar a asamblea. Primer round ganado por los judiciales. Alineada al gobierno nacional, la conducción con su Sec. General Irina Santesteban a la cabeza, hizo todos los esfuerzos posibles para que los judiciales cordobeses no expresáramos nuestra bronca con el gobierno K que ajusta salarios a los trabajadores y paga millones al Club de París y a los Buitres. Su posición fue la esperable: si parábamos fortalecíamos a los buitres. Desde Alternativa Judicial planteamos la necesidad de adherirnos y sumar nuestros reclamos. Finalmente logramos desbaratar la maniobra de la conducción, amparándonos en la cobertura gremial de la FJA (Federación Judicial Argentina) que sí convocaba al paro.
La necesidad de parar se expresó en que nuestra propuesta que fue la más votada. Segundo round ganado. Primero intentaron decidir por nosotros y luego imponernos de manera burocrática su posición de no parar, pero fracasaron. Una vez más terminaron apoyando, en los hechos, la política de ajuste del gobierno nacional y desconociendo las necesidades de los judiciales.
La bronca contra el gobierno y la simpatía por el paro que expresaron los judiciales, fue lo que llevó al resto de la burocracia sindical cordobesa a no permitir que la base decida qué hacer frente al paro. Las conducciones que no pararon se desgastaron frente a los trabajadores que somos los que sufrimos los topes salariales, la inflación, los despidos y las suspensiones. Somos muchos los que le dijimos al gobierno el 27 y 28 de agosto, que no estamos dispuestos a pagar su crisis.
Ana Klappenbach, Pro Secretaria Gremial AGEPJ
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