Luego del salto de Carrió al macrismo y el secreto a voces de que el radicalismo seguirá el mismo camino, la renuncia de Binner a su candidatura presidencial fue el tiro de gracia para el FAUNEN. Mientras Macri toma la delantera juntando los restos, Massa se desespera por no perder terreno en la disputa. El “progresismo” se derrumba, se fortalecen las opciones más conservadoras y crece el espacio para la izquierda.
El “progresismo” trucho le abre camino a la derecha
La explosión de FAUNEN, ese engendro creado para capturar una parte del espacio opositor al kirchnerismo con cierto barniz de centro izquierda estalló por los aires mostrando una vez más que en los momentos de definiciones los falsos progresistas eligen refugiarse para mantener sus cargos o hacer de furgón de cola de la derecha. Luego de años de gobierno del Frente Progresista en Santa Fe, encabezado por el socialismo, están a punto de perder con Miguel del Sel. No es un chiste, ni una grosera broma de “La Tota” sino la demostración de que todo lo que no avanza retrocede, mas allá del nombre, el socialismo nunca llego a los trabajadores y sectores populares de esa provincia, que hoy como hace diez años se vuelven a inundar, son victimas de la violencia y el narcotráfico y hacen malabares para llegar a fin de mes.
Esa es la explicación de la bajada de Binner, tratar de apuntalar lo que están a punto de perder, mientras sus socios de Libres del Sur van con el kirchnerismo o el PRO en las provincias para manotear un carguito, el GEN de Margarita discute si agarra el fierro caliente de una candidatura presidencial que se desgrana como la mentira de las medias tintas.
Massa ¿tajai?
El muchacho de Tigre que arranco envalentonado la disputa por el sillón de Rivadavia se viene derritiendo al calor de un verano movido. Mas allá de brindar apoyos varios en las provincias (casi siempre a candidatos de otros) no logra generar ni medio entusiasmo en la gente y eso hace que los que primero lo apoyaron hoy empiecen a abandonarlo. Reuteman se fue con Macri, lo mismo que Posse, y no es de extrañar que en los próximos días el desfile continúe. Esta candidatura de cartón pintado se va desmoronando porque no tiene proyecto. El que quiere votar derecha ya lo tiene a Macri y el que quiere kirchnerismo pero no tanto lo tiene a Scioli. Salvo que sus spot logren revertir esta tendencia, todo parece indicar que su candidatura se seguirá desinflando.
Macri, el mejor opositor
Mauricio Macri es sin dudas el opositor preferido para el kirchnerismo, porque le permite compararse con la derecha más clásica. Un gerente de la política que detrás de los globos de colores y las promesas de gestión esconde un profundo desprecio por lo público, por los trabajadores y por lo nacional. Qué mejor opositor entonces que Mauricio y su tren fantasma donde ya engancho el vagón de Reuteman, Carrió y en los próximos días enganchara el vagón de la UCR. Una verdadera Alianza de derecha que hace que hasta Scioli sea un sapo aceptable para los empachados seguidores Nac and Pop.
Es en este marco que se fortalece relativamente, y decimos relativamente, porque a pocos meses de la elección no hay fuerza política que supere el 25% de la intención de votos. No logran convencer ni entusiasmar, porque a pesar de los colores y los fuegos de artificio, la mayor parte de nuestro pueblo sabe que son más de lo mismo.
Construir una izquierda con propuestas y ganas de gobernar
El escenario político generaba todas las condiciones para que emergiera un nuevo espacio unitario que disputara de igual a igual con los aparatos de la vieja política. Lamentablemente, el FIT ha decidido rechazar las propuestas unitarias y lo mismo hicieron Lozano y De Genaro.
Desde el MST-Nueva Izquierda no dejaremos de pelear por esa salida, pero al mismo tiempo creemos que es fundamental fortalecer la construcción de otra izquierda. Que desde las propuestas de cambio pueda confluir con todos aquellos que están cansados de peronismo, radicalismo o sus variantes. Con todos aquellos que ven que ni la justicia es justa ni los políticos nos representan y es necesario pensar en otra democracia, con derechos para todos y privilegios para nadie. Ese desafío te invitamos a encarar con nosotros.
Martin Carcione
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