Pagan al Club de París y ajustan salarios

Spread the love

.

.

.

Francisco Torres

.

En el G20, Cristina K cuestionó al capitalismo financiero y alertó sobre salvar a la banca, ajustando a los pueblos que luego se levantan… Otra muestra de su doble discurso ya que venía de reunirse con Boudou y el jefe del Tesoro francés para acordar cómo pagarle la deuda usuraria al Club de París.

Los K hablan también de condenar a los militares genocidas, pero Cristina apura los trámites para retomar los pagos de una deuda contraída mayormente por la dictadura. Y no es poca plata: según Economía, esa deuda en default del 2001 era de 6.276 millones de dólares, el equivalente a pagar un millón de cooperativas por dos años a los desocupados.

Pero los acreedores quieren cobrar U$S 8.900 millones por intereses y punitorios, es decir, un 42% más que Cristina les pagaría sin mucho pataleo. Con esos $11.230 millones de diferencia se podrían construir hasta 93.500 viviendas populares. Pero el acuerdo traería además el pago a las empresas norteamericanas que ganaron juicios contra el país ante el Banco Mundial (CIADI) como Azurix por su vergonzoso contrato del agua bonaerense. Y retomar la negociación con los fondos buitres que no entraron al canje… Toda una vuela más de capitalismo financiero.

Y esto lo propone cuando su gobierno plantea ajustar los salarios del 2012 como su propuesta para contener la inflación. Mientras toman medidas que encarecen el dólar y las tarifas, impactando en el poder adquisitivo de los salarios, jubilaciones y planes sociales. Mientras gobernadores como Scioli sacan una ley impositiva con fuertes subas del inmobiliario, ingresos brutos y patentes. O intendencias como la de La Plata quieren aumentar la tasa por Servicios Urbanos hasta un 200%.

La patronal de la UIA también promueve un acuerdo de precios y salarios, un pacto social “para administrar la escasez” como dijo el titular de FIAT. Lamentablemente Binner con el voto de muchos buscando un cambio, plantea lo mismo: congelar salarios y precios por 3 años para frenar la inflación. Ya Binner había dicho a los trabajadores que “no pidan aumentos”, justo cuando los estatales en las provincias luchan por una nueva suba en paritarias y los cooperativistas del Argentina Trabaja reclaman un aumento.

La CGT, en vez de batir el parche por el reparto de las ganancias, debería convocar a asambleas y congresos de delegados para resolver un plan de lucha por un inmediato aumento de salarios, jubilaciones y planes sociales. Y rechazar el pago de la deuda usuraria al Club de París para que esos recursos vayan al pueblo.

Exigiendo también que se eliminen el pago de ganancias en los salarios y los topes a las asignaciones familiares. Partiendo de apoyar a los que están luchando. Esto debemos reclamar en cada gremio y lugar de trabajo para poner en marcha un plan que priorice realmente las necesidades populares y no la deuda externa al capitalismo dominante.


Publicado

en

por