Lo primero a decir sobre el balançe del III Congreso Nacional del PSOL realizado el 2,3,4, de diciembre en San Pablo es que su resultado es positivo. Revela que el partido se há consolidado como proyecto político a la izquierda del gobierno de Dilma y los partidos del régimen, aunque tenga elementos contradictorios por el surgimiento de un ala que está presionada por el proyecto de la ex ministra Marina Silva. El congreso contó con la presencia de 334 delegados inscriptos, representando a un universo de cerca de 13 mil afiliados de diferentes estados.
El marco general de realización del congreso se inscribe en el giro de la situación mundial. Estamos ante un cambio de etapa. Esta nueva fase, que recién comienza, combina una crisis profunda del capitalismo con resistencias en el centro del planeta (Europa y EE.UU.) y revoluçiones democráticas en el mundo árabe.
En cierta forma, la crisis comenzó a dar sus primeros signos, como lo atestigua el estancamiento del crecimiento económico en este final de año. En el terreno político, en Brasil se vive una coyuntura de estabilidad relativa, con innumerables casos de corrupción del gobierno y la falta de apoyo a los partidos revela un descrédito popular hacia las propias instituciones del régimen burgués.
En este panorama general, el PSOL se sigue desarrollando, pese a las insuficiencias. El PSOL está bien posicio-nado como un partido que no acepta la política tradicional de los partidos burgueses y del régimen actual, teniendo en sus regiones una serie de iniciativas parlamentarias y políticas que comprueban el espacio abierto a izquierda.
Lo más significativo es Río de Janeiro, donde el PSOL tiene su expresión política mas fuerte en términos simbólicos, ligada a la lucha de los derechos humanos y enfrentada con las mafias del crimen organizado protegido por el Estado.
Se trata del diputado estadual Marcelo Freixo. Como precandidato, en Rio de Janeiro en algunos escenarios llega al 15%, arrastrando importantes apoyos de artistas y personalidades. El mandato de Janira es también una referencia para todos los sectores y gremios en lucha en el estado de Río de Janeiro. Su actuación, especialmente en el caso del levantamiento de los bomberos, fue ejemplar.
Pero no solo en RJ el PSOL es un polo de atracción. En Belén, Edmilson aparece con mas de 40% en las encuestas a intendente. En el DF, donde la situación política empuja a un mayor apoyo al partido. En Fortaleza, con Renato apareciendo con 10%. Nuestra votación en el premio Congreso en Foco, donde Chico fue escogido el mejor parlamentario de la cámara. En Rio Grande do Sul, donde a pesar de la mayor fuerza relativa del PT, comparado con su par de RJ, por ejemplo, nuestra regional sigue desarrollando el partido con capacidad de postularse como fuerza más importante en la juventud del estado y con expresiones públicas con peso social como Ruas, Fernanda, Luciana Genro, además de tener un precandidato a intendente que dará disputa de masas con nuestra política anticapita-lista. O sea, tenemos una dinámica de acumulación y respaldo en franjas de la opinión pública.
Como ocurre en un partido revolucionario que tiene influencia de masas y diferentes corrientes internas, el Congreso sufrió presiones externas por el nombre de Marina Silva. En el partido empezó un movimiento que defiende que ella sea la candidata del PSOL en 2014.
El combate a esa política fue el centro de la intervención del MES, junto a otros aliados, en particular la CST. Es que con el cambio de la situación mundial y nacional, con certeza los próximos años serán marcados por la necesidad de dar una respuesta anticapitalista a la crisis económica. Y ciertamente esa respuesta no puede ser dada por Marina, que defiende abiertamente la misma política económica del PT y el PSDB. Esa presión externa aún se sintió sin mucha fuerza en el congreso, justamente por la decisión del MES de lanzarse al combate contra esta política que abandona la propia identidad del PSOL.
Se ha formado lo que puede llamarse un ala derecha del partido, que debilita nuestro proyecto estratégico y de la cual también es una expresión el senador Randolfe, que defiende una linea de menor enfrentamiento con el gobierno y llega al punto de sustentar la hipótesis de repetir la alianza con el PTB en las elecciones municipales de 2012. Creemos que tal política no va a primar.
Asimismo, podemos decir que como en todo partido real, con influencia en sectores de masas y construido en base al pluralismo de izquierda, hay dos tendencias a su interior: las tendencias a favor de la adecuación, desvinculadas de las revoluciones que ocurren en el mundo, y nuestra tendencia junto con otras corrientes, que queremos al PSOL vinculado con los socialistas del mundo, ligado a las luchas y participando de las elecciones con perfil propio, como partido anti-sistema. En el congreso, la corriente que es mayoritaria y que ganó la presidencia con el diputado Ivan Valente, tiene en su interior las mismas dos tendencias que se expresaron en el congreso.
De esta forma, el trabajo futuro por la construcción del partido y por influenciar al máximo en su interior será fundamental. Apostamos a que con la llegada de la crisis y la reacción de las masas a la misma el partido estará en condiciones de incorporar muchos más jóvenes y luchadores sociales radicalizados, que permitirán que el PSOL mantenga su estrategia revolucionaria.
Pedro Fuentes, Secr. Relaciones Internacionales del PSOL