Los docentes catamarqueños están de pie, indignados por la traición de la dirigencia de Ateca, Suteca, UDA y Sadop que pactaron con el gobierno de Corpacci un 12.5% en forma inconsulta, mientras las bases exigían un 30%.
“Es una lucha de todos por algo que es justo, por temáticas que preocupan a los docentes. Queremos tratar muchos temas con el gobierno, no sólo los salarios”, sostuvo Pablo Pinela, delegado de la capital.
Desde hace dos semanas se organizan con asambleas permanentes, paros de brazos caídos, clases públicas y marchas. El viernes 9 hubo una movilización de mil docentes, llegados de la capital, Tinogasta, Belén, Andalgalá y Fiambalá. Los delegados de base de las escuelas decidieron seguir el 14 y el 16 con paros de brazos caídos, asistiendo a sus lugares de trabajo pero sin prestar servicios Y llamar el 15 a una movilización a Casa de Gobierno, convocando al paro total en la provincia.
Daniel Blanes