Los judiciales llevamos más de dos meses de un fuerte conflicto que arrancó con un paro el 7 de febrero; abarcó varias medidas por semana y ya incluye más de 20 días de paro ininterrumpido; innumerables cortes de ruta y de calles; ocupaciones de edificios y la Corte; varias marchas provinciales a la gobernación, a la Corte y a la Capital; junto a las asambleas cotidianas por Departamental donde definimos la lucha.
Reclamando un 30% de aumento, acorde a la inflación creciente y que se restablezca la Porcentual. Ley que fue quitada tanto por la dictadura como por el gobierno “democrático” del PJ en los ’90. Esa ley consiste en un enganche de los sueldos de los empleados con los jueces de la Suprema Corte. Así, cada vez que ellos se dan un aumento, los sueldos de los trabajadores suben un porcentaje. Garantizando así un salario digno y que se achique la terrible brecha social, ya que un ingresante cobra unos $ 2700 y un oficial primero, con 10 años de antigüedad, $ 4.500; mientras un juez de la Corte cobra entre $70.000 y $90.000.
Con la lucha logramos que el gobierno de Scioli pasara del 18% inicial a ofrecer hasta un 26%. Pero podemos ir por el 30% enmarcado en la Porcentual. Este justo reclamo por fijar un cronograma que vaya restableciendo la Porcentual fue ninguneado, pese a que el gobierno llamó a la AJB a varias reuniones para eso. Dicen no tener plata para un mayor aumento mayor ni para enmar-carlo en una propuesta por la Porcentual. Cuando, al mismo tiempo, anuncian recaudaciones récords…
Desde arriba se ponen nerviosos y quieren cerrar la negociación por decreto y descontar los días de paro. Encima militarizan los Tribunales y edificios de la Justicia. Pero los judiciales seguimos firmes, superando incluso la actitud de algunos sectores en el conflicto.
Dirigentes del Encuentro (Pérez Guillén) no ocultan su simpatía con el gobierno K y juegan para levantar, llegando incluso -en Departamentales como San Isidro- a no aparecer durante la ocupación policial. Mientras grupos como “Judiciales en Lucha” (PO) o “Judiciales de Pie” (PTS) se centran en denunciar a la Corriente (Blasco) como conducción, más preocupados por las próximas elecciones que por el curso de la lucha. Llegando al ridículo de denunciar un supuesto “levantamiento de medidas de parte de la directiva, un acuerdo con la Corte de no hacer tomas y la falta de plan de lucha…”. Su afán de golpear a la conducción de la AJB y, por esa vía a la CTA, los lleva a negar la toma de la Corte del martes 24 de la que el PO estuvo ausente.
Necesitamos la más amplia unidad y muestras de solidaridad como la Jornada del 26 con la CTA. Ampliando el conflicto y confluyendo con gremios como ATE. Siguiendo con la AJB en unidad, con un plan de lucha refrendado día a día en asambleas; recorriendo oficinas; armando un Fondo de Huelga, rechazando cualquier maniobra de “conciliación” y continuando con las medidas para obligar al gobierno a dar curso a nuestro reclamo.