En defensa de nuestros recursos y el medio ambiente
Entre los días 20 y 22 de junio se llevará a cabo en Río de Janeiro, la Conferencia de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sustentable conocida como Cumbre de la Tierra Río + 20 (en alusión a que hace 20 años se realizó la primer cumbre de la tierra). En este evento, que contará con presidentes o funcionarios de primer orden de más de 80 países Naciones Unidas y los países hegemónicos querrán hacer pasar un modelo llamado de “economía verde”, que detrás de una pantalla de supuesta preocupación ambiental solo busca alimentar nuevas vías de inversiones y expansión del capitalismo especulativo para su propia riqueza y desarrollo. Como parte de su estrategia de utilización de los recursos naturales y estratégicos en función de su ganancia y de actuar en el marco de la crisis global que vivimos. Detrás del discurso buscan ponerle precio y hacer un mercado sobre todo, incluyendo el agua y el medio ambiente.
Como parte de la misma crisis, posiblemente en el evento haya debates y distintas miradas, principalmente de los países dependientes. Ya que representan distintas realidades, necesidades económicas e intereses. Pero estas diferencias que son lógicas, intenta pasarse en boca de algunos gobiernos como una lucha entre “gobiernos progresistas” y las potencias. Pero en el debate de fondo la realidad no es así, ya que si bien es cierto que las grandes potencias son principales responsables de la destrucción del planeta, los gobiernos de países dependientes mal llamados progresistas, también agreden la naturaleza, permiten la explotación de nuestros recursos y son cómplices y parte del saqueo que sufren nuestros países.
Valga el ejemplo del gobierno argentino de Cristina Kirchner que permite a las transnacionales mineras destruir enormes territorios mientras sus funcionarios son socios del saqueo y la gendarmería reprime a los que se oponen. O el caso de Humala en Perú, enfrentado a la población de Cajamarca que lucha contra el proyecto Conga. Menos aún, podemos esperar que en el marco de la Cumbre de Río sea por ejemplo el gobierno chino quien defienda nuestros intereses frente a otras potencias, cuando es uno de los principales interesados en seguir explotando en Latinoamérica nuestros recursos. O el gobierno de Dilma en Brasil, que aunque ahora esté por presentar un proyecto de dos zonas de protección ambiental, a la vez permitió todos estos años la deforestación de zonas enormes y fogonea en Brasil y en países limítrofes el desarrollo de negocios por encima de la defensa del medioambiente.
La Cumbre de los Pueblos
Paralelo al evento de Río + 20 se desarrollará la Cumbre de los Pueblos, donde una enorme y muy diversa cantidad de organizaciones sociales, políticas, ambientales, ecologistas y de otros tipos, nos daremos cita para debatir como enfrentar la depredación del planeta y como organizar las luchas contra los gobiernos, que más allá del color de turno, atacan por intereses económicos nuestros recursos naturales y estratégicos y nuestro medio ambiente.
En este sentido es que desde el MST vamos a participar de la Cumbre de los Pueblos, para llevar nuestras propuestas sobre el tema y para ayudar a la socialización de las luchas que se vienen llevando adelante en Famatina, Tinogasta, el Chaco impenetrable agredido por inversiones extranjeras y por la instalación de una base militar financiada por el Comando Sur de los EEUU bajo la excusa de “ayuda humanitaria para desastres naturales”. Eso permite y avala el gobierno de CFK.
Y también vamos a la cumbre de los pueblos para intercambiar, con militantes y activistas de distintos países, sobre como avanzar en nuestras demandas. Sabiendo que así como un primer paso es el apoyo a todas las luchas que enfrentan la destrucción y el robo de nuestras riquezas, la salida por la que luchamos va unida al enfrentamiento a los gobiernos que lo permiten y a la construcción de alternativas políticas antica-pitalistas y socialistas. Que luchan por un modelo económico que rompa con el extractivismo y la depredación y planifique la producción y todo lo referente a nuestras riquezas naturales y estratégicas en función de las necesidades populares y en común con las comunidades de las zonas en cuestión. Como construir este modelo es un debate abierto al cual la Cumbre de los Pueblos le sumará miles de voces y honestos e interesantes aportes. En el marco de saber que el continente que queremos se construye entre millones y parándonos de frente contra todos los poderes capitalistas e imperialistas que subsisten y vienen por todo.
S.G.