Luego de haber obtenido casi 20 mil votos en las primarias, la campaña del MST – Nueva Izquierda sigue avanzando a paso firme en Entre Ríos. Un primer objetivo de la campaña de cara a las elecciones del 27 de octubre ha sido el de llegar con nuestras propuestas y nuestros candidatos a las principales ciudades de la provincia. Hemos estado presentes en debates, movilizaciones y volanteadas, no solamente en Paraná, sino también en Concordia, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú. Un segundo objetivo ha sido el de organizar a quienes nos acompañaron con su voto en Agosto y simpatizan con nuestra fuerza. Para ello realizamos reuniones y plenarios abiertos a los cuales se han acercado nuevos compañeros y compañeras para debatir nuestro programa y sumarse a las acciones de campaña.
El escenario provincial
Luego del retroceso de las PASO el gobierno de Urribarri ha salido a redoblar la apuesta. Atentos al retroceso nacional del kirchnerismo, han centrado su campaña en la figura del gobernador y su proyecto presidencial sin presencia de la presidenta en los afiches y spots de campaña. Así, intentan convencer a los entrerrianos que el sueño presidencial de Urrubarri es «el sueño entrerriano». Sin embargo, la bronca con el gobierno nacional que se expresó en todo el país se expresa también en nuestra provincia. Por otro lado, la oposición sigue dando muestras de que no es alternativa. La última expresión de esto la dio el rejunte de De Angeli, el PRO y el Bustismo. Mientras De Angeli salió a apoyar la lucha de Gualeguaychu, Macri se posicionó del lado de Botnia – UPM demostrando los intereses que representa su partido.
Se confirma la necesidad de una alternativa tricolor
En este marco, la situación política y social luego de las PASO sigue confirmado la necesidad de fortalecer una alternativa de izquierda que defienda los derechos sociales, ambientales y de la mujer. En cuanto a la defensa del ambiente, la lucha de Gualeguaychú contra las pasteras ha vuelto a colocar a la provincia en el centro de resistencia contra el saqueo de las grandes corporaciones. A esto tenemos que sumarle la creciente presión de las asambleas contra el Fracking, y la lucha contra los agroquímicos y Monsanto. Estas luchas han obligado al gobierno provincial a reposicionarse, pronunciándose contra la pastera y afirmando que no hay proyectos para extraer hidrocarburos en Entre Ríos. Sin embargo, a tono con la situación nacional, pocos creen en el doble discurso.
Con respecto a los derechos sociales y de los trabajadores, a pocos días de las PASO el propio INDEC confirmó que Entre Ríos tiene la ciudad que lidera el podio nacional del trabajo en negro: Concordia, con más del 40% de sus trabajadores en esta situación. Esta es solo una muestra de las cifras de la «década ganada» en nuestra provincia, entre otras, solo el 50% de los estudiantes termina el secundario, y nuestros docentes y trabajadores de la salud están entre los peores pagos del país. Esto confirma la necesidad de una alternativa que defienda los derechos de los trabajadores.
En materia de derechos de la mujer la situación de la provincia también es alarmante. La presencia de las redes de trata que operan impunes bajo el amparo del estado volvió a demostrarse recientemente con un nuevo caso de una niña desaparecida en Concordia. La violencia de género es constante con (al menos) 15 casos de femicidio durante el 2013. La lucha contra la complicidad estatal con las redes de trata y por verdaderas soluciones para las víctimas de violencia adquiere una importancia central en nuestra provincia.
Al compás de esta realidad, marcada por injusticias pero también por luchas, seguimos recorriendo la provincia con las propuestas de una nueva izquierda roja, verde y violeta, que lleve la lucha por los derechos de los trabajadores, por la justicia ambiental y por los derechos de la mujer al congreso.
Luis Meiners, Candidato a Diputado Nacional