La Universidad Nacional de la Rioja con el acompañamiento de la sociedad, estuvo tomada más de 20 días, protagonizando una verdadera pueblada, con miles y miles en las calles. La lucha contra el régimen universitario totalitario y feudal le asestó un duro golpe a las políticas neoliberales tanto del gobierno de Beder como al de Tello Roldán. La juventud riojana marcó el camino y se pone a tono con las luchas de las juventudes del mundo, conquistando una victoria histórica en materia de democracia participativa, organización y lucha.

La UNLaR es una universidad menemista de las que se crearon en la década de los 90, a la luz de la naciente Ley de Educación Superior. Una ley que sigue vigente hoy y que el kirchnerismo pretende profundizar con una nueva ley, que ya tiene media sanción en diputados.
La UNLaR se regía por el modelo de las universidades privadas, ideado por el Banco Mundial para adaptar la educación a las necesidades del mercado. Una universidad privada con fondos públicos: limpia y muda, repetitiva y memorista. Un centro de entrenamiento para los futuros profesionales, dóciles y mercenarios, que el neoliberalismo necesita.
Lejos quedaba el modelo de universidad pública, democrática, laica y científica que soñaron los jóvenes de la Reforma del ‘18.

Empieza la rebelión 

Tuvieron que pasar 26 años para que una verdadera pueblada echara por tierra años de tiranía y despotismo de un poder feudal, que existía en la universidad como fiel reflejo del poder político, social e institucional imperante en la provincia de La Rioja. El despertar del estudiantazo riojano se dio a partir del despido masivo de 40 docentes, teniendo como trasfondo el hartazgo por la tiranía corrupta y feudal del ex rector Tello Roldán y sus funcionarios. Éstos, con la complicidad del gobierno y la justicia, permitieron los sobresueldos, la reelección indefinida, la persecución al que pensaba distinto, los despidos sin causa, la destrucción de toda actividad sindical, el acomodo a dedo de familiares y amigos en cargos públicos. Además, con el aval de la LES, la UNLaR negociaba con grandes empresas, como las mineras, para que financiaran la universidad en detrimento de la calidad educativa.

Famatina, UNLaR y elecciones: nuevos males de Beder y Tello 

La causa socioambiental de Famatina fue un golpe mortal, no sólo a la política minera contaminante de La Rioja, sino a todo el modelo productivo del país. El despertar de los pueblos precordilleranos dio un empujón a todas las luchas ambientales. El Famatina marcó el camino a seguir y sentó un precedente: con la organización y la lucha, se puede quebrar a un gobierno clientelar y entreguista como el de Beder Herrera. Las elecciones pasadas fueron un cachetazo a la política añeja del peronismo de la provincia. Toda la estructura clientelar y fraudulenta del PJ, que hace más de 30 años que gobierna La Rioja, no pudo contra un pueblo que tomó conciencia y emprendió un camino de ruptura con los viejos partidos. La sublevación de los estudiantes de la UNLaR guarda una profunda relación con todo esto. Hay un pueblo que dijo basta a los atropellos e imposiciones. Y, sin urnas, los jóvenes salieron a las calles, para luego llegar a la toma de la universidad con el fin de ser escuchados y terminar con el feudo.Estos son los nuevos males de las viejas prácticas de la política riojana. El primero tiró a la política minera. El segundo le dio una derrota histórica al peronismo. Y el tercero cierra el capítulo del feudalismo tellista.

Fracaso K, triunfo popular… 

El kirchnerismo, desesperado por la pueblada riojana, se dió dos líneas importantes. Primero, cercar mediáticamente el conflicto para que no tome dimensiones nacionales. Ninguna de las dos “corpos” mediáticas (ni la de Clarín, ni la del gobierno) se hizo presente. Lo segundo fue tratar de frenar la marea organizativa y de lucha de los estudiantes universitarios, soltándole la mano a Tello, a través de la elección de un nuevo rector, con un interinato de 10 meses. Intentan ubicar un nuevo personaje que, con doble discurso genere esperanza de cambio y democracia mientras normaliza vía la LES el proceso en la UNLaR. A pesar de todo, el poder de la coordinación nacional estudiantil logró superar el cerco mediático, consiguiendo una amplia solidaridad. Los reclamos de la UNLaR fueron un estímulo que actuó sobre los estudiantes de Tucumán, Salta y la UBA.

Una nueva etapa: las tareas que se viene y el desafío de democratizar en serio 

Nada va a volver a ser como antes en la UNLaR. Hoy los estudiantes están en medio de un proceso de reforma estatuyente, discutiendo la democracia directa, la modificación estamental en los órganos de co-gobierno, la estabilidad laboral para los docentes, los concursos, etc. Y, fundamentalmente, han tomado la decisión de mantenerse en Asamblea soberana permanente para garantizar el control estudiantil sobre las nuevas autoridades. Los estudiantes sacaron la conclusión que podemos organizar y definir nuestra vida universitaria porque somos quienes les damos vida a las paredes de la UNLaR. La movilización y organización permanente en los próximos meses son la única garantía que tenemos para conquistar los derechos y libertades que faltan avanzando hacia una verdadera democratización de la universidad.

Jessi Gentile

El MST-Nueva Izquierda en La Rioja

A lo largo del conflicto de la UNLaR la JS del MST participó para conocer, solidarizarse y coordinar con los estudiantes en lucha un gran movimiento a nivel nacional que dé pelea por la educación pública, pero que también tenga la capacidad de trascender las fronteras universitarias dando respuesta a los problemas estructurales del pueblo argentino. Con más de una decena de jóvenes, estudiantes, egresados y docentes hemos emprendido un desafío enorme: la construcción en la Rioja del MST-Nueva Izquierda.
Sobre este tema hablamos con Macarena, egresada y activista de Ciencias Políticas, recientemente incorporada al MST. Esto nos decía:

A.S.: Macarena, contanos como vos y un grupo de jóvenes deciden hacer esta experiencia política con el MST en La Rioja

Macarena: A posteriori de lo acontecido en nuestra Universidad, y de que el espíritu de lucha cruzase sus portones y llegase hasta la plaza para marchar a paso firme por un cambio real, buscando arrancar de raíz las prácticas viciadas que se efectuaban en la misma, es que ha surgido en nosotros, como jóvenes, una razón por la cual construir un camino alternativo y emprender una experiencia con los amigos del MST acá en La Rioja”

A.S. ¿Y por qué ahora esta decisión?

Macarena: Creo que todos los procesos cumplen su ciclo y luego de las crisis los paradigmas cambian. Nuestra cultura política ha sido por muchos años golpeada y se encuentra en un estado de total agonía. Sin embargo, consideramos que es posible revertir esta situación y que es nuestra responsabilidad trasmitir y contagiar a la sociedad riojana en general la conciencia cívica y social que se ha perdido. Debemos dejar de ser ese universo paralelo donde reina la apatía, para pasar a ser un paraíso donde la participación sea soberana.

Macarena junto a un grupo de activistas de la UNLaR resolvió avanzar en la construcción con el MST de esa alternativa que necesitamos estudiantes y pueblo todo de La Rioja y Argentina para provocar los grandes cambios estructurales que necesitamos. Un orgullo y un desafío para toda la JS del MST en Argentina.

J.G.

Una lucha bisagra: que se vayan todos

Fueron varias semanas de debate democrático que terminaron definiendo el petitorio de la movilización: La renuncia del Rector, de todos los Decanos y la modificación del Estatuto Universitario. Y el movimiento estudiantil riojano fue por todo.
La lucha de la juventud de la UNLaR actuó como caja de resonancia de reclamos de la sociedad riojana de democratización, contra el patoterismo y las imposiciones reinantes en la provincia. Fue fundamental la solidaridad, apoyo y la intervención política del pueblo riojano en la lucha con los estudiantes para dar el primer paso en contra de la tradición política autócrata. Marchas crecientes de 8000, 20.000 y el punto más alto de este proceso fue la movilización del 8 de octubre cuando 50000 personas coparon las calles exigiendo democracia real en la UNLaR. El estudiantado había encabezado la movilización más imponente de la historia de la provincia. Impresionante.
A pesar de los intentos del gobierno nacional por desactivar el proceso, el pueblo movilizado logró que se vuelva realidad lo que durante años había parecido imposible: el 9 de octubre la Universidad de La Rioja se había sacado el lastre del Tellismo.
Se nombraron el nuevo rector y decanos, votados por la asamblea universitaria y aprobados previamente por la asamblea de la UNLaR. Hay un enorme paso dado y se mantiene la asamblea soberana, como órgano consultivo, democrático y con mayoría estudiantil hacia los próximos 10 meses mientras dure el interinato, tiempo en el cual deberán cumplirse las reivindicaciones exigidas en el acta-acuerdo que el nuevo rector, Calderón, se vio comprometido a firmar el día de su asunción.

Lina Vizcarra Avila