Siguiendo el modelo de Presupuesto con que Cristina impuso ajustes en las partidas sociales, altísimos pagos de la fraudulenta deuda externa y mayor endeudamiento, Scioli presentó su proyecto 2014. Pero la crisis abierta por la derrota electoral le está impidiendo aprobarlo. Hay chantajes de Massa, la UCR y el GEN. Mientras con la CTA, lo enfrentamos.
El Presupuesto 2014 que presentó Scioli insiste con el trayecto de ajuste del 2012 y 2013. Es que nominalmente, las áreas más sensibles ‘aumentan’ por abajo de la inflación. Eso implica que siguen los recortes en Educación, Salud, Desarrollo Social o Niñez y Adolescencia. Partidas que tampoco crecen en su participación respecto al presupuesto general.
También ajustan en salarios, insumos y servicios en general. Siguen los recortes en los cargos de planta permanente, con más temporarios, becas y mayor precarización. La planta permanente se vería reducida en 5.343 cargos respecto al 2013. Y si tomamos el 2012, con su Decreto 03, la pérdida acumulada sería de 11.527 cargos.
El proyecto preveé además fuertes pagos a la mal llamada deuda pública y un nuevo endeudamiento (sin incluir salarios) por $15.000 millones. En el paquete impositivo se propone una sobre tasa del 18% en los impuestos inmobiliarios urbano y rural que pagamos todos, para ir supuestamente a Seguridad.
La debilidad en que quedan Scioli y los K brinda espacio para que los representantes de la vieja política quieren ‘aprovechar’ y cambiar votos por cargos o prebendas. Así se evidencia un acuerdo más global del gobierno K con el Frente Progresista de Binner y Stolbizer al confirmar que Gerardo Milman (GEN) podría encabezar el AFSCA, la autoridad de cumplimiento de la Ley de medios.
UCR, PS, GEN y Massa: chantajean para negociar
Sin el PS, el GEN y la UCR, no hay quórum para tratar el presupuesto ni la ley impositiva. La UCR pareciera no tener segura su mordida y amenaza con no votar los impuestos, aunque sí votaría el presupuesto y el nuevo endeudamiento. Igual que otros años anteriores, la excusa es la gobernabilidad.
Ya el diputado Juárez del GEN (bancada del FAP), aclaró: «la Provincia tiene que tener un presupuesto como corresponde, aprobado por esta Legislatura». El Frente Progresista no tendría problemas en avalar el ajuste 2014 si ponen más tasas al juego y se achica la propaganda oficial.
Todo se puede arreglar, responde la ministra Batakis, aclarando que puede retocarse el paquete impositivo, «si la oposición nos dice que quiere…».
El massismo afirma que no votará el nuevo endeudamiento por 15.000 millones. Sin los diputados de Massa (que votaron siempre con Scioli) no hay 2/3 para tratar nueva deuda. El gobierno amenaza con prorrogar el actual presupuesto si no le votan el nuevo y poder usar 50.000 millones sin control.
Pero el chantaje del massismo podría desnudarse rápido. Es que así funciona esa vieja política del sistema. Por eso votaron juntos los presupuestos de ajuste en estos años.
¿De dónde sacar los fondos?
Entre las chicanas al massismo, el ministro Arlía dijo que «la Provincia tiene un desfinancia-miento estructural que no se puede cubrir aumentando los impuestos ni achicando gastos. Esto es consecuencia de la pérdida en la coparticipación federal y en la porción del 10% de ganancias que viene sufriendo el Estado bonaerense». Recordando que en 1996 se congeló el Fondo del Conurbano.
Pero lo que proponen no implica presionar a Cristina para recuperar los fondos cedidos a Nación por coparticipación o el Fondo del Conurbano. Al contrario, plantean aumentar impuestos y achicar gastos.
La movida del 14 de la CTA, Seccionales combativas de SUTEBA, ATE, CICOP y Judiciales, más los movimientos sociales, plantea los trazos de un presupuesto al servicio del pueblo: Dejar de pagar la fraudulenta deuda pública e investigarla. Reclamar que se restituyan los fondos coparticipables que se queda el gobierno K. Y hacer una verdadera reforma impositiva, donde paguen más lo que más tienen.
Francisco Torres, Mesa CTA Bonaerense Alternativa Docente