La Corriente Emancipación Sur organizó en el Hotel Bauen de Buenos Aires, el pasado jueves 21, una charla-debate que obró a modo de presentación en sociedad. Integrada por sectores de Proyecto Sur que siguen levantando las causas antiimperialistas, entre otros, realizaron una mesa en torno a la cuestión de la soberanía, convocando asimismo a partidos y organizaciones amigos.

El Diputado Jorge Cardelli, coordinó y abrió el encuentro, planteando la dependencia de nuestro país y de la región como el problema de fondo que compromete la vida en todos sus planos y de las generaciones futuras. Los panelistas desarrollaron exposiciones sobre la soberanía alimentaria, la situación social y la deuda externa. También se destacó la necesidad de avanzar en un gran frente de unidad. De ahí el lanzamiento de la Corriente Emancipación Sur. Como dijeron los compañeros “Creemos aportar, con esta herramienta, a garantizar que la lucha democrática electoral y la posibilidad de ganar espacios en el aparato del Estado no claudique sus banderas de liberación nacional.”

Participaron la colombiana Tania Camila Bonilla de Marcha Patriótica, e integrante del Frente de lucha por la Soberanía Alimentaria, Nahuel Levagge de Unión de Trabajadores de la Tierra (FPDS) y Hector Giulliano, experto en el tema, desarrolló el impacto actual de la deuda externa y desenmascaró el relato oficialista del “desendeudamiento”. Explicó el carácter sistémico y usurario de la deuda externa, que por ello mismo es fraudulenta e impagable. Y desplegó con cifras oficiales el verdadero estado de nuestra deuda pública, explicando que se toma  más  deuda para refinanciar la existente y además es la exigencia que nos imponen para garantizar la gobernabilidad de los partidos tradicionales, completando el círculo perverso a que estamos sometidos.

Nuestro partido estuvo representado por el Diputado Alejandro Bodart, quien dirigió un saludo a los presentes, Guillermo Pacagnini y el comunero Rubén Tzanoff.

Se invitó a la preparación de un próximo foro en el que se incluirá el tema de la dependencia en el continente.

 La articulación de una amplia confluencia de toda la izquierda política y social y las fuerzas populares alrededor de un programa antiimperialista y anticapitalista es una necesidad y la realidad brinda condiciones favorables para avanzar. La articulación con esta corriente abona en ese sentido unitario.