En una realidad dominada por los números, a fines de enero de 2007 el gobierno nacional decidió despreciar el aporte que hacía -y debe hacer- el sistema estadístico nacional e intervino el INDEC, iniciando la página más negra de los índices oficiales.
Ya en ese momento los trabajadores, organizados en ATE, dijimos que el gobierno lo hacía para esconder su ineficacia en contener la inflación y la impericia de Guillermo Moreno con sus operativos de «control de precios», y para poder utilizar los índices para reducir los aumentos salariales en las paritarias. Y lo hicieron sabiendo que el sistema estadístico es un sistema, que al alterar el resultado del Índice de Precios al Consumidor (IPC) también alteraban a la baja los porcentajes de pobreza, indigencia y crecimiento del Producto Interno Bruto.
Pero esa intervención fue más allá de desplazar personal. Montaron un sistema represivo, con patotas, guardaespaldas de funcionarios e ingreso de policías como guardias de seguridad, que hoy perduran. Además se utilizó un mecanismo de discriminación contractual y salarial.
Todo esto lo denunció nuestra Junta Interna a nivel nacional e internacional. Logramos fallos favorables en la justicia nacional, recomendaciones de la Defensoría del Pueblo de la Nación, la Auditoria General de la Nación y la OIT, que instó al gobierno a «cesar la persecución a los trabajadores que denuncian la manipulación de los índices que produce el INDEC».
Ya todos saben que el gobierno nacional miente desde hace casi siete años. Los trabajadores, que venimos denunciando esas mentiras, tenemos que alertar al pueblo y sus organizaciones que el nuevo IPC (llamado IPC «Nuevo Urbano»), en manos de quienes hicieron de la manipulación un hábito, va camino a convertirse en otro instrumento oficial para ocultar la inflación real y la incidencia de los nuevos aumentos de transporte y combustible. O vamos a una nueva operación de maquillaje para ocultar la verdadera variación de precios, o tenemos la oportunidad de comenzar a recuperar el INDEC.
Raúl Llaneza, Delegado general ATEINDEC