El Gobierno porteño continúa con su plan de ajuste a la salud. A los recortes de salario, despidos y reducción de presupuesto, se le incorpora la intención de darnos un aumento de un 23 %. Todos los días los funcionarios del PRO se llenan la boca diciendo que la inflación cada día crece más; pero cuando les toca pagar los salarios a los trabajadores del estado, pareciera que la inflación es la que mide el INDEK.
La Ministra de Salud, Graciela Reybaud, con el argumento de terminar con “los ñoquis”, desde diciembre intenta recortar las horas de suplencia de guardia, modalidad precaria de contratación por la falta de nombramientos de planta. Lo que no dice la Ministra, es que los que no van a trabajar, son los acomodados pertenecientes a los gremios amigotes de su gestión; como SUTECBA y AMM.
En el medio, quedan cientos de profesionales a la espera de concursos, que trabajan bajo modalidad precaria y que ahora son perseguidos y despedidos. Esto tiene un solo nombre: ajuste.
Frenemos el ajuste, vayamos por salario
Resulta clave para los próximos meses, la pelea a fondo para frenar el recorte del macrismo, pero también por un aumento salarial coherente con la canasta básica real.
Ya los docentes anunciaron que no arrancarían las clases. Algunos burócratas feligreses de Cristina tímidamente esbozaron que no aceptarían menos de un 35 %. Y en la ciudad SUTECBA -cómplice del PRO- mencionó que no aceptarán la propuesta de Macri de un 23 % de aumento. Pero no les creemos. Seguramente querrán cerrar por cifras menores que la inflación perjudicando nuestro salario. Desde Alternativa Estatal, consideramos que el gobierno debe dar un aumento considerable. Un 40 % como mínimo y un piso salarial de 10.000 pesos. Mientras suba la inflación, los aumentos de salario deben corresponderse con la misma.
La unidad es nuestra mejor arma
Quedó demostrado en diferentes conflictos del 2013, que sólo con amplia unidad y un plan de lucha consensuado puede ganarse la pelea. La dispersión de actividades e iniciativas de lucha entre ATE, la COGRESAP, ADEMYS y sectores independientes; no colabora en el desarrollo de la lucha. Hay que abandonar todo tipo de personalismos y rencillas pasadas, para avanzar por lo nuestro. El ajuste nos pega a todos por igual: enfermeros, profesionales, administrativos, maestros, etc.
Es por ello que desde nuestra agrupación bregamos desde el primer día, por la mejor y mayor coordinación posible entre los sectores que se encuentran en la calle resistiendo; como los compas del SAME o el Moyano. Y nuestro diputado Alejandro Bodart viene participando de cada reclamo en el Moyano, el Gutiérrez y otros hospitales, está a disposición de lo que haga falta para ganar y este viernes participa en la Audiencia Pública en el Cabildo exigiendo la no implementación de la resolución 1657.
Hacemos un llamado a la reflexión y una convocatoria a unificar y coordinar las acciones de lucha desde abajo.
- Salario mínimo de $10.000 y actualización trimestral
- Basta de despidos. Abajo la Resolución 1657
- Por una gran marcha y paro por salario y contra el ajuste en Salud de todos los sindicatos, asociaciones de profesionales y coordinadoras.
Mariano Veiga, Hospital Moyano
