Ni decretazo ni descuentos. La lucha sigue por aumento
Scioli dice que en esta lucha «hay algo raro…». Baradel, de SUTEBA, repite que el gobierno no entiende que «este conflicto es distinto…». Lo raro y distinto que no entiende el gobernador ni controla el «dirigente» gremial es la rebeldía y determinación de la docencia bonaerense que se puso de pie, ganó las calles, decide, impone, pelea la simpatía de los padres y la comunidad. La queremos ganar. Y el paro no se levanta ni suspende. Lo decidimos los docentes en asambleas. No al decretazo o los descuentos, la lucha sigue hasta lograr el aumento que merecemos para poder educar.
Al escribir esta nota, tras el combativo 3º Plenario Provincial de Delegados que convocamos las Seccionales disidentes de SUTEBA en Tigre con más de 800 docentes de muchos distritos, ya superamos los 10 días de paro. Una huelga que está haciendo historia al transitar la tercera semana de lucha. Firme y resuelta a triunfar.
El paro sigue y hace historia
Las resoluciones del plenario fueron la síntesis de la impresionante fuerza, coraje e inventiva que viene desde abajo. En SUTEBA La Plata, el día anterior, hicimos una marcha de 2.500 docentes que fue reflejada por los medios nacionales. Lo primero que resolvimos democráticamente en ese Plenario nos da el norte hacia dónde vamos: Nuestro rechazo a la propuesta salarial del gobierno, el repudio a las amenazas de descuentos, a la ilegalidad de la huelga y al intento de cerrar las paritarias por decreto.
Respondíamos así al anuncio de fijar el aumento por un decretazo. Un delegado dijo que Scioli nos lanzaba «un misil», pero en verdad, venía con la pólvora mojada y nula puntería porque esa decisión incentivó la lucha y la definición de continuar el paro. Obligando incluso a corrientes como la 9 de Abril (PTS) que están más pendientes de lo que resuelva la Celeste de SUTEBA y el Frente Gremial (FGD) que del clamor y mandato que viene de las asambleas y de tanta iniciativa que atraviesa la provincia.
El anuncio del decreto hasta colocó en un brete a la Celeste de SUTEBA y al FGD que llamó a la multitudinaria marcha del 19 para intentar ganar la calle, tomar las riendas de la lucha, pretender negociar y desmontar una rebeldía que los ha desbordado. Cuando buscaban eso, debieron decir que así estaremos de conflicto todo el año… Pero los docentes no buscamos pelear indefinidamente. Queremos luchar para ganar. Y esta vez hay condiciones de hacerlo.
Por eso, en la 2da resolución reafirmamos el reclamo: Salario igual a la canasta familiar, sin sumas en negro, retroactivo a enero, en un tramo y actualizado por inflación; el pago de los sueldos adeudados; presupuesto para infraestructura y el pleno funcionamiento del IOMA, entre otros puntos. Luchamos por $ 9.000 de inicial, tal como Cristina otorgó a las fuerzas de seguridad nacionales.
Para lograrlo, aprobamos las acciones que sostengan, profundicen y nos permitan volver a nacionalizar la lucha: Mantener la continuidad del «No Inicio» con paro, profundizando las acciones y la movilización, con la sistemática realización de asambleas para evaluar.
Además, ir masivamente con una columna del bloque de la docencia combativa a la marcha del FGD el 19 a la gobernación. Y participar todos el viernes 21 de la Marcha Federal educativa, a las 11hs en Congreso para movilizar a Plaza de Mayo.
Un ajuste al estilo clásico
Esta lucha es distinta porque Cristina se quitó la máscara del «relato» y decidió ajustar como en los ’90. Al apretar con una «conciliación» que los docentes desconocimos. Amenazar con reinstalar un presentismo neoliberal. Anunciar junto a Scioli los descuentos, sanciones, quita de personerías y con declarar a la educación como «servicio esencial» para que no paremos cuando se trata de un derecho social que deben garantizar con salario y presupuesto.
Como el ajuste y la inflación que licua los ingresos y presupuestos sociales nos afecta a todos, la simpatía con la lucha es amplia. Defraudados con un gobierno K que decía ser «popular», los padres y trabajadores nos dicen que sigamos adelante. Si ganamos, ganan todos. Al romper una pauta salarial que quisieron imponer en un 18%. Y luego, con gobernadores como Scioli, pretender fijar un tope del 25% y en tres cuotas, diciendo no tener más plata.
Nuestra lucha da frutos porque al piso salarial lo elevan al 30,9% y en dos cuotas, sin el presentismo. Un avance, aunque insuficiente y engañoso porque al prorratearlo en el año, el aumento real es del 25,6% con un inicial de $ 4.717 en agosto. Lo peor es el salario básico que sube sólo $ 418 (un 19,8%) al quedar en $ 2.230 y achatar drásticamente la escala salarial.
Un sendero de lucha que fuimos trazando
La lucha surge y crece por la base. Nuestro orgullo es haber delineado una orientación para esta lucha desde diciembre de 2013. Un sendero que ha marcado los hitos del conflicto nacional. Entonces propusimos el «no inicio» de clases 2014, comenzar la lucha en febrero con los estatales y la CTA. Propusimos una novedad: el primer paro nacional de los gremios estatales en la CTA para el 5 de marzo. Junto a una Marcha Federal para el 21 de marzo y un paro de la CTA, si la CGT y otras centrales no llamaban.
En el Encuentro del 17 de febrero, desde Alternativa Docente presentamos por escrito estas propuestas a los sindicatos, seccionales y agrupaciones docentes, tanto de la Federación Nacional Docente como de la oposición a la Celeste en CTERA. Agregando entonces una jornada nacional el 26/2 (que después votó CTERA) y un «no inicio» por 72hs al escuchar el fuerte reclamo de nuestros compañeros de no comenzar con «paritos de un día». Y una decisión distintiva en esta lucha: que manteníamos el paro más allá de lo que decidiera la Celeste de SUTEBA y CTERA.
Y así fue. Todas esas mociones se fueron haciendo realidad, superando las dudas e incluso la negativa de muchas de las agrupaciones (como Tribuna Docente) que se dicen combativas y tienen puestos de conducción dentro de la oposición. Cuatro factores actuaron para ello: lo duro del ajuste, la ruptura política con el gobierno K y con los gobernadores del oficialismo y también la oposición; la decisión de la base para luchar y el avance que implica contar con una fuerte porción del gremialismo docente en manos de sectores de oposición al gobierno y la burocracia. Exigiendo, pero también planteando iniciativas de lucha con la garantía de la mayor unidad para pelear.
Una lucha que crece desde el pie
Asambleas, cortes de calle, volanteadas a vecinos, automovilistas, camiones y micros. Clases públicas ya que el docente que lucha también educa, marchas de antorchas que mantengan ardiente la protesta. Reuniones zonales, marchas blancas, abrazos simbólicos, permanencias. Todo es válido. La docencia se puso de pie. Ganó la calle.
Esa calle que perdió una dirigencia burocrática oficialista que claudica, acata conciliaciones o firma acuerdos que la base desconoce. Una base inquieta, resuelta, que se autodetermina. Impone el rumbo del conflicto a una conducción Celeste de SUTEBA y del FGD que debe anunciar lo que ya los docentes han decidido. Una burocracia como actor de la lucha, pero que viene por atrás del libreto que le marca la inventiva y determinación de la base que incide en los acontecimientos.
La docencia se echó a andar. Tomó la iniciativa. Con creatividad, empuje, coraje. Esta vez va en serio. Esta la ganamos. No se levanta por televisión. Son las cosas que se repiten. Claro, si las calles se van poblando de maestras, preceptores, profes y hasta directivos.
Las seccionales combativas de SUTEBA somos otro actor clave. Escribiendo parte de la trama en esta contienda por el salario y la educación. Con el torrente autoconvocado que tiene también a la oposición como actores protagónicos. Que va inundando las calles de la provincia. En los distritos disidentes, pero también en donde está la Celeste. Empezaron siendo unos pocos, avisando por mensajitos, por face, de boca en boca y se hicieron decenas. Luego cientos. En algunos casos llegaron a ser mil autoconovocados. Votando sumar el 21 a la Marcha Blanca Federal.
Con sol o lluvia. De mañana, tarde o noche. Con una inventiva hecha cartas a los padres y panfletos para explicar y hacer valorar esta lucha que hace historia en este fin de ciclo K. Con las resoluciones del plenario de los SUTEBA combativos y la unidad con los docentes y estatales que luchan en el país, es posible avanzar. Al decidir democráticamente en un nuevo plenario en La Plata; reclamar a CTERA un nuevo paro y un paro nacional de la CGT y la CTA, es posible triunfar. En eso estamos.
Guillermo García Sec. Gral. Adjunto SUTEBA La Plata