A contra mano de lo prometido durante la campaña electoral donde prometió hasta «remedios gratuitos para todos», De la Sota continúa su ataque a la salud pública. Esta vez a través de su Ministro de Salud dio la orden de dar de baja 400 contratos, aumentando la tensión en los hospitales públicos que venían reclamando más personal.

La realidad que vivimos en los hospitales cordobeses no sólo necesita de todos esos compañeros contratados, que hoy quedan en la calle, sino que exige el pase a planta permanente para jerarquizar su tarea y combatir la inestabilidad laboral que impone la precarización. No sólo no hay remedios gratuitos sino que tampoco hay insumos básicos como gasas, guantes, drogas, aparatología y como venimos denunciando, el personal tampoco alcanza. Si frente a esta situación, la respuesta del gobierno es ajustar, la única salida que nos queda es profundizar la lucha en defensa del hospital público, yendo hacia nuevas medidas de lucha.

La Unión de Trabajadores de la Salud, junto a otros gremios, viene dando una pelea para frenar los planes del gobierno para destruir salud pública y con ella las condiciones laborales y los salarios de sus trabajadores.

El gobierno del PJ hace años intenta invisibilizar la lucha por la salud pública, por eso nos niega la personería gremial. Sin embargo venimos de un triunfo importante al obligar al gobierno que se siente por primera vez a discutir la paritaria de salud con la UTS y no con sus amigos del SEP. Así fue que con lucha y democracia desde las bases de los hospitales conseguimos un aumento diferenciado y por encima de la paritaria general.

Basta de perseguir a los que luchan

En su ataque más general, el gobierno se ensañó con la UTS, despidiendo a Gastón Vacchiani delegado gremial del Hospital de La Calera y referente de la Corriente Sindical del MST.

Este torpe ataque muestra lo nervioso que pone al gobierno las denuncias que venimos haciendo desde la UTS, sobre el estado de crisis al que el gobierno ha empujado la salud en toda la provincia y el grado de precariedad extremo en el que deben trabajar sus profesionales.

Con el apoyo de FeSPROSa, la CTA y decenas de gremios de salud a nivel nacional, hemos largado una campaña exigiendo al gobierno la urgente reinstalación de Gastón Vacchiani y de los 400 contratos caídos y el fin de la persecución a los activistas y luchadores.

Mientras avanzan las acciones legales, estamos desplegando una fuerte campaña de volanteadas y afiches para denunciar el ataque. En los próximos días se intensificará con asambleas y cortes frente a los hospitales afectados para ponerle un freno al gobierno provincial.

Sofía Ahún Comisión Directiva de UTS y de la Corriente Sindical del MST