El aumento de la canasta alimentaria fue de 40% y el gobierno nos “aumentó” un 15%. Así nos quitó el 30% del poder adquisitivo, agudizando nuestras privaciones. Además, el PAMI suprimió el suministro sin costo de medicamentos para afecciones respiratorias, justo en esta época del año. Otro reclamo es el de terminar con los largos y penosos juicios: la dilación, sistemática e intencional a través de apelaciones, es una violación a nuestros derechos humanos.
Tampoco claudicamos en reclamar el 82% móvil, en todas las categorías y funciones. Debe ser una prioridad en toda negociación de los activos y estar en toda agenda de lucha. Los dineros de ANSES son para pagar nuestros haberes y no para tapar déficit fiscal del gobierno, que hace lo mismo que criticaba al anterior. En vez de pagar a los fondos buitres, se debe saldar la deuda con los jubilados. Por eso seguimos luchando.
Carlos Guanciarossa, Jubilados ATE