Ya han pasado más de 20 días desde que la asamblea del comedor de Charrúa decidió volver al MST-Teresa Vive. Para la gran cantidad de compañeras que allí se organizan no fue fácil sostener esta decisión, ya que fueron hostigadas por la presencia de Nicolás Mayr y un grupo de patoteros de su alicaída y decadente organización, queriendo impedir que las compañeras pudieran seguir haciendo funcionar el comedor. Durante días se hicieron presentes golpeando la puerta, insultando a las compañeras que cocinaban, le pintaron la casa a su dirigente María, todo al mejor estilo de una patota impresentable. Lógicamente, no consiguieron nada: las compañeras se mantuvieron firmes en su decisión democrática y nuestro MST-TV organizó el apoyo al comedor, que garantizó su funcionamiento normal.
Desde el MST-Teresa Vive repudiamos una vez más este accionar de Nicolás Mayr, personaje ya por demás ajeno a la militancia popular y de izquierda, acusado por distintos sectores políticos y sociales de todo tipo de abusos a mujeres y responsable de negociados económicos corruptos para su beneficio personal, utilizando conquistas sociales de compañeros desocupados que lo han denunciado por eso.
A continuación, reproducimos la nota enviada por las compañeras del comedor:
La Asamblea del barrio de Charrúa decidió el 12 de abril separarse de la dirección de Izquierda Latinoamericana, dirigida por Nicolás Mayr y Rodrigo Segovia.
Fue tomada en conjunto por todos, por motivos de maltratos, avasallamiento y abuso de poder hacia las compañeras. Y solo pedimos que nos dejen seguir nuestro camino con tranquilidad y sin sufrir ningún tipo de represión.
En la misma asamblea decidimos volver a nuestra organización madre el MST TERESA VIVE. En representación de la Asamblea: María Magdalena Vizcarra – Lucha Revollo – Filomena Cabrera – Jackelyn Pérez.