Estamos asistiendo a una nueva ronda de ajuste sobre la universidad publica. Así como en el primer semestre de este año el ajuste se expresaba en el intento de imponer una pauta salarial muy por debajo de la inflación y en la falta de fondos para cubrir el funcionamiento de las universidades, hoy se expresa en la negativa a reabrir el debate salarial y en el proyecto de Presupuesto 2017.
En cuanto a la situación salarial, es más que claro que el proceso inflacionario en curso ha implicado una pérdida del poder adquisitivo del salario. Con un aumento del 34% promedio en cuotas y una inflación interanual a junio de 2016 del 45%, más el incremento del costo de vida registrado en julio, agosto y setiembre salta a la vista la necesidad de una recomposición salarial. No se puede esperar a febrero para reabrir el debate salarial.
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En cuanto al presupuesto, el ministro Bullrich difunde por los medios un mentiroso incremento del 44%. Tomando lo realmente ejecutado el incremento es apenas un 26%, muy por debajo de la inflación. En la universidad, el PRO cuenta con el sostén de todos los rectores que en la reunión del CIN en Jujuy han manifestado su acuerdo con este presupuesto.
En simultáneo, se aprobó en la UBA un reglamento de concursos para el CBC con el aval de ADUBA (FEDUN) y FEDUBA (CONADU) que violenta el Convenio Colectivo de Trabajo, negando la aplicación del artículo 73, que sostiene que todo docente interino con 5 años en el cargo titulariza automáticamente. Además la conformación de jurados queda sometida a la voluntad discrecional del director del CBC -el radical Ferronato- y por lo tanto, 1400 docentes van a depender de la disputa de camarillas por consolidar los feudos en que se reparten las cátedras. Violencia contra derechos laborales, contra el co-gobierno y el control de los claustros.
Plan de lucha: ahora es cuando
Ante este escenario es urgente la necesidad de organizar un plan de lucha que esté a la altura de las circunstancias. Así como en el primer semestre le torcimos el brazo al gobierno de Macri con fuertes paros y ganando las calles, ahora es momento de hacerlo otra vez.
Es importante dar la pelea en la más amplia unidad de acción, pero no creemos que haya que supeditar nuestro plan de lucha a las vacilaciones de CONADU u otras entidades. CONADUH debe construir sus propias medidas y a partir de allí construir toda confluencia posible. No podemos esperar a febrero para reabrir la discusión salarial y sobre el Presupuesto, tenemos que actuar ahora para incidir sobre el debate antes de que sea un hecho consumado, no se trata únicamente de “preparar febrero”. Reivindicamos la propuesta impulsada por ADICUS (San Juan) de definir un plan de lucha progresivo después de las medidas del 4, 13 y 14 de octubre con un nuevo paro de 72 hs. Ese es el camino para torcerle otra vez el brazo a Macri y exigir a la CGT paro nacional, activo y con continuidad.
Luis Meiners, docente UNER (Entre Ríos) / Alternativa Universitaria