El lunes 22 de enero el MST en Izquierda al Frente y la Agrupación Nacional Clasista Antiburocrática realizaron un escrache y tuitazo en el ministerio de Trabajo para “despedir” al ministro Triaca. El audio que se filtró del ministro insultando y despidiendo a su empleada doméstica resultó ser la punta de un iceberg que reveló a un Triaca hipócrita, negrero y corrupto.
La empleada despedida por Triaca, Sandra Heredia, no solo sufrió el maltrato y los insultos del ministro, sino que además no cobró indemnización alguna. Esto es porque Triaca la tenía en negro. El jefe del ministerio que debería perseguir a las patronales negreras y proteger a los trabajadores de la precariedad del trabajo no registrado, tiene empleados propios en negro. No debería sorprendernos; el Estado, incluyendo el ministerio de Trabajo, tiene a miles de trabajadores contratados y precarizados. Pero no deja de resaltar el carácter hipócrita del ministro Triaca, que debe renunciar por negrero.
El escándalo destapó otra situación irregular: Sandra Heredia tiene un cargo en el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), que se encuentra intervenido por el ministerio. Resulta que ella es una de más de 200 personas “acomodadas” por Triaca en el SOMU. “Aparecen ex empleados de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires y Santa Fe, de la Tesorería de la Provincia y el Renatre, entre otros organismos públicos provinciales y municipales. Esto marca un claro indicio de que el SOMU se convirtió en una agencia de contrataciones públicas más, a tono con una modalidad que tanto se criticó cuando el actual partido de gobierno estaba en la oposición”. (Perfil)
Además, Triaca es el funcionario del gobierno con más familiares en cargos des Estado. Entre ellos, destaca su esposa, María Cecilia Locciasano, que es subsecretaria de Coordinación Administrativa y se ha hecho conocida estos días por suspender hasta fin de febrero el envío de antivirales para pacientes de VIH a hospitales públicos. Triaca debe renunciar por corrupto y ser investigado y procesado.
La gestión de Triaca en Trabajo ha estado marcada por el plan de ajuste y represión del gobierno. El ministerio es una oficina de la patronal. Los despidos, la inflación y los bajos salarios, la continuidad y la expansión del trabajo precario que padecen los trabajadores no han encontrado más que un enemigo en el ministerio de Trabajo. Por esto, Triaca debe renunciar también por desempeño de su función pública.