El viernes 26 se volvió a votar en La Virginia y la Lista Azul se impuso demostrando la voluntad de lxs trabajadorxs de renovar la conducción por nuevos delegados antiburocráticos.

En la Virginia, fábrica con más de 800 obrerxs y la más importante en la región Rosario del STIA (sindicato de la alimentación), se votó para comisión interna el 4 de abril. Desde ANCLA/MST impulsamos e integramos la Lista Azul junto a muy valiosos luchadorxs independientes.

En esas primeras elecciones del 4 de abril ganó la Lista Azul (185 votos), sobre la lista Verde que después de 10 años como delegadxs, había acentuado sus rasgos burocráticos y gozaba de privilegios. Por ello fueron repudiados por la mayoría de la fábrica quedando segundos con 183 votos, cuando hace 2 años habían sacado 450. Por último la lista Naranja (131 votos), orientada por CSC/PO, que en un grave error se negó hasta último momento a una confluencia con la Lista Azul. El ajustado resultado obró de excusa para que la burocracia no convalidara la elección.

Una artera maniobra de la burocracia y la patronal

La burocracia del STIA y la lista Verde, desconocieron el triunfo de la Azul escudándose en la poca diferencia de votos y resolvieron nuevas elecciones para el pasado viernes 26 de abril, pese a nuestros reclamos.

Esta vez, no querían «errores». Por eso, la patronal, a través de los encargados de todos los sectores, se puso al frente de la campaña de la Verde, apretando compañerxs para que voten a esa lista contra «los zurdos de la Azul».

Tiro por la culata y triunfo antiburocrático

En las elecciones del viernes 26, los trabajadores resolvieron inclinar la balanza por la renovación antiburocrática y desmontar la maniobra. Por ello concurrieron masivamente a las urnas y votaron 100 obrerxs más que en la elección anterior. A la patronal y a la Verde les salió el tiro por la culata. Ganó la Azul con 265 votos (80 más que en la anterior), a la Verde con 222. Contundente triunfo que la burocracia ya no pudo desconocer.

Otra vez, un párrafo aparte para el sectarismo de la Naranja, que erróneamente mantuvo la lista, cayendo a 117 votos.

Y decimos triunfo antiburocrático porque como lo expresan Gastón Pinchetti y todos sus compañeros de la lista, una de sus mayores preocupaciones es mantenerse pegados a la base, con recorridas por los sectores, consulta permanente a lxs compañerxs y que todo sea decidido por la base.

Primeras conclusiones

Sin dudas, había un hartazgo en la fábrica con el lxs viejos dele-gadxs, lo que se puso de manifiesto en las dos elecciones, en la primera con una participación más baja en relación a anteriores votaciones, y en la segunda con el aluvión de votos a la Azul.

Es posible que la muy reciente formación de la Azul haya impedido a un sector ver que era la herramienta necesaria para terminar con lo viejo, pero la primera elección actuó como acicate, despejando dudas y demostrando que la posibilidad de reorganizar sindicalmente la fábrica con un método democrático y para la lucha era con la lista Azul.

Como en muchas fábricas, de la mano de lxs más jóvenxs, y explotados, que nada tienen que ver con el viejo modelo sindical, se van generando las condiciones para un recambio de dirección sindical clasista y antiburocrático. Entendemos que en la Virginia se está transitando ese proceso; por eso es muy importante ayudar a que se desarrollen, se extiendan y consoliden estos procesos, respetando los tiempos de la clase obrera, pero aprovechando las oportunidades sin ningún rasgo de conservadorismo. Sin dudas, además de estar al servicio de los derechos de lxs trabajadorxs de La Virginia, se ha dado un paso hacia la pelea por una nueva conducción en la seccional del STIA. Manos a la obra.

Alejandro «Cacho» Parlante, ANCLA/MST Rosario

Hablamos con nuestro compañero Gastón

Gastón, contanos como se conformó la lista Azul

Nos conformamos como lista Azul, por la necesidad de lxs compañerxs de tener nuevxs representantes sin los privilegios que usufructuaban los miembros del anterior cuerpo de delegadxs. Representando a lxs jóvenes y al conjunto de la planta que necesitan una renovación del cuerpo de delegados y un cambio en la forma de movernos dentro de la fábrica.

¿Qué opinan del triunfo y cómo ven que fue recibido por lxs trabajadores?

Nuestro triunfo fue muy bien aceptado en la fábrica, que veía como el anterior cuerpo de delegadxs tomaba actitudes cada vez más propatronales. Ese es uno de los motivos que ayudó a que en la segunda elección volviéramos a ganar sacando 80 votos más que en la primera.
Es lo que comenzamos a percibir en las recorridas por todos los sectores que ya comenzamos a realizar.

¿Qué desafíos tienen planteados en lo inmediato?

En primer lugar, seguir con las recorridas, siempre junto a lxs compañerxs, y llevar adelante los reclamos y las acciones resueltas por la mayoría de la fábrica.