Pasaron las últimas elecciones del año en el país y Salta se prepara para un cambio de gestión. Saénz ganó con el 53,66%, mientras que el Oso Leavy del Frente de Todos quedó lejos con un 26,29% y el antiderecho Olmedo con el 15,34%. Luego de una fuerte campaña contra los grandes aparatos de los partidos tradicionales, el FIT Unidad obtuvo un 2,42% a gobernador.
El gobernador electo, Gustavo Saénz, supo llevar adelante una campaña despegándose del gobierno nacional frente al fuerte descontento del pueblo trabajador ante la crisis política, económica y social. Esto lo llevó a camuflarse sin romper el frente que nucleaba a candidatos de Cambiemos.
El gran derrotado ha sido el Frente de Todos, que pese al apoyo de F-F no logró conquistar la gobernación, y no sacó ni una banca para la Legislatura en la capital. Leavy encaró en el último tramo denuncias cruzadas hacia Sáenz por corrupción, malversación de fondos. La disputa fue tan grande que, a menos de una hora de la vela electoral, pegatineros contratados de ambos candidatos se enfrentaron en zona céntrica de la ciudad a tiros, demostrando asi los métodos de la vieja política.
Los antiderechos encabezados por Olmedo y Suriani, que llevaron adelante la campaña respaldada con los millones obtenidos con el negocio de la soja, explotando a trabajadores y a niñes, y el apoyo de la Iglesia evangelista; con un programa contra los derechos de les trabajadores, las mujeres, oponiéndose a la ESI con perspectiva de género, al derecho al aborto y con su discurso de odio hacia la comunidad LGBT, capitalizaron una parte del voto bronca y conservador.
Sabemos que Saénz, quien supo ser el abanderado del kirchnerismo, candidato a vicepresidente de Massa y después el candidato de Macri en la provincia, y Betina Romero (hija de J. C. Romero) que se comprometió a trabajar en conjunto con el Frente de Todos, serán los primeros en acordar con los planes de les Fernández para aplicar el plan de ajuste del FMI en la provincia. Frente a esto la clase trabajadora, las mujeres y la juventud darán pelea para defender sus derechos y conquistar nuevos como lo hicimos con los gobiernos anteriores de Urtubey y Romero.
La izquierda: balance y perspectiva
En la provincia la izquierda logró presentarse unida en el FIT Unidad, acordando utilizar el mecanismo de las PASO para integrar la lista democráticamente y la rotación de los cargos que pudieran salir.
Pese a la fuerte campaña que realizamos y haber obtenido cerca del 4% en cargos legislativos de la Capital, no logramos conquistar nuevas bancas, y este ha sido uno de los más bajos desempeños desde hace años en la provincia. No es una sorpresa ya que ocurrió en otras elecciones provinciales, pero acá se combina con varios aspectos. Además del peso de los aparatos en esta elección, que monopolizan con recursos millonarios la campaña, también se evidenció que, luego de tantos años con muchos cargos legislativos, el PO retrocedió en su peso electoral al no saber aprovechar su ubicación previa para postularse y ser una alternativa. Así la expectativa de amplios sectores, con el correr del tiempo se fue diluyendo.
Esta situación la empeoró la propia división de PO y los ataques públicos que mutuamente llevaron adelante los dos sectores. En particular tiene gran responsabilidad la Tendencia con declaraciones hostiles hacia el propio Frente, y su dirigente Altamira hablando en los medios del supuesto «fracaso del FIT-U» días antes de las elecciones en nuestra provincia. Un método lamentable. Todo esto no permitió llevar adelante más acciones comunes y una campaña unificada que era muy necesaria, cuestión que afecto a la postulación de todo el Frente. Debemos superar estos problemas en vista de fortalecernos a futuro como una verdadera alternativa.
Para que el FIT Unidad pueda avanzar proponemos que la unidad conquistada se traslade a la lucha de clases, que se convierta en una herramienta para intervenir políticamente en todos los ámbitos y que también pueda tener una política para renovar nuestro frente. Por eso valoramos el acto unitario que realizamos frente al consulado de Bolivia todos los sectores de la izquierda salteña ante la negativa del kirchnerismo a abrir el micrófono a quienes rechazamos el golpe de estado pero no somos obsecuentes a Evo Morales.
Desde el MST, siempre coherentes con lo que decimos y hacemos, fuimos los primeros en dar la pelea por la unidad en las elecciones y también en las calles para fortalecer a la izquierda en la lucha contra este sistema y dar vuelta todo. Es por esto que te proponemos que te sumes a dar esta pelea con nosotres en esta lucha socialista, feminista e internacionalista.
MST Salta
