El escenario post PASO para el conjunto de la clase trabajadora es el peor. Devaluación del salario, aumento de los precios a niveles récord y medidas muy insuficientes y parciales por parte del gobierno para paliar la situación y poder ganar en octubre. Es urgente organizarnos desde abajo, reclamar a las centrales un paro nacional convocando a acciones contundentes en la calle contra este ajuste y el que viene. Por aumento del salario y un programa alternativo obrero y popular.
Escribe: ANCLA, Agrupación Nacional Clasista Antiburocrática
El 14 de agosto, apenas pasadas horas de las PASO, el ajuste se hizo sentir más que nunca. Los mercados abrieron con una suba del dólar blue y el gobierno subió a $365 para la venta en el Banco Nación la cotización oficial del dólar, más del 20% por encima de los $300 por unidad con que había cerrado la semana anterior. Además, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) subió la tasa de referencia 21 puntos, hasta el 118%. Días después se conoció que esta devaluación ya estaba pactada con el FMI las semanas previas, cuando se negociaban los desembolsos para la Argentina. Además, esto provocó la disparada de los precios, llegando a estipularse que la inflación mensual de agosto será la más alta desde 1989. Sin dudas, el índice que derriba el discurso electoralero de la “vuelta al asado” prometida por el Frente de Todos es el aumento del 55% de la carne(1) en las últimas semanas. Nos metieron la mano en el bolsillo a los trabajadores, licuando en un 22% nuestros ingresos. Este massazo multiplica la pérdida salarial que venimos arrastrando y nunca recuperamos, más allá de algunas paritarias que arrimaron las cifras a la inflación. La bronca crece y hay condiciones para desarrollar la lucha, como ya comenzó en algunos sectores de trabajadores y en los movimientos sociales combativos.
La burocracia sigue en la vereda de enfrente
Para llevar adelante este plan alternativo hace falta organizarse y luchar. Durante estos años, las direcciones de las centrales y los grandes sindicatos, se alinearon con el gobierno y durmieron una larga siesta: la CGT y las fracciones en que se dividió la CTA se subordinaron y no han hecho nada ante la pérdida de poder adquisitivo. Han avalado medidas de ajuste paritaria tras paritaria, sostuvieron el acuerdo con el Fondo, sabiendo lo que eso implica, y ahora nos llaman a votar a Massa usando el sentimiento de repudio ante Milei y Bullrich, que vienen por nuestros derechos. No van más, esta conducción sindical ligada al peronismo ya no representa ningún interés de la clase trabajadora. Ahora que las papas queman y nos metieron la mano en el bolsillo de un saque, salieron a balbucear que se necesitan aumentos, sumas fijas, paritarias, pero no se corrieron de ser laderos del oficialismo que ajusta. Tienen que romper con el gobierno y convocar a un paro y plan de lucha nacional. No tenenos ninguna confianza en ellos. Seguimos peleando por una nueva dirección y un modelo sindical alternativo, democrático, autónomo y combativo. Que surja de los distintos procesos de lucha y que proponga y le dé espacio a las camadas jóvenes de activistas para renovar a las viejas conducciones enquistadas en los sillones. Existe hoy la posibilidad de dar pasos para desarrollar una nueva dirección sindical y política que venga desde abajo para poder organizar al conjunto de la clase trabajadora, llevar adelante un plan de lucha nacional hasta quebrar el ajuste e imponer un programa en favor de las mayorías. Pero que no se la lleven de arriba porque está la urgencia de salir a las calles y parar tanto el ajuste como las reformas reaccionarias y pelear por un programa alternativo. Para preparar la pelea y para exigirle a la burocracia, es importante la unidad de los sectores que han estado al frente de los conflictos, autoconvocados, sindicatos recuperados, activismo de lucha.
Reunir de inmediato a la mesa del Plenario del Sindicalismo Combativo y generar iniciativas es necesario para impulsar esta política, y lo proponemos desde nuestra corriente sindical ANCLA/MST.
Los anuncios de Massa: poco y para pocos
Ante una situación preocupante, los anuncios del Ministro de Economía y candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, presentados con bombos y platillos, son realmente insuficientes. Para descomprimir la caldera y con mirada electoral, Massa “devuelve” una migaja comparado con lo que se robaron y encima, no llega a todos. Para los jubilados $37 mil en cada uno de los próximos 3 meses no son nada, y ni hablar que recién en septiembre la mínima sería de $124 mil, una miseria. La medida para los monotributistas es lisa y llanamente una burla. Si bien anunció que los monotributistas de las categorías A, B, C y D no pagarán por 6 meses el componente tributario lo que se ahorraría cada categoría por mes sería: Categoría A $539; Categoría B $800; Categoría C $1.700 y Categoría D $2.700. Este último monto no alcanza ni a un kilo de milanesas hoy.
Además se conoció el aumento de una suma fija tanto para el sector público como el privado: será de $60.000 en dos cuotas mensuales, no remunerativas y por única vez, absorbible por las paritarias para trabajadores con salarios netos de hasta $400 mil mensuales. En definitiva, un adelanto de la paritaria y de antemano no remunerativo, para ganar el voto de los descontentos. Solo comprende a los privados registrados y que no superen los 400 mil de salario. En el caso de los estatales, solo le llegaría a poco más de 300 mil nacionales; las provincias y municipios, dependerán de la voluntad de su cacique a cargo. Es decir, más de 5 millones y medio de precarizados no reciben nada. Y la ayuda social para los desocupados, es más que limitada y está lejos de lo que reclaman los movimientos sociales, entre ellos nuestro MST Teresa Vive.
Estas medidas son parches para que todo siga igual, no cambian en nada la situación salarial crítica que vive el conjunto de la clase trabajadora. Por su parte, la CGT y la CTA festejan el esfuerzo realizado por el gobierno para contener el impacto de la devaluación y convalidan esta nueva entrega.
Preparemos acciones en las calles
Desde nuestra agrupación ANCLA del MST en el FIT-Unidad venimos impulsando esta política en cada lugar de trabajo y gremio, desde nuestras agrupaciones de docentes, salud y sanidad, ATE y otros gremios estatales y privados. Reclamamos no solo que la suma paupérrima llegue a todos y se incorpore a la estructura de salarios, sino un aumento general de salarios con cláusula gatillo de actualización automática y la reapertura de las paritarias para recomponer nuestros ingresos. Asimismo con las jubilaciones y planes sociales levantando el programa de emergencia que detallamos en la página 13.
Llamamos a preparar y reclamar asambleas, reuniones con activistas y delegados, para debatir qué hacer, estos puntos del programa y plantear medidas de fuerza. Asimismo exigir un paro general preparado en la base, activo, con movilización y continuidad a todas las centrales, convocando a coordinar y unificar las luchas en curso. El SUTNA con la lucha acumulada aprobó un acuerdo en asamblea general, varios gremios docentes están en conflicto, la FESINTRAS (federación de salud) se declaró en alerta reuniendo su mesa en Jujuy, CICOP exige la reaperura de paritarias al tiempo que varios municipios del gremio y el Posadas siguen en conflicto.
El próximo 6 de septiembre, sindicatos y agrupaciones docentes combativas preparan una jornada de lucha y movilización por salario y las condiciones de trabajo. Llamamos a apoyar esa jornada y convocar a los trabajadores para unir los reclamos. Impulsamos que el Plenario del Sindicalismo Combativo se sume a esta jornada y prepare acciones en la calle y otras iniciativas políticas para frenar el ajuste del FMI, el gobierno y toda la derecha.
1. https://www.infobae.com/economia/2023/08/26/el-precio-de-la-carne-cerraria-agosto-con-el-mayor-aumento-mensual-de-los-ultimos-18-anos/