MST - Movimiento Socialista de los Trabajadores Lunes 27 de Agosto, actualizado hace 4 hs.

Ricardo Jaime: protegido por el gobierno y la justicia Un Corrupto Nac & Pop

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Ricardo Jaime fue durante muchos años uno de los principales recaudadores del kirchnerismo. Fiel empleado de Néstor y Cristina desde sus tiempos en Santa Cruz, circuló por distintos cargos públicos hasta que, empujado por los escándalos de corrupción, dejo la secretaria de transporte de la Nación en 2009. Sus hazañas se cuentan en millones de dólares, sus logros tienen que ver con la entrega y la destrucción de lo público.

Un modelo de impunidad y entrega

Ricardo Jaime es un icono, un ejemplo, un engranaje más de la máquina kirchnerista, del «modelo» como lo llaman en cuanta cadena nacional se emite. Este funcionario profesional, garantizó durante mucho tiempo los negocios en el área de transporte, la relación con los empresarios, el desvío de fondos públicos, que en lugar de volcarse a fortalecer el sistema ferroviario, reactivar la industria nacional y garantizar un transporte público, seguro y eficiente, se fueron quedando por el camino.
Hay muchas formas de escribir sobre Jaime, sobre lo que representa, sobre la impunidad con la que paso de prófugo a hombre libre sin un minuto en la cárcel. Podemos enumerar las múltiples causas de corrupción que tiene abiertas, podemos indignarnos por su enriquecimiento a costa de lo que es de todos, podemos decir sin equivocarnos que el gobierno de conjunto actuó para evitar que vaya preso.
Pero al escribir sobre Jaime no podemos sacarnos de la cabeza la tragedia de Once, la de Castelar, las vías que ya no van a ninguna parte, los vagones que no hicieron trabajadores argentinos.
La corrupción no es un acto que sucede en el vacío, los millones que constituyen el botín de unos pocos tienen como contra cara la muerte y el abandono de las grandes mayorías de nuestro país.

En la vida hay que elegir…

En una nota anterior, decíamos que la corrupción es el lubricante que permite el funcionamiento del capitalismo. En cualquier sistema que este asentado sobre la desigualdad, en la distancia entre los representados y sus representantes la vamos a encontrar. El kirchnerismo es sin dudas la corrupción recargada. Como dice su propio slogan de campaña «en la vida hay que elegir» y ellos vienen eligiendo los negociados con TBA, Metrovías, Romero o las corporaciones como Chevron, Monsanto, Irsa y Barrick Gold, entre otras.
El modelo Jaime, de cometas y sobreprecios, se reproduce en todas las áreas del Estado dejando a su paso el tendal de entrega y miseria.
Pero no escapan a esto los que hoy se pintan como lo nuevo o lo distinto. Sergio Massa sin ir más lejos, compartió un año de gestión con Jaime. ¿No se dio cuenta, siendo jefe de gabinete, que se estaban desviando millones de dólares? ¿No le resulto raro el enriquecimiento meteórico de los funcionarios que compartía con el gabinete?
Los representantes de los partidos tradicionales, defienden sin fisuras este sistema, y por eso, más allá de los discursos y los frentes coloridos no quieren ir a fondo contras las causas de la corrupción, porque esto implicaría atacar sus propios privilegios y negociados.

Con «militantes» como estos…

En sus últimas declaraciones Jaime se reclamó «un militante más de el proyecto nacional y popular» y pidió ser juzgado como «cualquier ciudadano».
Luego de estar 7 días prófugo se acordó de la justicia y ahora encima pide condiciones.
Los operadores del gobierno trabajaron a destajo para levantar el pedido de captura y tratar de buscarle una salida más elegante al escándalo, tratando de evitar que en plena campaña electoral, se sigan acumulando evidencias de los versos del modelo.
Sin embargo, mas allá de los vericuetos legales, el agotamiento del proyecto kirchnerista hace que surja la podredumbre de lo viejo y se creen las condiciones para discutir otro modelo de país. Con «militantes» como Jaime, Boudou o De Vido ¿Cuanto más vamos a esperar?

Contra la entrega y la impunidad hacen falta salidas de fondo

Ante problemas estructurales como la entrega de lo público y la corrupción de los funcionarios, no alcanzan las cantinelas electorales. Es necesario tomar medidas de fondo, no realizar apelaciones morales que solo duran hasta los dos minutos de terminado el escrutinio.
Es fundamental atacar los privilegios de los políticos, impulsando una ley de imprescriptibilidad de las causas por corrupción en el Estado para cortar con la impunidad. Invirtiendo la carga de la prueba para que cualquier funcionario acusado de robar o hacer negocios con lo que es de todos sea considerado culpable hasta que demuestre lo contrario. Junto con esto, deben pagar con sus bienes y quedar inhabilitados de por vida para ejercer la función pública.
Estas medidas de castigo tienen que venir de la mano de una política integral de recuperación de los principales recursos estratégicos de nuestro país, anulando las privatizaciones y poniendo todos los servicios en manos del Estado con un estricto control de trabajadores y usuarios.
Ni el kirchnerismo, ni las variantes de la oposición tradicional se proponen transitar ese camino, para lograr esto es fundamental fortalecer una alternativa realmente emancipadora como la que impulsamos desde el MST y por la que batallaremos en las próximas elecciones desde frentes que, como PODEMOS en Buenos Aires o Nueva Izquierda en Capital, venimos construyendo en todo el país.

Martín Carcione

Jaime, Randazzo y la «revolución ferroviaria»

Luego de la tragedia de Once y ante el fracaso de la gestión de Juan Pablo Schiavi al frente de la Secretaria de Transporte, el gobierno transfirió dicha secretaria al Ministerio del Interior de Randazzo que anunció una «revolución ferroviaria».
Un año después de esas declaraciones, dos trenes del Sarmiento chocaban en Castelar, demostrando que los anuncios habían sido solo eso.
El nuevo capítulo de la supuesta revolución incluye la escandalosa liberación de Jaime sin pasar ni un día preso. Un poco de pintura, alguna que otra pantalla con los horarios, pero seguimos viajando como animales y con la incertidumbre de no saber si llegamos a destino.
Ninguna transformación sustancial en el transporte se puede esperar de este gobierno, ya han demostrado en estos diez años que lo suyo son los negocios y que la única revolución que están dispuestos a protagonizar es en el estudio de 6, 7 y 8.
Como lo viene denunciando nuestra compañera Vilma Ripoll desde hace tiempo y lo reafirma en nuestro Spot de campaña, «hablan de revolución ferroviaria, pero mantienen el modelo menemista de transporte. Para terminar con los negociados y viajar seguros, tenemos que recuperar el tren, con control social»

3 Propuestas de emergencia para recuperar el Tren

Desde el MST reafirmamos nuestras propuestas de salida de fondo y es un compromiso de Alejandro Bodart, Vilma Ripoll y nuestros candidatos en todo el país impulsar la pelea por estos puntos en el congreso y las legislaturas provinciales.

1) Reestatización de todo el sistema Ferroviario bajo control de sus trabajadores y usuarios: Para terminar con el negocio de las privatizadas y concesionarias que ya le costo la vida a cientos de usuarios es necesario restatizar por completo el servicio y que el mismo sea controlado por los trabajadores, los familiares de las victimas de once y los usuarios. Para garantizar que la plata se invierta en obras e infraestructura y no se vaya a los bolsillos de funcionarios y empresarios corruptos. Declarando el transporte ferroviario como un servicio publico esencial.

2) Destitucion de todos los funcionarios responsables del área de transporte, comenzando con DeVido y Randazzo: Es necesario que todos los funcionarios responsables del ferrocidio sean destituidos, juzgados y encarcelados. Junto con esto hay que incautar todos sus bienes e inhibirlos de por vida para ocupar cargos en el Estado

3) Estatización de EMFER y puesta en funcionamiento de todos los talleres Ferroviarios al servicio de la renovación de vías, material rodante, señalamientos, etc: Terminando de una vez con los subsidios y destinando los recursos necesarios tenemos que poner a funcionar de manera inmediata la industria nacional al servicio de la fabricación de locomotoras y vagones. Para renovar y ampliar la cantidad de formaciones y generar miles de puestos de trabajo.

JAIMEPRESO