Medidas de fondo para salvar la educación pública
Miles de familias sin vacantes pusieron de manifiesto las consecuencias de la política anti-educativa del macrismo. Bullrich negó el desastre, pero comenzó a poner containers y aulas en pasillos de escuelas. Padres y docentes se movilizan y resisten en las escuelas esta barbaridad. El 26 habrá una sesión especial en la Legislatura para tratar la interpelación al ministro de educación. Estamos frente a una crisis educativa y es indispensable debatir medidas de fondo para enfrentarla.
Al macrismo le salió el tiro por la culata. Hizo una impresionante campaña publicitaria sobre la implementación del sistema de inscripción on-line. El discurso de la modernización se mezclaba con la promesa de transparencia. Con bombos y platillos se anunciaba que se habían inscripto más familias de lo esperado…Pero pasó el marketing y apareció la realidad: Miles y miles de niños, niñas y adolescentes no tenían vacante en todos los niveles.
La desesperación y la bronca se extendió entre los afectados. Hubo marchas, festivales, cortes de calle, concentraciones frente al Ministerio. Grandes sectores de la sociedad pudieron constatar la crisis en el sistema educativo de la Ciudad.
Vacantes para todos sin containers ni aulas-pasillo
Bullrich negó lo que pasaba y a los pocos días reconoció que 7.000 inscriptos para educación inicial no iban a tener ninguna vacante en los jardines. Al mismo tiempo, el gobierno comenzó a comprar containers para utilizarlos como aulas. “Se llaman aulas modulares” dijeron desde el PRO. Además iniciaron la construcción de aulas de durlock en el pasillo de la escuela Bernasconi, un monumento histórico de la Ciudad, pero la justicia ordenó detener la obra.Hay que rechazar esta barbaridad.
Se tienen que habilitar clubes, reparticiones públicas o incluso alquilar edificios para poner en funcionamiento escuelas y jardines donde puedan estudiar todos los que se inscribieron. Hay que incorporar los docentes que hagan falta para garantizar el derecho a la educación de todos. Y se debe comenzar un plan de construcción de escuelas y jardines, arrancando por la zona sur, donde la necesidad es mayor.
El 26 todos a la Legislatura
Es evidente que esta crisis es el fruto de una política educativa que destruye lo público y beneficia a las empresas privadas. Y que el primer responsable de este desastre es el ministro de educación Esteban Bullrich.
Por eso, nuestro diputado Alejandro Bodart presentó el pedido de convocatoria a una sesión especial para que la Legislatura tratara la interpelación al ministro macrista. Luego de idas y vueltas, el kirchnerismo y UNEN finalmente decidieron sumar sus firmas y la sesión se ha podido convocar para el miércoles 26.
Esto ha sido un triunfo de la lucha que estamos dando y tenemos que aprovecharlo para tratar de darle un golpe posible a esta política. Por eso, el 26 tenemos que lograr una gran movilización que rodee la legislatura y exija que el ministro dé la cara.
Medidas de fondo para enfrentar la crisis educativa
Junto con dar respuesta inmediata al problema de las vacantes, se deben debatir propuestas para salir de la crisis en la que estamos. Nosotros pensamos que se tienen que tomar medidas de fondo, opuestas a las que se vienen aplicando. En ese camino, Bodart presentó un proyecto de ley para eliminar los subsidios a las escuelas privadas. También reclamamos una reforma impositiva para que las grandes empresas dejen de tener privilegios y paguen fuertes impuestos. Con estas medidas tendríamos recursos para educación pública.
Pero también hay que atacar la desidia de los gobernantes hacia lo público. Por eso presentamos el proyecto de ley que obligue a los políticos a mandar a sus hijos a la escuela pública y atenderse en los hospitales públicos; así como el que iguala el salario de un diputado al de una directora de escuela.
Estas medidas deben ser parte de un plan de emergencia para enfrentar la crisis educativa. Llamamos a familias, docentes y estudiantes que las compartan a organizarse con nosotros para pelear por ellas.
Martín Torres