Es delgada la apariencia de “buena gente” en proyectos reaccionarios como el PRO. A cada paso queda en evidencia la esencia de lo que son: la fracción más reaccionaria del bloque capitalista dominante. Su emblema juvenil, Piter “Vainilla” Robledo, no deja lugar a dudas.
Ubicar el personaje es crucial en toda historia. En esta, se llama Pedro, pero lo apodan “Piter”. Es el presidente de la juventud PRO y funcionario de Desarrollo Social, en el área joven, el “representante” de la juventud en el gobierno. Resulta que dice su CV o biografía política, que es de origen humilde y de orientación homosexual. Es el “amigo gay” que todo homofóbico aduce tener. Sin embargo ni bien asumió dejó la marca “PRO” en su gestión: despidió trabajadores y nombró funcionario a un personaje de su entorno, un poco turbio, procesado. Hace unos días sin embargo, protagonizó el escandalete que motiva este artículo. El gobierno promovió una reunión de la “Mesa de Juventudes” con 18 partidos. El encuentro fue encabezado por los ministros Peña y Stanley, con Robledo como anfitrión. Lo llamativo del caso fue que, revisando la lista, se supo que entre los “convidados” se encontraban dos representantes del partido Bandera Vecinal, del neonazi Biondini. Ante el bochorno, Robledo negó, justificó y se embarró hasta la frente. La frutilla del postre, obvio: consecuentes, los jóvenes fachos propusieron con énfasis en el encuentro “la reinstalación del servicio militar obligatorio”. Todo muy rico, muy pop.
Ellos la juventud del ajuste capitalista, nosotros la “loca rebeldía”
Días después de este episodio se realizó una reunión nacional de las juventudes del PRO, la UCR, la Coalición Cívica y el partido Fe, del “Momo” Venegas. Todos ellos se congregaron con un objetivo que es el de impulsar la juventud de Cambiemos. Saben de su debilidad estructural en el territorio y saben de su límite objetivo para crecer entre los jóvenes de esta generación, tan indignados, tan libres, tan anti-fachos. Apuestan a “timbrear” y construirse con el “vecino”, desde “abajo”, dicen. Necesitan una banda de jóvenes que derrochen hipocresía amarilla puerta a puerta. Pero, les va a costar. Porque hay una cosa que se llama realidad, y los empieza a asediar por los cuatro costados: resistencia social a tarifazos y ajuste, respuesta masiva a brutalidades como la amenaza a mujeres amamantando o presión consecuente del campo cultural para eyectar al reaccionario de Lopérfido para que vuelva a la primaria a aprender matématicas y contar bien: 30 mil, Lopérfido, no 9 mil. Frente a semejante proyecto, tan burgués, tan derechista, tan inconsistente, tenemos que construir otra cosa, desde la izquierda, bien rebelde, bien anticapitalista, bien anti-sistémica.
Tienen el poder y lo van a perder
Entonces vamos a empezar por el principio: movilizarnos para echar a Piter, porque es intolerable un personaje así como funcionario “representando” a la juventud. Estamos en otra trinchera. La de los jóvenes precarizados de McDonalds, la de los call, la que se queda afuera de la universidad si prospera el modelo PRO, la del movimiento LGBTIQ, la de la lucha por la despenalización de las drogas, la que tiene memoria y no se reconcilia. La juventud anticlerical, anti-represiva, la juventud consciente que para tener futuro hay que ocupar la política, porque sino la ocupan personajes como vos. Esa juventud, la que nosotrxs construimos es “loca y rebelde”, orgullosamente y se está organizando para echarlos a todos, al 1 % que manda.
Luchamos por otra perspectiva. Odiamos a las corporaciones y capitalistas explotadores de obreros y obreras. No nos bancamos la violencia de género, combatimos el machismo y el patriarcado. Nos joden e impugnamos todas las formas de heteronormatividad burguesa. Para nosotros, la naturaleza, los bienes comunes son un patrimonio social, no un nicho de negocios. Pero lo que más odiamos y vamos a combatir hasta el final, es a los fachos, a los reaccionarios. A esos ni cabida, nada. Por todo eso militamos. Es un gran momento para ser revolucionarixs. Más convencidxs que nunca.
Mariano Rosa
