Codicia de multinacionales, resistencia del pueblo

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Martín Buzzi y Gerardo Martínez. entregadores y patoteros
Desde hace aproximadamente 9 años, los sectores comprometidos con el medio ambiente, la salud de la población y el futuro de las próximas generaciones, estamos en una lucha muy desigual, contra la instalación de las empresas multinacionales de megaminería a cielo abierto.

La ciudad de Esquel en la cordillera chubutense, fue la primera en resistir cuando intentaron instalar una mina a cielo abierto para la explotación de oro. Lograron imponer un plebiscito, que ganaron por un 83%, y con esto se logró la ley 500.

Esta pequeña victoria logró que otras ciudades se empiecen a organizar para difundir y fomentar la solidaridad con otras provincias que también sufrían lo mismo. Así se sucedieron marchas, foros temáticos, escraches a funcionarios pro mineros, sin lograr frenar la voracidad de las multinacionales.

El día martes 27/11 en Rawson, las mineras en alianza con el PJ, diputados y dirigentes de la UOCRA, con matones armados con palos atacaron a los compañeros nos acercamos a presenciar todas las sesiones legislativas para que no entre ningún proyecto pro minero. En el último mes, las mineras y los funcionarios empezaron a enviar tímidamente grupos de entre 15 a 20 personas con carteles que decían: “SI a la minería”, “queremos trabajo digno». Pero el 27/11 la patota de la UOCRA junto con gente de las mineras llevaron 600 personas desde la mañana que después llegaron a 1000, controlando y desviando el tránsito. Con la zona liberada, nos golpean brutalmente y hay 7 hospitalizados. La Fiscalía no les quiere recibir la denuncia, les pide testigos, los nombres y apellidos de los agresores y una constancia policial. En paralelo, el dirigente de la UOCRA hace una denuncia en la comisaría diciendo que le “habían cascoteado las carpas que instalaron las mineras y roto los vidrios de los colectivos del acarreo y el mayor delito era que le pintaron una camioneta con la consigna “NO a la minería”. Lo curioso es que no mostró ni una foto con vidrios rotos ni camionetas pintadas ni piedras en las carpas.

No respondimos con agresiones, pero nos organizamos y el día 29, hicimos una marcha extraordinaria de más de 3.000 compañeros, exigiendo la renuncia del gobernador Buzzi, , Javier Touriñan, ministro de Gobierno, José Glinski, secretario de seguridad, Julio Blanco, jefe de policía, y Ricardo Lázaro, secretario de Derechos Humanos. Seguiremos la lucha contra la voracidad de las mineras, NO les daremos licencia social, ni ahora ni nunca.
Porque sabemos que el agua vale más que el oro. Y que NO es NO!


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