Se reunió la Mesa Nacional de la CTA
Con el inicio del año político, la “puja salarial” se colocó en el centro de la escena. De un lado Cristina, la UIA y las patronales cinchando por mantener los salarios planchados. Del otro los trabajadores preparando la pelea por un aumento general de salarios y arrancar los mayores márgenes en las paritarias. Ante este panorama, se reunió la mesa de nuestra central, donde, en función de un horizonte de profundización de la crisis, el ajuste y la conflictividad social, realizamos nuevamente un amplio llamado a la unidad de acción, en el camino de movilizar y preparar un nuevo paro nacional, comenzando por relanzar un marco común para esos fines con la CGT. Fijamos el 14 de marzo para movilizarnos al ministerio de trabajo como un primer paso.
En la reunión analizamos los principales emergentes de la crisis social y las políticas de ajuste con las que el gobierno responde. Paritarias con techo e inflación galopante, impuesto al salario y asignaciones discriminatorias -verdadero Triángulo de las Bermudas que succiona el poder adquisitivo y la dignidad de los trabajadores-, van a ser el corazón del pliego de reclamos para iniciar la pelea. Junto al necesario aumento de los planes sociales junto a las jubilaciones con el 82% restablecido. Y a la actualización automática según costo de vida.
La necesidad de profundizar la unidad de acción con los sectores sindicales y sociales que vertebramos durante el 2012 y que posibilitaron el parazo del 20N y las principales acciones conjuntas de la última década y de avanzar con el programa construido desde la CTA levantando las reivindicaciones de todos los sectores movilizados, fue una preocupación del debate. Sobre todo, considerando que hay proyectos políticos que van a colisionar en el año electoral.
En función de ello, se abordaron, entre otras, dos resoluciones fundamentales. La primera convocar para el 14 de marzo a marchar al ministerio de trabajo. Para ello además del llamado a la unidad de los dirigentes de gremios de CTA y CGT, va a ser necesario trabajar en cada lugar y gremio, con asambleas y plenarios y reuniones de activistas. Para fortalecer la pelea en cada lugar por el salario. Y para lograr una movilización contundente que sea un primer paso del paro nacional y plan de lucha conjunto que se necesita.
La otra resolución fue dar los pasos necesarios para la realización de un congreso de la CTA. NO solamente para resolver el plan de acción y continuidad. Lo necesitamos para abordar debates pendientes y en curso fundamentales. De programa y organización. Para avanzar hacia la central de masas, democrática y combativa que requieren los trabajadores. Y para seguir y profundizar también el debate de la alternativa política que necesitamos los trabajadores. Como venimos planteando desde nuestra corriente, la necesidad de que los que estamos construyendo la CTA, en el terreno sindical, confluyamos también en un llamado a fortalecer una alternativa amplia alrededor de un programa emancipador y de cambio, que se plante no solamente como alternativa al alicaído proyecto de los K, sino a las variantes recicladas de los viejos partidos.
Guillermo Pacagnini, Mesa Nacional CTA