Gustavo Giménez coordinador del MST “Teresa Vive”

La semana pasada la Presidenta Cristina Fernández junto a la Ministra de Desarrollo Social Alicia Kirchner lanzaron en Tecnópolis, el programa Ellas Pueden. Un programa pensado para el clientelismo K en un año electoral. En la misma jornada se anunció un aumento de $ 250 (14%) en concepto de presentismo y productividad para los beneficiarios del Argentina Trabaja a partir de Mayo.
El nuevo programa Ellas Pueden, promete incorporar a 100 mil mujeres con 3 hijos o más, beneficiarias de la Asignación Universal por Hijo, que habiten en el conurbano, el NEA, NOA y la región de Cuyo. Por $ 2.000 mensuales las beneficiarias deberán contra prestar capacitándose en la terminación de sus estudios primarios o secundarios.
El lanzamiento del nuevo programa nos lleva a varias reflexiones: ¿Por qué no se ha lanzado un plan de reparto de alimentos en los barrios obreros cuando la inflación, la falta de changas y el aumento de la miseria, lleva a millones a pasar enormes necesidades?¿Por qué no se extiende, universaliza y mejora el salario del Argentina Trabaja? ¿Por qué no se aumenta el monto de la Asignación Universal por hijo, hasta que cubra la canasta familiar?
La respuesta es sencilla… El gobierno no quiere gastar lo necesario para combatir la pobreza y la indigencia que están aumentando seriamente de la mano de una inflación desbocada. Si quisiera hacerlo tendría que invertir en programas sociales que lleguen a todos y que les permitan acceder a una alimentación, educación, salud y vivienda dignas. Hay plata en el país para encarar un programa de estas características, pero el gobierno pretende seguir engordando a los grandes empresarios amigos, pagar la deuda externa y entregar nuestros recursos, a costa del hambre de millones.
Y así mientras millones viven cada vez peor, promueve programas destinados a manejar en forma clientelar a un sector de los barrios más pobres, para asegurarse la concurrencia a los actos electorales y ser cautivos de la presión de punteros, intendentes y funcionarios K.
Desde el MST Teresa Vive vamos a seguir peleando contra esta forma clientelar de administrar los programas sociales. En el caso concreto del nuevo programa Ellas Pueden, tenemos que garantizar que hasta la última compañera que esté en condiciones de ingresar lo haga y que las organizaciones sociales no oficialistas no seamos discriminadas a la hora de participar en la capacitación de nuestras compañeras. Para de esta manera evitar el manoseo de punteros y “capacitadores K”.
A partir de esto tenemos que pelear porque el programa llegue a todas las compañeras de familias pobres que lo necesiten sin restricciones de cantidad de hijos o de lugar (no va a llegar a provincias y ciudades enteras como Santa Fe – Rosario o a Córdoba). Como parte de un pliego de reclamos más extendido que contemple la extensión y aumento al nivel del deterioro inflacionario real del monto del Argentina Trabaja y de todos los programas sociales.