Como bien refleja el texto de Alejandro Bodart y la resolución de nuestro Congreso que acompañan estas páginas; hay profundas razones políticas de por qué no avalamos el acuerdo de Pino con Carrió y por qué a la vez creemos que sería positivo construir un nuevo frente político electoral. Sobre esta base de ideas y la propuesta que fue discutida y aprobada por unanimidad el sábado pasado por parte de los delegados de nuestro partido, es que pretendemos profundizar sobre qué tipo de propuesta electoral intentamos construir, cómo nos planteamos hacerlo, en base a qué criterios y con qué perspectiva política a largo plazo. Para darle pelea a los candidatos del gobierno de CFK y a los del gobierno de Macri.
El marco político para una nueva unidad y el programa emancipador
La propuesta política para las elecciones tiene que ser una herramienta útil para los cientos de miles que cansados de la vieja política buscan una nueva alternativa. El corrimiento de Pino hacia las posiciones de Carrió deja un espacio político muy grande, que abarca una franja de la población que no acompaña este camino. Esa franja no es un pequeño sector sino una parte importante de base social que ya hizo experiencias con los viejos partidos o que refleja una nueva generación que nace sin el peso de los aparatos políticos tradicionales. Son trabajadores, intelectuales, profesionales, vecinos, jóvenes, ambientalistas, defensores de lo público, gran parte de ellos provenientes de un proceso de simpatía con Proyecto Sur que ya se terminó. Del seno de todos estos sectores surgen las ganas de construir algo nuevo ajeno a las viejas estructuras. La propuesta electoral que desde el MST vamos a desarrollar en las elecciones está dirigida a estos miles y miles que así lo reclaman. Estos grandes sectores no tienen nada en común con proyectos emparentados con el programa de Carrió o de la UCR. Por eso es indispensable construir una propuesta electoral por fuera de estos actores políticos.
Esa propuesta electoral que defendemos tiene que integrarse con los sectores políticos y sociales que defendemos un programa emancipador, que levantamos propuestas transformadoras para de verdad solucionar los grandes flagelos del país que hoy sufren las mayorías populares, la juventud y los sectores medios. Bajo este programa y proyecto es que estamos intentando lograr para las próximas elecciones conformar un frente real y con posibilidades de pelear en serio. Lamentablemente al día de hoy no está claro si esto puede concretarse. Aún no hubo reuniones comunes de todos los sectores y priman las indefiniciones. Habrá que ver si existe voluntad política de conformarlo Y en el caso de los compañeros de Buenos Aires Para Todos, veremos si avanzan a tener como prioridad hacer un acuerdo franco entre las organizaciones que estamos construyendo la CTA, que es lo que muchos militantes de la central nos reclaman. En este sentido, invitamos a toda la base de la central a ser parte activa con sus opiniones de este debate.
Es hora de acertar el rumbo…
A pocas semanas de la presentación de alianzas se hace indispensable avanzar en estos temas sin mezquindades y con el norte puesto en llegar a cientos de miles con una propuesta sólida, garantizando que las distintas vertientes estén visibles para mejor disputar el voto en la Ciudad. Esperamos que los próximos días y semanas haya un cambio positivo antes de que sea tarde y cada cual avance por su lado en la conformación de listas. Para ese objetivo, durante los días que vienen avanzaremos junto a todos los sectores que provenimos del Movimiento Proyecto Sur en construir una propuesta común. Desde allí vamos a convocar una vez más a Buenos Aires para Todos, Marea Popular, el PTP, Partido Social y otras organizaciones a dialogar seriamente sobre todo esto. Veremos qué respuesta encontramos y si hay o no condiciones de avanzar a un nuevo acuerdo electoral.
Creemos sinceramente que estamos a tiempo de reflexionar entre todos sobre estos temas, y hacer un esfuerzo para que en las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires surja una lista de unidad. La voluntad del MST es lograrlo pero no depende solo de nosotros, sino de la comprensión común de todos. Si así lo hiciéramos, la unidad electoral podría ser la base para el inicio de una construcción política que se encamine a superar los límites de un simple acuerdo electoral que avance hacia un nuevo movimiento político que trabaje a mediano y largo plazo, y tenga reflejo en otros distritos del país. Para que esto suceda, el primer paso es lograr un acuerdo electoral ahora. Es una tarea difícil pero no imposible. No perdamos tiempo.
Sergio García