Sapag y Cristina son responsables por amparar el saqueo y la expoliación ambiental
El miércoles 2 de abril amaneció lloviendo sobre Neuquén y ya no paró hasta el martes 8. El lunes 7 una tormenta particularmente fuerte se sumó a todos los días previos de lluvia desencadenando la catástrofe. Pero, para explicar lo sucedido, no alcanza con hablar de la lluvia, es necesario buscar las causas en una política de planificación urbana criminal de los gobiernos, que privilegian los negocios a las obras.
Catástrofe ¿natural?
Mientras escribimos estas líneas el fuego arrasa con los cerros de Valparaíso en Chile, distinto elemento desatado, una misma explicación.
Lo que los medios y los gobiernos intentan caratular como desastres naturales, no son más que los efectos de la actividad desenfrenada y contaminante del sistema capitalista sobre el ambiente con las desigualdades económicas resultantes de esa actividad.
¿De que otra manera se puede explicar que los que se inunden o se incendien sean siempre los más humildes?
En numerosas notas y estudios venimos denunciando que la actividad depredadora, alentada y amparada por el gobierno de Sapag y Cristina, sobre el ambiente está cambiando los climas de la provincia, las petroleras realizando destrozos en materia ambiental, y en el país se han destruido millones de hectáreas de bosque nativo para multiplicar el monocultivo de soja. De la misma manera que está sucediendo a nivel mundial.
La otra cara de esta actividad extractivista y saqueadora es la desigualdad económica.
Saqueo, entrega y desigualdad
El desarrollo desenfrenado de la actividad extractiva no ha sido acompañado en lo más mínimo por una estructura de obra publica, sanidad, vivienda y cobertura social que pueda contenerla. Es así que nuestros hospitales colapsan, nuestras escuelas se inundan y se llenan de goteras, las rutas se desmoronan y se forman verdaderas lagunas urbanas. Ni hablar de los miles de trabajadores que imposibilitados de acceder a terrenos apropiados financiados por el estado (que ampara el negocio inmobiliario), se ven obligados a vivir en las bardas o en terrenos no adecuados, que son los primeros en colapsar. Como sucedió en Nueva España, frente a la fábrica Zanon, donde numerosas familias quedaron sin nada por el avance del agua.
En nuestra provincia las obras brillan por su ausencia, la planificación urbana no existe y es por eso que una tormenta genera semejante desastre, con miles de evacuados y familias enteras que perdieron todo.
Esto de ninguna manera es un problema natural o una situación que no pudiera evitarse, sino que es el resultado de una política deliberada de entrega por parte del MPN y el NCN de Quiroga, que se llenaron los bolsillos permitiendo los negociados y jamás realizaron las obras necesarias para evitar la catástrofe y ahora como siempre, la pagamos los trabajadores.
Permiten la contaminación, permiten el saqueo y no tienen plan de contingencia
Mientras “Pechi” Quiroga, intendente de la ciudad declaraba a los medios que gracias a su operativo se le estaba “ganando a la tormenta” miles de familias desmentían esa apreciación. La solidaridad llegó, como siempre en estos casos, de las organizaciones obreras y sociales, que nos pusimos desde el primer momento a coordinar la asistencia y la ayuda en los barrios donde no se vio ni un representante del gobierno. En el sindicato ceramista, ATEN, y distintos gremios más junto con organizaciones políticas y sociales se montó un centro de acopio y reparto de distintas donaciones. También en otros locales como el de Cae Babylon o en las escuelas que no estaban anegadas por el agua.
Es necesario destacar, que mientras esto sucedía, El gobernador Sapag estaba de gira en Houston, EEUU, consultando a diversas petroleras multinacionales sobre los requerimientos que tenían para invertir en varias zonas de la provincia, mostrando así que lejos de sacar conclusiones, consolidan un camino que nos lleva a más desastres.
Desde el MST Nueva Izquierda nos sumamos a las diversas tareas solidarias y nos proponemos denunciar incansablemente la política criminal tanto del gobierno Provincial como Nacional, y los que se intentan disfrazar de opositores pero coinciden en profundizar este modelo de entrega seguimos en el camino de seguir construyendo una alternativa política para los trabajadores y el pueblo.
Martín Carcione
