MST - Movimiento Socialista de los Trabajadores Lunes 27 de Agosto, actualizado hace 4 hs.

Docentes Unidos de Salta: Un round en una lucha más larga

Spread the love

El maestrazo salteño, con más de 35 días de paro ininterrumpido, no fue sólo un conflicto salarial. Fue una lucha política que enfrentó los planes ajustadores de Cristina y Urtubey, abriendo un nuevo horizonte de organización, no sólo para la docencia, sino para el conjunto de los trabajadores de la provincia. El desafío es avanzar en la organización, alertas por si no cumplen.

Esta lucha heroica abrió un debate político en el conjunto del pueblo sobre cómo enfrentar el ajuste y la construcción de una alternativa política que resuelva los problemas estructurales de este sistema capitalista.
El ajuste pactado a fines de 2013 entre Urtubey y la casi totalidad de los gremios estatales (a excepción de APSADES, salud) de un aumento del 25% en tres cuotas hasta el 2015, cayó ante la lucha.

Un frente político contra la huelga

Los planes del gobernador K contaban con la complicidad de los gremios de la desvencijada Intergremial integrada por la ADP (de CTERA), SADOP, UDA y AMET (de la CGT Caló), más ATE y UPCN. Pero la bravura, el sacrificio, la determinación y rebelión antiburocrática de la base docente, más el apoyo social obtenido, lo voló por los aires.
El conflicto provocó una fuerte crisis en el gobierno y el régimen, golpeando a la legislatura, la justicia, la policía, los partidos patronales, toda la burocracia, la prensa oficial y hasta la iglesia.
Si lo alcanzado en lo económico no es mayor fue por la vergonzosa participación de Baradel y la Celeste de CTERA que viajó a respaldar a la ADP para levantar el paro. Y fracasó, dejando una ADP fantasmal.
Tampoco llamó a ninguna medida la cúpula de la CGT, conducida por el diputado romerista y titular de Camioneros, Guaymás, quien decía apoyar el reclamo, pero no el método autoconvocado. Porque cuestionaba el unicato sindical y la estructura vertical de un gremia-lismo agotado.
El gobierno contó también con el arco político patronal, desde el PRS con el que gobierna y partidos satélites como Memoria y Movilización o el posadismo. También con la UCR, el FPV y los sectores del PJ disidente del ex gobernador Romero. La justicia también fracasó al intentar frenar el paro y judicializar la protesta, al igual que la curia que, en nombre de los niños, se inclinó a favor del poder.
A ese frente político se enfrentó la docencia, sin más herramientas que su fuerza y el apoyo de los trabajadores, la población y sectores combativos de la docencia del país. La fuerza inconmensurable de la base docente fue el motor que obligó al gobierno a reabrir las paritarias, dar mucho más de lo que pensaba y reconocer a Docentes Unidos como los verdaderos interlocutores.

Docentes Unidos sigue en pie

Las maniobras gubernamentales para debilitar a la asamblea y su organización, tuvieron su pata interna en Gamboa-SITEPSa que boicoteó sistemá-ticamente la asamblea, los acampes, cortes, huelga de hambre, escraches y todo lo que desarrolló la poderosa vanguardia surgida para empujar al triunfo.
Su última jugada fue retirarse de la asamblea del 30 de abril, tras el pico en la lucha con 15.000 docentes en las calles. Marcha en la que nos acompañaron Vilma Ripoll (MST) y docentes de GDA (Formosa) y la Federación Nacional Docente (CTA).
SITEPSA pretendía que se acepte la propuesta que hizo el gobierno ese día, sin discutirla, con sólo media hora para evaluarla y dejando fuera a miles de docentes que estaban en el corte de ruta. Develaban su verdadera intención, dinamitar la asamblea y quebrar el paro.
La jugada falló. Era un momento clave para el curso de la lucha. Fue nuestra agrupación la que subió al corte e hizo bajar a los miles de docentes que estaban ahí, imponiendo su número y combatividad en la asamblea al votar pasar a cuarto intermedio al 2 de mayo.
Al fracasar, SITEPSA y unos 150 seguidores de los 2.500 presentes, se retiran para ir en brazos del gobierno y firmar que levantaban la medida. Nuevamente las bases y agrupaciones como Alternativa Docente nos pusimos al frente. Pudimos seguir, superando el golpe, el cansancio y la campaña del gobierno y de STEPSA que bombardeaban los medios con que el lunes 5 se «levantaba».
Pero el viernes 2, tras el cuarto intermedio, en una multi-tudinaria y clave asamblea, decidimos rechazar la propuesta y continuar la medida. Siendo la única agrupación que planteó continuar. También votamos una nueva Mesa de conducción de 5 miembros, con presidencia rotativa entre los 3 representantes independientes, uno de Alternativa y otro de Tribuna.

Forzar la negociación y salir unidos

Se mantuvo el corte intermitente en el acceso a Salta, con bloqueo total el martes 6 y sitio a la legislatura si no había respuesta. Ese día, ante la fuerte adhesión al paro y 5.000 docentes marchando, el gobierno vuelve a ceder y reabre la negociación.
Los representantes de la Mesa de negociación se reúnen más de 5 horas en casa de gobierno y miles de docentes impiden entrar o salir de la legislatura. Eso derivó en un importante resultado para la docencia y su organización: el reconocimiento formal de Docentes Unidos como representantes de la docencia, el reintegro de los días de paro y un esquema de mesa de negociación por el resto del petitorio.
En ese marco se suspende la medida, con un gran aprendizaje para todos y, lo más importante, manteniendo la organización para futuras luchas. Como muchos dicen, ¡una pausa para tomar aire y salir de nuevo!
Por eso siguen las asambleas por departamento el 17 y habrá asamblea provincial el 24. Sin respuesta favorable, difícilmente comencemos las clases luego del receso invernal.

La dirección, el desafío mayor

La tarea de dotar al conflicto de una dirección sigue pendiente. La salida de STEPSA libera el camino para avanzar en consolidar una nueva conducción. Aún quedan sectores centristas que hay que ver su evolución y otros burocráticos que esbozan sus intenciones como ATE Docente que dijo oponerse a suspender la medida y denunció falsamente a los delegados de firmar un acta que bajaban a consultar…
También está el debate con los compañeros de Tribuna (PO) que no solo transitan esos mismos vicios, sino que, en los momentos críticos de la lucha, con su postura «ni-ni» de hacer «lo que se decida», van al más burdo oportunismo.
Eso explica su abstencionismo al no pronunciarse por seguir con la medida en la asamblea del viernes 2. O que mantuvieran un silencio cómplice cuando integraban la mesa gamboísta de la asamblea por miedo a ser destituidos. O intentar esquivar el mandato de rotar los cargos en la nueva Mesa provincial.
Sus planteos de autoreferenciación permanente, su negativa a reconocer a otras fuerzas de izquierda y la adaptación al régimen de sus diputados y concejales, tienen su correlato en el terreno de la lucha con sus intentos de arrogarse el ser los únicos representantes del conflicto. Los diputados de PO gastaron miles de pesos en una solicitada para ello, mientras sistemáticamente se negaron a poner un peso de sus dietas al Fondo de Huelga. Son prácticas a superar.
La rebeldía democrática y la amplia vanguardia que surge, asentada en la base combativa, son un reaseguro mientras prime el proceso asambleario y la movilización. La elección de delegados, la unidad en la diversidad junto a las agrupaciones, el mandato y la decisión en asamblea consolidarán a Docentes Unidos. Con un nuevo modelo sindical que defendemos desde Alternativa, al que debemos sumar más voces para fortalecer y convocamos para hacerlo juntos.

      Cecilia Gómez, Alternativa Docente en la Mesa de Negociación

AsambleaDocentesSalta