Junto con el Mundial de Fútbol en Brasil, la otra cuestión que ocupa espacio en los programas de noticias y que está en el centro de la agenda política del país es el fallo de la Corte Suprema de EE.UU. a favor de los fondos buitres.
Quizás haya sido el propio gobierno nacional el que más se haya referido a la cuestión en los últimos días, convocando actos, sacando afiches y haciendo discursos; aunque también la oposición patronal dio sus opiniones sobre el asunto (ver aparte). Sin embargo, el discurso presidencial del Día de la Bandera, significó un cambio «positivo» para los reclamos del establishment, la «oposición» y los propios acreedores.
Con visibles problemas de convocatoria, Cristina pronunció palabras que no dejan dudas sobre el rumbo que viene llevando y pretende continuar el oficialismo. Vayamos a las palabras concretas: «Pedimos al juez en Nueva York que genere las condiciones para que llegue a un acuerdo igualitario que sea beneficioso para el 100% de los acreedores…Creo que es necesario que se le generen las condiciones a la Argentina que se puede negociar y acordar. Dimos prueba de ello en varias deudas contraídas anteriormente».
Aquí se confirman dos cuestiones. En primer lugar la equivocada definición de aceptar a los tribunales estadounidenses como espacio válido para una disputa como ésta, sabiendo que estuvieron, están y estarán del lado de los grandes capitalistas. En segundo lugar, el reclamo «soberano» es dejar contento al 100% de los acreedores, los mismos que vinieron a hacer dinero rápido a costa de hundir el país. ¿Desde cuándo los intereses de los capitalistas del sector financiero son los mismos que los nuestros?
En otro tramo, se refirió a la política del kirchnerismo con la deuda desde su llegada al poder: «un 25 de mayo de 2003, un hombre que venía del sur con sus sueños e historias en sus espaldas. Se vino a hacer cargo de una deuda que no contrajimos. Dijo en todos los foros que la Argentina iba a pagar sus deudas…Así vino la reestructuración de la deuda en 2005 y la cancelación de la deuda con el FMI. En el 2010 me tocó a mí encabezar la segunda reestructuración. En 2010, alcanzamos el 92,4 % de acuerdo. Desde 2005 venimos pagando religiosamente… Pagamos a cada uno de los organismos multilaterales de crédito como el BID, Banco Mundial, etc. Hace pocos días logramos acordar una deuda que comenzó a originarse en 1956 denominada Club de París». Tan transparente como dañino para el pueblo argentino. El país cayó en una crisis fenomenal por la aplicación de un modelo económico a medida de los dictados del FMI, Banco Mundial, etc., y quienes asumieron el gobierno luego del estallido, se la pasaron pagándole a los mismos que nos hundieron a nosotros y a muchos países de la región.
La presidenta coincidió con Bonfati, que propuso seguir pagando, dejando fuera de escuadra a sus propios seguidores, que habían silbado al gobernador santafesino. Y finalizó con un llamado: «Les pedimos la unidad nacional a todos los argentinos. Porque la unidad hace la fuerza». ¿Unidad nacional para rogarle a un juez norteamericano que nos deje pagar una deuda mayormente contraída en la dictadura? ¿Para dejar contentos a los saqueadores?
Durante semanas, haciendo gala de los últimos estertores del doble discurso Cristina amagó con resistir. Muchos creyeron ver un reverdecer de la verba antiimperialista que criticaba al FMI. Se entusiasamron con miles de afiches «Patria o Buitres». Hasta lograron sembrar filas en la propia oposición que gritó a viva voz una unívoca sentencia: no al default, honrar los compromisos…
Pero, defraudando una vez más a sus seguidores, Cristina ratificó el giro conservador y hacia el ajuste ortodoxo. Pese a reconocer que los buitres también «revolotean» sobre nuestros recursos, acto seguido reivindicó el CIADI, los acuerdos con Chevrón y el Club de París…. Y pidió pista para pagarle «al 100%» de los buitres.
Hoy no solamente están negociando con el imperialismo fortalecido, sino que ya los bonistas, según denuncia El Mundo (España), estarían estudiando un embargo potencial de Vaca Muerta, utilizando la letra chica del acuerdo entreguista.
Desde el MST Nueva Izquierda llamamos una vez más a todos aquéllos que creyeron en el curso antiimperialista que juntos impulsemos la movilización unitaria contra el pago de la deuda externa, junto a toda la izquierda, el movimiento obrero y popular. Más aún, pensamos que debería ponerse en pie un movimiento continental de todos los países que venimos siendo expoliados desde hace décadas por estos chupasangre. Por eso, nuestro diputado Alejandro Bodart presentó un proyecto que propone que la Legislatura porteña rechace el fallo de Griesa, inste al Poder ejecutivo Nacional a suspender los pagos de la deuda e inicie una auditoria para comprobar qué parte es ilegítima y las veces que ya ha sido pagada. En el mismo se reafirma nuestra opinión de que la deuda que hay que privilegiar es la que se tiene con el pueblo.
Más allá de los debates, siempre hemos respetado a quienes acompañaron al kirchnerismo, pero, honestamente los llamamos a rechazar este camino de sumisión que nos quieren imponer. A ellos y a todos los luchadores, a la izquierda y a todos los que aspiran a la lograr segunda y definitiva independencia les proponemos convocar actos, movilizaciones, foros y todas las iniciativas amplias que podamos para que se escuche la voz de los que terminamos pagando siempre los platos rotos de todas estas negociaciones, en las que se entrega nuestra soberanía. Nosotros realizaremos el 2 de julio una jornada nacional de rechazo a la sumisión del gobierno y la oposición cómplice y por el no pago de toda la deuda. Y a levantar el próximo 9 de julio las banderas de la segunda y definitiva independencia nacional, rompiendo los pactos económicos y políticos que nos unen al imperialismo, rechazando el saqueo y luchando por la recuperación de nuestros recursos. y exigiendo que sea el pueblo quien decida democráticamente qué hacer ante el flagelo de la deuda.
Ellos también quieren pagar
Massa: «Argentina tiene que normalizar la situación frente a los mercados». Clarín 17/6″ Nosotros tenemos una dirección que pretende ser correcta, que es la del discurso de ayer [de la presidenta en el acto por el Día de la Bandera]. «Argentina debe respetar los contratos que firma» (Mdz online 20/6)
Scioli: «el Gobierno argentino debería sentarse a negociar para alcanzar un acuerdo que permita resolver definitivamente el conflicto (…) cuando se tiene voluntad de pago se buscan instancias negociadoras para acordar»(Clarin 17/6)
Macri: .»Hay quer ir con el juez Griesa y hacer lo que diga».(La Razón 19/6) Al otro día se calmó y apoyó a Cristina: «…bienvenido que el Gobierno asuma que hay que ir, sentarse y negociar lo mejor posible…»… Y si hay que pagar al contado, se pagará al contado»(La Razón)
Frente UNEN: Los cinco precandidatos presidenciales del frente Unen rechazaron hoy «el default como un camino viable» y cuestionaron la estrategia del «doble estándar y doble juego amenazante y negociador» (19/6 La Capital) Al otro día luego del discurso presidencial, se tranquilizaron y apoyaron el pago. La más vehemente por el pago incondicional fue Elisa Carrió para quien no pagar sería una «enorme irresponsabilidad».
Binner: «[el país] necesita evitar un default… tendría consecuencias muy negativas». «Yo creo que hay que negociar». «…que el gobierno pueda salir adelante y que podamos honrar nuestras deudas (…) no acusarlo a Griesa de Buitre». La Nación 16/6
Bonfati: «Esta instancia que estamos transitando en el abordaje de la deuda externa nos tiene que encontrar unidos, sin fisuras, con madurez…mucho diálogo y transparencia para negociar» (Discurso en el Día de la bandera 20/6)
Cobos: »ahora la Presidenta tiene que negociar, acordar y pagar». »Llegar a un acuerdo con el 100% de los acreedores respetando las leyes locales y las de EE.UU.» (Ámbito, 23/6)