Entrevista a Juan Carlos Monederos por Luis Bonilla (Venezuela)
Luis Bonilla: Hola Juan Carlos, quisiéramos que nos contaras un poco sobre la experiencia que han tenido con PODEMOS estos últimos cuatro meses y de dónde surgió ese movimiento
Juan Carlos Monedero: Hola Luis. Antes de entrar específicamente en nuestra experiencia, creo que es importante primero contex-tualizarla. Y nos hemos construido en un escenario de fragmentación constante de la izquierda en España, donde todos prefieren ser «cabeza de ratón» y nadie tiene la generosidad de ser «cola de león». Izquierda Unida y su burocracia interna impedía que se diera un proceso de unidad entre la izquierda en España. Ellos, en vez de ayudar a resolver ese problema, se conformaban con buenos resultados en las encuestas para las próximas elecciones. Lo importante para ellos era la obtención de algunos cargos, en vez de preocuparse por generar herramientas que ayudaran a solventar la crisis.
Todo esto ocurre, luego de un movimiento tan importante como el de los indignados en España, donde 8 de cada 10 españoles lo apoyaba, y que generó un gran vapor que no encontraba una caldera para activar el funcionamiento de las turbinas.
La idea de PODEMOS surge de un grupo de gente, que nos conocemos de estar en la facultad de Cs Políticas y Sociología de la universidad, junto a un grupo de gente ubicada en los medios de comunicación, que habíamos puesto en marcha un programa muy exitoso llamado «La Tuerka».
Nosotros, decidimos que estábamos cansados de esperar a que otra gente solventara nuestros problema. Así fue como pusimos en marcha a PODEMOS, con algo que se presentaba como una exigencia: confiar en el pueblo, confiar en la gente. Y a través de esto, pudimos convertirnos en la cuarta fuerza política de España.
LB: Ese éxito creo que sólo se logra con un nuevo lenguaje, no con los viejos lenguajes de la política, ¿cuál fue ese nuevo lenguaje que logró empalmar con ese amplio sector de España?
JCM: Correcto, y ahí cobra una gran importancia el papel de los medios de comunicación para poder lograrlo. Nos dimos cuenta que el lenguaje tradicional de la izquierda ya no traducía de manera concreta los problemas del pueblo español. Para poder transformar al mundo hoy, es necesario repensarlo y reinterpretarlo, de lo contrario estamos condenados a no poder transformarlo. Hemos agarrado el lenguaje de las calles, y hemos actuado con un lenguaje para la gente, con el que nos han entendido las abuelas, los estudiantes y los trabajadores.
LB: ¿Cuáles son los nuevos retos de PODEMOS? ¿Se disuelve después de estas elecciones? ¿Hacia dónde se orienta la acción política ahora?
JCM: El mandato que teníamos era construir un frente amplio contra las políticas neoliberales, que fuera más allá de reunir siglas, o reunir pequeñas agrupaciones. Para poder hacer esto hacía falta una metodología participativa, para que la gente pudiera resolver sus propios problemas.
Hemos entendido, que sin el aparato del estado no se puede cambiar las cosas. Es necesario un vector representativo para poder ganar elecciones, operar en los medios de comunicación y poder obtener respuestas inmediatas. Este vector, debe ir acompañado de otro vector participativo, de lo contrario nos convertiríamos en la misma burocracia que los demás. Si la gente no se articula en sus centros de trabajo, en sus barrios, en la universidad, y si estas reuniones y articulaciones no son frescas e irreverentes, al final el vector estatal se burocratiza. Igual sucede si el vector participativo está solo, y nada más es irreverente.
Esto último lo hemos aprendimos del 15M, en el que millones se lanzaron a las calles. Lo bueno de ese movimiento, que era la ausencia de lide-razgo, estructura y programa, posteriormente se convirtió en un lastre durante estos tres años. Aprendimos que necesitamos liderazgos, estructuras partici-pativas y programas políticos que la gente entienda y por los que la gente se responsabilice. Si los empresarios, banqueros, dueños de los medios de comunicación votan decisiones todos los días, pues creemos que el pueblo también debe votar todos los días.
LB: Finalmente, ¿qué mensaje le quisieras dar a los militantes revolucionarios venezolanos, bolivarianos?
JCM: Les diría que no se duerman, que tuvieron un líder que empujó a construir una revolución bonita, y que para que siga siendo bonita, se requiere mucho esfuerzo. En cuanto el pueblo y la revolución bolivariana se descuiden un poco, les van a robar el proceso. Por favor sigan manteniendo fresca la calle, las discusiones, construyan los Consejos Comunales, y presionen al poder político, porque el poder político sólo no puede hacer nada. Solamente se va a conseguir avanzar y profundizar, con ese pueblo que ya demostró su capacidad de lucha en años pasados.
