Acto del MST-Nueva Izquierda en el Hotel Bauen
«Una nueva izquierda fuerte, moderna y tricolor llegó para quedarse» Extractos del discurso de Alejandro Bodart
«El gobierno dice que ha sido la década ganada, la oposición conservadora dice que ha sido la década perdida. Nosotros decimos que fue una década completamente desaprovechada, porque entraron al país decenas de miles de millones de dólares que nos hubieran permitido poner en pie la industria, dar el 82% a nuestros jubilados, terminar con el hambre, con la miseria. Nada de esto sucedió. La presidenta en su último discurso dijo que había pagado 190 mil millones de dólares. Esta deuda es impagable y mientras más pagamos más miseria tiene el pueblo y más debemos. Cuando vemos a los candidatos de la oposición conservadora decir que hay que pagar y pagar, nosotros somos categóricos, esa gente miente cuando dice que pagando vendrá alguna solución a los problemas del país; porque acá el que paga, paga con el hambre del pueblo».
«Hemos escuchado mucho hablar contra los años noventa, sin embargo no se han tocado ninguna de las medidas fundamentales de esos años… Lo último que hemos visto ha sido la entrega a Chevron de Vaca Muerta, que es el inicio de una nueva reprivatización de toda nuestra energía, de nuestro petróleo… No sólo avanzan en la entrega. Están permitiendo que las corporaciones se lleven nuestros recursos naturales y nos dejen una contaminación que amenaza la vida de las generaciones futuras… Han entrado con fuerza todas la megami-neras, avanzó Monsanto, la concentración de la tierra y los agroquími-cos…»
«Está terminando este momento político con despidos, suspensiones y con un Berni «todopoderoso» que hace bandera de la mano dura. Nos queremos dirigir a aquellos trabajadores, jóvenes, que en estos años creyeron en el discurso del kirch-nerismo. Muchos están desilusionados y se van a desilusionar más después de la interna del kirchnerismo, cuando surja un Scioli de candidato… tenemos que decirles con claridad que sólo un programa antiimperialista, anticapitalista, ecosocialista, que sólo la izquierda tiene el programa para sacar al país de la crisis. Porque todos los candidatos del PJ, la UCR, de UNEN, de Macri, van a proponer salidas que parten de ajustar a los de abajo para seguir salvando a los mismos grupos económicos.»
Nuestro programa
«…Si gobernáramos lo primero que haríamos sería prohibir por ley los despidos, instalaríamos las 6 horas de trabajo con el mismo salario y a cada fábrica que cierre o despida, no esperaríamos a que los trabajadores salgan a hacer una campaña, nosotros la nacionalizaríamos para ponerla al servicio de las necesidades del país. Nosotros no pagaríamos la deuda, y les daríamos el 82% móvil a los jubilados, ataríamos los salarios a la inflación, para que cuando aumente un punto aumenten un punto los salarios».
«Les propondríamos a los trabajadores una gesta para una Segunda Independencia, porque estos gobiernos han hecho que seamos semicolonia… Arranca no pagando la deuda pero continúa recuperando las empresas estratégicas que se han entregado al capital extranjero y nuestros recursos naturales, romper todos los pactos que nos impidan industrializarnos, porque quieren que seamos solamente productores de materias primas y que compremos toda la porquería que viene de afuera. Por eso mientras no tienen una política para EMFER que posibilitaría construir trenes nosotros, van y le compran a los chinos…»
«Sólo desde la izquierda podemos levantar un programa que defienda el medioambiente de la depredación capitalista de estos grupos a los cuales se les permite cualquier cosa para que hagan más y más ganancia… si fuéramos gobierno echaríamos a patadas a los Monsan-to, las Barrick, a los Chevron, a los grupos IRSA, a cada una de las multinacionales que se les ha permitido depredarnos.»
«Como decía Vilma nosotros haríamos de la causa de género un principio. Cómo puede ser que en un país como éste, donde todos los días vemos hechos de violencia, las leyes que se han conquistado nunca son reglamentadas. Nunca hay una política activa para ir contra la trata, contra la violencia de género… seguro que ellos y sus mujeres van a hacerse abortos a las clínicas más caras, pero les niegan la posibilidad a la mayoría de las mujeres… queremos cambiar esta sociedad patriarcal».
«Queremos terminar con los privilegios, por eso tenemos propuestas de que cada funcionario político, cada juez, gane lo mismo que una maestra… Que se tengan que atender en hospitales públicos, mandar sus hijos a la escuela pública… también queremos terminar con los privilegios de la burocracia sindical. Estamos podridos que sea más fácil ser presidente que desbancar alguno de los capitostes de la burocracia. Peleamos por una ley para que ningún dirigente pueda estar más de dos mandatos al frente de un sindicato y después tenga que volver a laburar… Que la cuota sindical no se descuente más por planilla. ¡Que los Pignanelli vayan a la puerta de LEAR a cobrar la cuota sindical!…»
«Es falso todo lo que nos dicen los derechistas que se ponen la camiseta de la seguridad. Son ellos los que han llevado la inseguridad a los barrios, los culpables de que haya un millón de chicos que no estudian ni trabajan. Nosotros haríamos una política de shock para sacar de la marginalidad hasta el último de nuestros pibes… Y le cortaríamos las manos a los verdaderos hacedores del delito y al triángulo de impunidad entre los comisarios, los jueces y los caudillos políticos que están atrás de cada uno de los delitos duros.»
«Nosotros proponemos que gobiernen los que nunca gobernaron, queremos levantar bien alto la posibilidad de que sean los trabajadores y el pueblo los que tomen las riendas del país».
La responsabilidad de la izquierda
«La izquierda, los sectores populares, tenemos una responsabilidad enorme. Hace 15 ó 20 años, por más que hiciéramos lo que hiciéramos era muy difícil llegar a amplias franjas de la sociedad. Hoy hay una crisis enorme en los proyectos de los de arriba, nadie sabe quién puede ser el futuro presidente. Hay un sector grande de la población que ha empezado a mirar a la izquierda, si lográramos unirnos a pesar de las diferencias que tenemos, que no tienen porqué ser un obstáculo, al revés, tendría que ser algo que a partir del debate nos permita innovar y tener mejores respuestas… Cuando hablo de izquierda hablo de un terreno amplio, porque hay sectores que opinan que la izquierda, por ejemplo, es sólo aquella que tiene una tradición trotskista. Nosotros creemos que izquierda es un término muy amplio y que hay una tradición enorme en nuestro país de izquierda, peronista, comunista, maoista, trotskista, independiente, que son muchos más de los que se agrupan en cada uno de los partidos o frentes que existen hoy en la realidad. Si uniéramos todo esa fuerza está planteado ser una opción de gobierno para disputarles el poder a los que nos han llevado a esta situación».
«Hay compañeros de izquierda que no tienen una interpretación correcta de la necesidad y la fuerza que tienen las tareas antiimperialistas en el desarrollo de la lucha y un proyecto socialista. Por eso les cuesta entender qué pasa en Venezuela, en Bolivia, incluso lo que ha pasado en nuestro propio país. Creen que se pueden obviar las tareas antiim-perialistas y la necesaria unidad con los compañeros que levantan estás propuestas. También hay otros compañeros, que creen que las tareas se agotan sólo en lo antiimperialista, que no ven que ese es sólo un primer paso, y si no se sigue avanzando se retrocede, como lamentablemente creemos está pasando en Venezuela…»
Nuestra fórmula y nuestra propuesta de unidad
«Podemos seguir debatiendo todo esto entre nosotros. Incluso hemos hecho una propuesta que era la de las internas y puede haber otras para unir. El problema de las candidaturas tiene un peso mayor al que cualquier candidato va a reflejar en un programa de televisión. Detrás de los candidatos se discute perfil, por eso hay compañeros que quieren que todos los candidatos sean de una orientación determinada, del otro lado hay compañeros que quieren esconder a la izquierda y quieren ser ellos candidatos. Todos colaboran para que la unidad no se concrete. A nosotros que hemos propuesto una gran interna nadie nos respondió y el que nos respondió fue para rechazarla. Esas es una de las razones por las que hemos decidido largar nuestra fórmula. Nos hubiera gustado más que largar nuestra fórmula, estar acá presentando junto a todas las expresiones de la izquierda política y social, una única alternativa para darle batalla a todos. ¡Nos hubiera gustado eso, sinceramente!
No vamos a abandonar la pelea por la unidad hasta el último día, pero nos parecía importante hacer que nuestras propuestas se escuchen. Creemos que este proyecto de hacer una izquierda moderna, amplia, unitaria, donde podamos convivir con diferencias es necesario que esté en la calle, que nuestras propuestas lleguen a la gente. Queremos que sepan que también hay gente que quiere renovar a la izquierda, sacarla del dogmatismo, ponerla en el siglo XXI y realmente trabajar para que la izquierda deje de ser testimonial y sea una fuerza de mayoría».
«Por eso en el congreso decidimos largar nuestra candidatura junto a Vilma como vice. Incluso para demostrarle también al resto de la izquierda y de los compañeros con los que vamos a seguir bregando por la unidad, que no puede haber cargos que bajen de una orden divina o vitalicios. No pasa nada, puede haber nuevos compañeros que asuman desafíos, es más, si no hay nuevos compañeros que asuman nuevos desafíos no hay progreso compañeros…»
«Si hay unidad estamos dispuestos a todo, pero si no hay unidad, esta fórmula llegó para quedarse. Estamos consiguiendo la legalidad número 20, ya tenemos en 20 provincias y vamos a llegar a tener legalidad en las 24 y candidatos en cada provincia. Los llamamos a que nos acompañen en esta batalla, tenemos que recorrer cada barrio, cada localidad, cada ciudad del Gran Buenos Aires, cada provincia. Si hacemos eso va a surgir una nueva izquierda fuerte, moderna, tricolor, no dogmática, principista que llegó para quedarse compañeros».