En la nota del periódico del PO del 16 de octubre, su diputada salteña Gabriela Jorge afirma: “La Comisión Organizadora del Encuentro fue escenario de una aguda disputa política. Las mujeres del PCR junto con kirchneristas de toda laya y funcionarias del gobierno provincial y municipal conformaron un verdadero bloque, al que, según las circunstancias, se sumaron las mujeres del MST y de Patria Grande. Fueron a fondo en una orientación de estrechar vínculos con el Estado y la Iglesia católica.”
A las mujeres del MST nos acusa falsamente y sin probar nada. Cualquiera que haya leído nuestros periódicos y boletines, o nos haya visto actuar en el Encuentro de Salta, sabe que la del Partido Obrero es una calumnia torpe. ¿Qué “bloque”? ¿Qué “vínculos con el Estado y la Iglesia”?
Es exactamente al revés. Quienes el año pasado pactaron con el PCR poner Salta como sede son las del PO. Quienes en este Encuentro marcharon entre el PCR y las K, en vez de ir con la columna unitaria alternativa, son las del PO. ¿O acaso será que la diputada Jorge miente con descaro para tratar de ocultar esas barbaridades? Da vergüenza ajena, diputada.