El pasado viernes 5/12, una importante delegación de trabajadores despedidos de LEAR junto al compañero Marley, delegado elegido por los trabajadores y que con la lucha logró volver a trabajar, estuvieron en el Acto de Apertura del Congreso del MST. Unas horas antes, un grupo grande de los compañeros despedidos hizo llegar a todos los trabajadores de LEAR, a los que acompañamos esa heroica lucha y a todos los trabajadores, una carta donde analizan la misma, socializan algunas conclusiones y ponen esta extraordinaria batalla de seis meses contra la patronal, la conducción del SMATA y el gobierno, al servicio de todas las luchas que vendrán. A continuación publicamos la carta.
Carta a todos los compañeros:
Parte de los despedidos y despedidas de Lear hemos decidido pasar a una nueva etapa en esta lucha, teniendo en claro que hemos hecho todo lo posible por lograr nuestra reincorporación y defender a nuestros delegados. En seis meses de lucha hemos enfrentado a un bloque único del Estado, la empresa y el SMATA. Una de las grandes conquistas de nuestra lucha ha sido mostrarle al conjunto de la sociedad el rol de la burocracia sindical aliada a las empresas, en nuestro caso, estadounidense. Al mismo tiempo ha quedado al descubierto el rol del gobierno que tanto por parte del Ministerio de Trabajo como en su uso de la gendarmería y la policía han actuado en contra de nuestra lucha.
Demostramos, con todas las contras que tuvimos, que enfrentar, ser grandes siendo pequeños.
Nuestro primer agradecimiento es sin duda a nuestras familias, que han sido en todo momento nuestro mayor sostén anímico y nos han tenido una enorme paciencia acompañándonos en toda esta gran lucha.
Muchas cuestiones son las que nos llevan a tomar ésta decisión, una es sentir que debemos dar nuevos pasos en nuestras vidas, no ya como individuos aislados, sino como trabajadores y luchadores. Otra son nuestras familias.
Somos trabajadores y como tales peleamos por mejorar nuestras condiciones de vida.
A lo largo de esta lucha pasamos momentos en los que hasta llegamos a sentirnos adentro de la fábrica nuevamente. Gracias a la lucha la justicia tuvo que fallar a favor del reingreso de nuestros delegados, también conseguimos 61 reincorporaciones y gracias a la lucha, el rechazo al congreso del SMATA donde intentaron resolver la expulsión de los delegados del sindicato. Siempre creímos que podíamos ganar. Somos concientes que si nos hubiesen reincorporado, no iba a ser una batalla ganada en su totalidad, porque aunque nos duela, muchas familias quedaron en el camino. Nuestra pelea comenzó por la reincorporación de 240 trabajadores. La empresa, el Estado y la burocracia sindical, fueron logrando que poco a poco fueran retirándose muchísimos compañeros, incluso muchos de los más queridos y valiosos.
Nosotros, que somos parte de la lista Celeste, entendemos que la lucha continúa en otros ámbitos, de otras formas. Sin duda lo hacemos orgullosos de haber peleado esta desigual batalla. Hicimos historia en la lucha obrera y dimos todo por los compañeros. Les decimos gracias y hasta siempre, a los buenos amigos que la lucha, la solidaridad, nos dio y nos enseñó a querer, siendo esta una escuela que nos ha enseñado mucho a todos.
Agradecemos a los que nos acompañan, a los que alguna vez nos acompañaron, los que participaron y participan, las organizaciones, los estudiantes, los vecinos y a todos los trabajadores. Los que nos consolaron cuando estuvimos mal, los que festejaron en cada victoria, los que nos cuestionaron pero igual siguieron a nuestro lado, especialmente los que quedaron en el camino y a los celestes de siempre… Mantuvimos y mantenemos en alto a la Celeste que siempre quisimos.
A nuestros compañeros de lucha les decimos que de ahora en más la lucha continúa, ya que en el lugar donde nos toque estar, estaremos peleando para siempre por las necesidades de todos los trabajadores. Nuestro grato agradecimiento a todos/as ustedes y esperamos siempre estén y que nunca nos olvidemos de los buenos momentos que vivimos juntos. Nos quitamos el sombrero ante ustedes.
Este final aparentemente triste, pero no lo es. Es una vuelta de página, porque nuestra lucha sigue día a día, lo que cambia es el escenario. Sabemos que la experiencia ganada en todos estos años nos ayuda a afrontar lo que se viene y podemos transmitirla a quien la necesite. Compañeros, tenemos que tener una sonrisa gigante: ganamos mucho más de lo que creímos en algún momento y mantenemos nuestras banderas en alto. Las futuras luchas de los trabajadores serán las que terminen con la burocracia sindical y las patronales explotadoras. Sabemos que esas luchas comenzarán con la lucha de LEAR como experiencia acumulada. Sin duda, en cada una de estas luchas, estaremos transmitiendo nuestra experiencia para que todos los trabajadores puedan saber y aprender de nuestros aciertos y nuestros errores.
Mañana, tal vez tengamos que sentarnos frente a nuestros hijos y decirles que fuimos derrotados, que no supimos cómo hacer para ganar. ¡Pero no podríamos mirarlos a los ojos y decirles que ellos viven así porque nosotros no nos animamos a luchar!
Los queremos mucho, hasta siempre. ¡La Celeste es combativa de verdad! ¡Viva la lucha de los trabajadores!