El pasado viernes 18/9 se realizó el Congreso Ordinario de la Conadu Histórica, en el cual se eligieron los nuevos integrantes de la Mesa Ejecutiva y la Comisión Revisora de Cuentas. La votación realizada días antes por los docentes que integran las 25 asociaciones de base que componen la federación, de la cual resultó ganadora por un amplio margen la Lista 4, significó que de los 92 congresales presentes 58 tuvieran el mandato de votar a la Lista 4. De esta manera fue derrotado el intento de avanzar contra la autonomía de la central y se abren nuevos desafíos para la federación. Entrevistamos a José Mini, Secretario General de ADICUS para obtener unas primeras reflexiones en torno a estos resultados.
Un primer análisis de las elecciones de la federación marca el fracaso del intento del kirchnerismo por avanzar sobre la conadu y, al mismo tiempo, una renovación en la conducción de la federación. ¿Coincidís con esta lectura?
Todo proceso socio político da cuenta de una complejidad riquísima y si se agrega la dinámica de la combinación de los distintos aspectos, el análisis para devenir correcto deberá dar cuenta de cada uno de ellos, obviamente, que superaría con creces la finalidad de la entrevista.
Una repuesta inmediata, sin embargo es posible, la lista 4, recibió el apoyo masivo de los docentes, en torno a una consigna central: la independencia de la Federación con respecto al gobierno nacional y los rectores; señalar sólo eso es mezquino, estoy convencido que los docentes perciben en la Lista 4 el programa y la decisión de batallar consecuentemente por las reivindicaciones de los docentes universitarios.
La docencia universitaria ha derrotado el intento de alinear la Federación a las políticas y exigencias del gobierno nacional. La Lista 1 representaba sin ambages esta posición. El carácter democrático de la Federación que, por otro lado, reivindico, garantiza a través del sistema D´hont que las distintas tendencias estén representadas, en esta oportunidad miembros de la Lista 1, aunque minoritariamente en el seno de la Federación. La discusión programática, política-sindical y de método continuara en la Federación. Lo nuevo es el carácter autónomo, democrático y combativo tienen su peso propio no sólo en la superestructura sino en la mayoría de la docencia universitaria.
La Lista 4 ha recibido un claro mandato de la docencia universitaria no solo en la defensa del salario y las condiciones de trabajo sino en la plena independencia de la Federación, de allí, que el voto a la Lista 4 exprese un cambio de visión socio político muy importante que, sin duda, está cruzando a todos los asalariados. Habrá que analizar la profundidad y extensión de este proceso, vital para las perspectivas de las luchas de los asalariados.
¿Qué otra reflexión te merece el resultado de la elección?
Los resultados electorales se acompasan al proceso de lucha que tuvo a los dirigentes de la Lista 4 en primera línea. La larga lucha de los docentes de Tucumán fue el punto de inflexión que permitió, por un lado, corroborar la política timorata de la anterior conducción y, por otro, la urgencia de constituir una nueva alternativa de dirección de la docencia universitaria.
Las elecciones así lo confirmaron: se consolida una nueva conducción que tiene ante sí una responsabilidad inmensa. Sin exagerar, podemos transformarnos en un punto de referencia política y organizativa de los trabajadores estatales y privados del país, si somos capaces de construir una política sindical que lo favorezca. El desafío es inmenso. Desafío que en esta oportunidad tiene a las fuerzas de izquierda ante esta tamaña tarea en la que no es posible fallar pues sería una nueva frustración para los trabajadores.
¿En qué situación se encuentra la federación y cuáles son los principales desafíos del periodo que viene?
La federación está ante un reto histórico de convocar al conjunto de los trabajadores estatales a elaborar un plan de lucha nacional que evite que los asalariados sean, una vez más, la variable de ajuste del próximo gobierno, sea del signo político que sea.
El desafío central será resistir el ajuste y elaborar un programa que facilite superarlo, dotando al movimiento obrero del país de una alternativa sindical-política que permita trasponer lo coyuntural y avanzar en los problemas estructurales de la economía del país, la región y el mundo.
Luis Meiners Congresal por SITRADU