El jueves 10 sesionó el congreso de la Conadu Histórica. Se resolvió iniciar un plan de lucha con dos paros de 48 hs (16-17 y 29-30 de marzo) por la inmediata apertura de paritarias y una recomposición salarial del 45%.
El congreso se dio en el contexto del ajuste del gobierno de Macri, que también afecta a la Universidad. Empezamos el año con un importante recorte presupuestario de hasta el 10% en las partidas que la Secretaría de Políticas Universitarias asigna a salarios y cargas sociales. A eso hay que sumarle el cierre de carreras en algunas unidades académicas y los despidos de personal tercerizado. A la vez, circulan declaraciones de funcionarios, periodistas e “intelectuales” afines al gobierno que dicen que las universidades implican demasiado gasto y que el Conicet “es inviable”. Buscan generar un clima propicio para ajustar a docentes, investigadores y estudiantes. Las autoridades universitarias se suman a los intentos de recortar nuestros derechos. Tras resistir y entorpecer el avance del Convenio Colectivo de Trabajo, hoy intentan imponer interpretaciones que restringen derechos que hemos conquistado.
El congreso se hizo eco de una necesidad impostergable: abrir las paritarias y recomponer el salario. Fruto de las políticas de ajuste aplicadas por el gobierno K, como los “aumentos” que no cubren la inflación y en cuotas, o paritarias de 18 meses impuestas con la complicidad de Conadu, CTERA, FEDUN y UDA, los docentes universitarios sufrimos un grave deterioro del poder adquisitivo de nuestro salario. No podemos seguir así. Las paritarias son una necesidad urgente. El plan de lucha de nuestra central es un buen punto de partida para lograrlo. Después del 30, tenemos que continuar y profundizar el plan de lucha para derrotar el ajuste y lograr una urgente recomposición salarial.