Promesas de puño y letra. El presidente escribió una “Carta Abierta” en el diario El Liberal de Santiago del Estero. Según manifestó “venimos de tiempos difíciles”, estamos “en etapa de transición” y “vamos a estar mejor”. “Confíen” fue el pedido que realizó. Cuanto peor estamos, siguen las promesas y pedidos.

Primera respuesta al peor momento. Los indicadores económicos están en rojo. En este marco, la Carta es el inicio de una política para intentar retomar la iniciativa a nivel nacional. Por eso fue publicada en un diario de Santiago del Estero, hizo mención a “emprendedores” de distintas provincias y dio claros mensajes de beneficios a los empresarios.

Y se vienen más anuncios y medidas. Con una Carta no alcanza para frenar la creciente bronca popular. Por eso trascendió que Macri quiere reunir al Consejo del Salario y aumentar el mínimo para calmar los ánimos; subir los fondos a las provincias y tomar medidas sociales. Aún si fuera cierto, las medidas parciales no superarán el desempleo y la inflación que liquida al salario y aumenta la pobreza.

De Menem a Macri. Es inevitable asociar los dichos de Macri a Menem que, en los peores momentos, decía: “Estamos mal, pero vamos bien“. “Síganme, no los voy a defraudar.” El resultado fue que junto al PJ, hundieron al país. Con las declaraciones de Macri, es como revivir los años ´90, de ajuste entrega y pobreza.

Siempre pidiéndole al pueblo. Piden tiempo y confianza. La cuestión es que van décadas de espera y de traiciones. Los viejos partidos patronales siempre favorecen a las corporaciones, a los usureros y a los ricos. Y Macri sigue sus pasos. Para los de abajo esfuerzo y paciencia, para Mc Donald’s subsidios y ganancias. Todo un símbolo de la Argentina de hoy.

De las palabras a los hechos. En cinco meses hubo brutales tarifazos, se acumuló un 20% de inflación, sigue el impuesto al salario, no paran los despidos, el combustible aumenta a cada rato, se le pagó a los buitres y hay casi dos millones de nuevos pobres. No hay discurso ni anuncio que pueda esconder esta realidad. Estábamos mal y seguimos peor.

Alegría de pocos, preocupación de muchos. La prometida “revolución de la alegría” está llegando sólo a las mansiones de los ricos y las oficinas de los empresarios. Para los de abajo crecen las dificultades y la pobreza. Por eso, darle tiempo a Macri es facilitar el ajuste, como lo hacen el PJ y los dirigentes sindicales.

Ni los unos ni los otros. A los honestos luchadores que equivocadamente votaron al PRO, los llamamos a sacar conclusiones sobre lo que está pasando y a que dejen de apoyar al gobierno. A los que simpatizan con el FPV les decimos que el PJ que integran es el principal sostén de Macri. ¡Anímense a encarar un camino distinto!

Basta de burócratas privilegiados. Nosotros vamos a seguir apoyando los reclamos e impulsando el surgimiento de nuevos dirigentes, comisiones internas y cuerpos de delegados, que defiendan un modelo sindical democrático y combativo. Es clave que con la unidad de acción frenemos las suspensiones, los despidos y logremos un salario digno. Paro y plan de lucha son las medidas que necesitamos ya.

Que lo nuevo se abra paso. Lo sindical es indispensable, pero insuficiente. Hace falta una expresión política nueva para enfrentar al PRO y a los viejos partidos con sus nuevas trampas. Entre todos tenemos que poner de pie una herramienta que contemple las distintas expresiones de la izquierda social y política, y al verdadero progresismo, haya votado a quien haya votado. En la concreción de un proyecto como este se juega el futuro de los trabajadores y el pueblo en la Argentina.

Entrá al MST. Para encarar con fuerza estas tareas, construimos el MST. Te invitamos a leer y pasar nuestro periódico a vecinos, amigos y compañeros de trabajo. Alternativa Socialista informa lo que los medios ocultan y sirve para que conozcas nuestras propuestas. Te invitamos a conocer al partido desde adentro, a reunirte, a debatir y a pelear con nosotros por un gobierno de los trabajadores, el pueblo y por una salida socialista.