Lanús fue epicentro de nuevas marchas en reclamo de seguridad para la población y justicia para las víctimas. Este reclamo no es nuevo, Lanús es desde hace años un territorio muy inseguro y vulnerable, figurando en las estadísticas como la tercera ciudad más insegura. Cambiemos fue organizador de muchas de las marchas que en otro momento se hicieron al municipio y la campaña de Grindetti en el distrito fue alrededor de tener mayor seguridad para los lanusenses. Lejos de haber logrado modificar esta problemática, la política económica de más desigualdad social, las crisis e internas por la caja y el territorio manejado por la bonaerense ha profundizado la situación.
Así se siguen sumando víctimas de la inseguridad, Nicolás, Juanchi y tantos otros que suman ya son 23 en lo que va del año. También están las victimas silenciosas que tiene la inseguridad social; las víctimas de la marginalidad, del paco, de los narcos, la trata y las mafias de la maldita policía. Por eso esta situación que atraviesa nuestro distrito es compleja y genera mucho debate. Es común que entre los ciudadanos se piense que más policías «custodiando» son la solución. Estás claro que los arrestos y separación del cargo de comisarios y gendarmes en nuestros distrito, relacionados con negocios mafiosos que van desde la trata hasta el narcotrafico, muestran que no es tan simple resolver la inseguridad, sin atacar antes la corrupción en los diferentes niveles. Es necesario debatir y proponer la depuración completa de la policía, la auditoría contable en las comisarias, el voto popular para elegir el comisario y su revocación, como así también un control social de toda la política de seguridad y de las investigaciones de cada caso, para llegar a las máximas responsabilidades y complicidades políticas y judiciales.
Y por supuesto, no será posible abordar integral-mente la problemática de la inseguridad si no abordamos en primer lugar la justicia social, y la necesidad de otorgar trabajo, educación, salud y vivienda digna a la juventud y a toda la población, priorizando dar mayor presupuesto a todas estas áreas. Queremos discutir con todos los vecinos estas cuestiones y proponemos la renuncia de Kravetz, quien tiene bastantes cuestiones que justificar, como los nombramientos de gendarmes corruptos y del propio Baca. Pero si no damos un fuerte debate sobre las verdaderas causas de la inseguridad, seguiremos cambiando de Secretario de Seguridad pero con los mismos resultados.

Andrea Lanzette