Este 24M de nuevo cientos de miles nos movilizamos en todo el país. No obstante, en Plaza de Mayo hay dos actos. Uno es de los organismos de derechos humanos afines al gobierno anterior y sectores K. Otro es del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia -que integramos- que, aun centrando la denuncia en Macri y el FMI, no oculta la complicidad del peronismo tanto en el ajuste como en la represión.

El golpe genocida del 24 de marzo de 1976 lo dieron las Fuerzas Armadas, para poner fin al ascenso obrero y popular que jaqueaba al gobierno peronista de entonces (1). Además del apoyo del imperialismo y el empresariado, el golpe militar tuvo la complicidad del PJ gobernante y la UCR “opositora”, la cúpula de la Iglesia y la burocracia sindical. Bajo la propia dictadura la lucha por los derechos humanos la iniciaron las Madres de Plaza de Mayo, con apoyo de la izquierda y en especial de nuestro partido, en aquel momento el PST.
Desde la revolución democrática que derribó a la dictadura militar en 1982 y después, ya durante esta recortada democracia burguesa, el movimiento de derechos humanos fue derribando cada uno de los obstáculos de impunidad a los genocidas que montaron los sucesivos gobiernos (2). A su vez, las condenas obtenidas son un verdadero ejemplo a nivel internacional (3).
Sin embargo, según el informe oficial de la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad, que depende del Ministerio Público Fiscal nacional, con el gobierno de Mauricio Macri se lentificó el ritmo de causas elevadas a juicios y aumentó el beneficio de la prisión domiciliaria: dos de cada tres genocidas condenados están presos… en sus casas. Esto es parte del salto cualitativo en materia represiva que, respecto del gobierno anterior, significan Macri y su ministra de (In)seguridad Patricia “Bolsonaro” Bullrich con apoyo de todos los gobernadores tanto oficialistas como “opositores”.

Un debate político (y electoral)

Como en todo año de elecciones, en el movimiento de derechos humanos los distintos alineamientos condicionan la postura de cada corriente frente a las marchas. El kirchnerismo, que como gobierno cooptó a la mayoría de las Madres, Abuelas y demás organismos “tradicionales”, ahora busca utilizar las marchas del 24M para llevar agua a su molino electoral. A esa política se acopla el PCR, nuevo aliado del PJ-K en el “frente anti-Macri”, quien dentro del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia trató de diluir toda crítica al peronismo y, en especial, de excluir a los gobernadores en la denuncia del ajuste y la represión.
Sin embargo, igual que ocurrió para las movilizaciones feministas y disidentes del 8M, desde el MST actuando junto al FIT y al resto de la izquierda anticapitalista logramos que todo el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia haya acordado convocar al 24M bajo un programa con dos consignas centrales: Son 30.000, Fue genocidio, Basta de impunidad y No al ajuste y la represión de Macri, el FMI y los gobernadores cómplices. A esto le sumamos una bandera que acompañará la cabecera conjunta, Fuera yanquis de Venezuela y de América Latina, así como otras dos subconsignas: Ningún genocida libre y Libertad a Daniel Ruiz, Milagro Sala y todos los presos políticos. Sobre esa base programática se hace el documento unitario a leer en el acto en la Plaza de Mayo.

El 24M, a las calles en todo el país

Este domingo 24, al cumplirse un nuevo aniversario del golpe cívico-militar-clerical genocida, marchamos a la Plaza de Mayo y a todas las plazas del país. Marchamos por los 30.000 detenidos-desaparecidos y levantamos bien en alto las banderas de nuestro centenar de compañeras y compañeros desaparecidos del PST, para quienes nuestro mejor homenaje es seguir militando día a día por el mismo objetivo por el cual militaban todos ellos: la revolución socialista en la Argentina y en todo el mundo.
En la Ciudad de Buenos Aires el 24M marchamos como parte integrante del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia, así como en todo el interior del país lo hacemos junto a decenas de otras organizaciones populares para seguir defendiendo los derechos humanos de ayer y de hoy.

Pablo Vasco, CADHU-MST

1. El terrorismo de Estado comenzó bajo dicho gobierno con su aval a la Triple A, banda parapolicial de ultraderecha que secuestró a asesinó a más de 700 activistas.
2. Autoamnistía militar, autojuzgamiento por tribunales militares, juicio sólo a los 9 miembros de las tres Juntas militares, leyes de Punto Final y Obediencia Debida (Alfonsín), indultos (Menem), falsa derogación de las leyes de impunidad y proyecto del PJ de no oponibilidad (sólo para futuros genocidios).
3. Por el genocidio nazi, que asesinó a unos 10 millones de personas y causó la II Guerra Mundial, hubo apenas unos 120 genocidas condenados: 20 por el tribunal militar internacional de Nüremberg y otros cien por tribunales alemanes. Por el genocidio aquí, que asesinó a 30.000 compañerxs, ya van casi mil genocidas condenados y otros 400 en juicio, todos por tribunales civiles argentinos.