Alberto Fernández se abraza con el burócrata «Loma» Ávila (Petroleros) y con el gobernador Arcioni, ambos responsables de la patota que atacó a los docentes y estatales de Chubut, en lucha por sus derechos. La violenta agresión no mereció ni siquiera una tibia crítica del virtual presidente del país. En estos días, mientras los movimientos sociales se movilizan contra el hambre, AF acaba de declarar que «evitemos estar en las calles». ¿Será que en su gobierno va a apelar a burócratas sindicales y a gobernadores para «evitar» que las luchas sociales ocupen las calles y rutas? Semejantes amistades y declaraciones son un alerta rojo para quienes piensan votarlo. Mejor prevenir que curar… y votar a la izquierda.