Ante el reagrupamiento del PJ y los K con Arcioni, jugados a la gobernabilidad del ajuste, hace falta profundizar la lucha y extenderla al conjunto del movimiento obrero. Diputados de izquierda para Chubut.

Docentes y estatales venimos de cumplir dos meses y medio de un conflicto abierto y frontal con el ajustador Arcioni, socio de Massa y los Fernández. Por ahora, el momento cúlmine del proceso de lucha fue el martes 17. Ese día condensa el desarrollo de la movilización in crescendo que casi termina dando jaque mate al gobernador.

Mientras corría la noticia del escandaloso aumento en la planta política, miles llegaban a Rawson para manifestar. El plenario provincial de delegados que le arrancamos a la Atech inició esa jornada histórica, que cerraba a la tarde con un plan de acción provincial.

Instalado el acampe en la Legislatura, por la noche la noticia fatídica: los crímenes del ajuste de las docentes de Comodoro, Jorgelina y María Cristina. Esto desató un estallido cuyas imágenes de la quema en la Legislatura y Gobernación, grafican nítidamente.

Ese asedio al legislativo y la casa de gobierno no fue sino un aviso del poder de la clase trabajadora movilizada y armada con un programa de lucha antiajuste que viene tejiéndose en marchas y combates a las direcciones político-sindicales conciliadoras. Un programa obrero y popular en proceso de construcción que retoma el método de las asambleas de base que, como pueden, hacen sentir su contundencia en cuanto intersticio encuentran.

Fuera Arcioni y el ajuste capitalista

Si bien no es aún un programa anticapitalista, efectivamente la lucha por salarios, salud, educación pública, infraestructura, el rechazo a la megaminería y los contratos de saqueo del petróleo, los recursos pesqueros o el rechazo al pago de la deuda externa, son puntos neurálgicos contra los designios del modelo de acumulación capitalista regional, depredador de los bienes comunes, y que no ofrece sino explotación, desigualdad social, violencia y marginalidad.

El correlato político de este proceso es el “Fuera Arcioni”, como consigna ordenadora de la lucha de Chubut. Cuestión que expresa en el plano político la elevación de la conciencia de amplias franjas de sectores en lucha. Arcioni es fraude y se tiene que ir.

Este es un logro de nuestra clase en lucha, que viene combatiendo el ajuste capitalista desde hace tiempo, con un momento excluyente en el 2018. Desde el MST fuimos los primeros en alertar que no habrá salida para el pueblo sin que se vaya Arcioni, y se convoque a una Convención Constituyente donde el pueblo decida dar vuelta todo.

Por supuesto, no es una conclusión repentina ni caprichosa, es una conclusión política parida en la lucha diaria contra el gobernador y el ajuste a los de abajo, como línea exclusiva. Junto al cómplice poder legislativo y un sistema judicial que sólo oprime al pueblo pobre.

Nuevos desafíos de docentes y estatales

La lucha de clases puso a la orden del día el “Fuera Arcioni”. Ante esa posibilidad, los Fernández, vía “Wado” De Pedro y Massa, pretenden sellar un pacto con Arcioni, el PJ y el kirchnerismo de Chubut contra el pueblo trabajador.

Un frente que une al “Loma” Ávila, el burócrata del petróleo, represor de los piquetes docentes; Meza Evans, jefe de la mayoritaria bancada de diputados PJ; Jerónimo García, diputado del partido de Arcioni, y la runfla de siempre. Plantean armar una “mesa” donde negociar espacios de poder para las distintas alas del PJ y sumar al obispo Lahoz, quien dijo que la iglesia se podría sumar para “contribuir a la paz social”, en la que “cada uno tiene que hacer su sacrificio…”.

La lucha expresa la presión de sectores de base y el activismo, así como elementos de desborde que se expresó en un asedio a la legislatura que les pasó por encima. No se expresa en mayores acciones por la política de las direcciones. La burocracia sindical de la MUS toma aire y lava el programa, al tiempo que facciones de ATE entregan la lucha de auxiliares de la educación a cambio de promesas.

Los desafíos para activistas y luchadores vienen de la mano de la autoorganización, las asambleas multisectoriales y de seguir el ejemplo del plenario de delegades de ATECh para exigir un plenario provincial unificado con delegades de todos los gremios en lucha. Para dar así un canal a la base y activismo que empuja a la dirigencia a ir más allá, y coordinar las medidas. Junto a exigir un paro provincial de la CGT y las CTA, con movilización y plan de lucha hasta ganar.

Diputados de izquierda para Chubut

La salida es por izquierda. El frente político para sostener a Arcioni amontona al pejotismo, desde el ChuSoTo al kirchnerismo, junto a Cambiemos. Por eso, en las calles y el Congreso, necesitamos diputados de izquierda para Chubut. Fortalecer con el voto una alternativa al ajuste, votando luchadores del MST y el FIT-Unidad: Emilse Saavedra y Maxi Masquijo. Para que demos en el Congreso esa misma lucha que damos en las calles.

Maxi Masquijo, docente candidato a Diputado Nacional