“Fijate siempre de qué lado de la mecha te encontrás”
El 19F nos volveremos a encontrar en las calles de todo el país. A dos años del pañuelazo que inauguró la marea verde, la batalla por el aborto legal continúa en nuevo escenario político. Nuestro reclamo es que el Congreso debata y apruebe el proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo construido colectivamente, a lo largo de 15 años, por la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto. Es ese el que venimos defendiendo juntes año tras año frente a la ofensiva de dinosaurios políticos y de celestes religiosos, que van desde el Papa y la Curia hasta las iglesias evangélicas.
Y no corresponde de ningún modo igualar los pañuelos verdes a los celestes. La grieta existe y es insalvable. Porque el pañuelo verde defiende el derecho a decidir, el derecho democrático, en tanto que el pañuelo celeste niega todo derecho: a abortar en condiciones seguras y gratuitas, a la ESI y también a la anticoncepción. El pañuelo celeste impone: impone embarazos no deseados, impone niñas madres que han sido violadas e impone 200 muertes por año, en general de mujeres jóvenes y pobres.
Después de su encuentro con el Papa, el presidente Alberto Fernández expresó: “Voy a cumplir con mi palabra. Pero mi palabra no es volver a abrir una brecha entre pañuelos verdes y celestes. Mi palabra es darle la posibilidad a la mujer de que, si quiere abortar, lo pueda hacer legalmente. Y ayudar a los que quieran tener a sus hijos, a que los puedan tener. Es todo”. El problema es que parir no es ilegal: ¡lo ilegal en la Argentina es el aborto! Por eso el proyecto que defendemos es el de la Campaña, no otro.
Orgulloses y con nuestros pañuelos verdes en alto, vamos a seguir dando la pelea por el derecho que nos deben. En Plaza Congreso y en todas las plazas del país, el miércoles 19 de febrero venite con Juntas y a la Izquierda, Libre Diversidad y el MST al pañuelazo nacional por el aborto legal.
Hacia el paro internacional del 8M
En todo el país empiezan las asambleas preparatorias de las acciones unitarias del 8 de Marzo. Frente a quienes buscan diluir o bajar banderas, proponemos defender los acuerdos logrados el año pasado: exigir el paro general a las centrales sindicales y sostener nuestras demandas antipatriarcales, anticlericales y anticapitalistas.
Antipatriarcales. Hoy sufrimos un femicidio cada 22 horas y en un tercio de los casos había denuncia previa. El nuevo gobierno creó el Ministerio de la Mujer, Géneros y Diversidades, pero hasta ahora no le asignó más fondos para cumplir la Ley 26.485: apenas $ 20 por mujer por año. Por eso, entre otros puntos, como el año pasado hoy “exigimos más presupuesto para la asistencia, prevención y erradicación de la violencia patriarcal”. Y ante el anuncio presidencial de un proyecto ambiguo sobre el aborto, hoy defendemos lo que todes dijimos el 8M pasado: “Aborto legal seguro y gratuito ya. Aprobación del proyecto de IVE de la Campaña”.
Anticlericales. En vez de reducir los millonarios subsidios del Estado a la Iglesia, como se prometió, los aumentaron. Lo mismo los subsidios a las escuelas religiosas, que incumplen la ESI. Y la visita de AF al Vaticano confirma que la presión clerical crece: el Papa nos quiere “reconciliar” con el FMI, con los genocidas a quienes les mandó rosarios y con los celestes antiderechos. Por eso, como lo dijimos el 8M pasado, hoy repetimos: “Separación efectiva de la Iglesia Católica y de todas las iglesias del Estado y sus poderes. Que el Estado deje de financiarlas. Fuera las iglesias del sistema judicial, los hospitales, la educación y las políticas sociales”.
Anticapitalistas. Algunas compañeras dicen “Vivas, libres y desendeudadas nos queremos”. Pero resulta que el FMI y el gobierno, cada uno a su modo, nos quieren “desendeudar” pagando. Además, las mujeres y las disidencias ganamos un 27% promedio menos que los varones y somos les más precarizades y desocupades. Por eso, como lo dijimos el año pasado, hoy insistimos: “Basta de ajuste, despidos y tarifazos: el ajuste y los despidos también son violencia patriarcal. Exigimos la ruptura del acuerdo con el FMI y el no pago de la deuda externa”. “Luchamos por una Argentina y un mundo que sean antimperialistas y anticapitalistas”.
Paro general, sin vueltas. Este año será el 4º paro internacional y plurinacional de mujeres y disidencias, que viene con más fuerza que el anterior. Algunos sectores plantean que sea un “paro feminista”, con eje sólo en las tareas de cuidado. Es un error, ya que al omitir la cuestión de clase termina resultando funcional a las patronales. Tal como lo sostuvimos el 8M pasado, hoy reafirmamos que “todes somos trabajadoras y trabajadores; somos la clase contra la que va el capitalismo en el mundo” y por eso a la CGT y a las CTA les “exigimos una vez más un paro general efectivo por nuestras reivindicaciones”.