Aquí van testimonios desde la línea de fuego. Son algunxs de quienes vienen sosteniendo los hospitales y centros de salud. Sin ellxs, no habría salud pública. Lo hacen con el corazón, pero con altísima exposición al riesgo. Lo hacen con esfuerzo y garra, en condiciones laborales que implican un prematuro desgaste laboral. Con la pandemia, todo esto se multiplica. Son los que te cuidan, pero ni el gobierno ni las empresas los cuidan. Vos los aplaudís todas las noches y te lo agradecen, pero piden que además apoyes sus reclamos, que se multiplican en todo el país. Faltan elementos de protección, bioseguridad, en cantidad y calidad. Falta salario, no bonos basura, ni «premios» porque no están dispuestxs a rifar sus vidas. Falta personal para recomponer los planteles. Falta infraestructura por décadas de desinversión. Falta que les reconozcan las licencias de los grupos de riesgo. Si se enferman, no van a estar para cuidarte. Se trata de la salud de lxs trabajadorxs de la salud.
Andrea Ramírez, enfermera, Hospital Ramos Mejía, CABA
Para evitar el contagio no alcanza con estar separados a una distancia de un 1 metro y medio entre cada compañero si solo usamos nuestros ambos y guardapolvos. Desde las autoridades siguen insistiendo que no es necesario utilizar el equipo de protección personal completo, no nos entregan camisolines, no alcanzan los barbijos para todos, ni el alcohol en gel. Ni hablar de las antiparras o escafandras.
Todos tenemos el derecho de que nos provean los elementos de seguridad para no contagiarnos en el hospital, llevar el contagio a nuestras familias y poner en riesgo nuestras vidas.
Nos sacaron las licencias por enfermedad y para cuidar a nuestros hijos pequeños o con discapacidad. Para trasladarnos al Hospital no se nos garantiza un transporte especial para evitar el peligro de contagiarnos en trenes y colectivos y evitar así contagiar a nuestros pacientes.
Los compañeros que asisten a los hoteles, a pasajeros sospechosos de estar infectados, denuncian que tampoco le dan los equipos de protección personal completos. Seguimos con falta de personal y pese a las promesas todavía no ingreso ningún nuevo trabajador.
Vemos con mucha tristeza que en el primer mundo siguen muriendo miles por día, qué nos queda para nosotros si le dejamos al gobierno que siga de esta manera. Solo unidos en nuestros reclamos y con la organización de todos los trabajadores podremos garantizar que la pandemia no arrebate nuestras vidas y la de nuestros seres queridos.
Alejandra Ruz, enfermera, Sanatorio Dupuytren, CABA.
La situación hoy es de mucha incertidumbre, preocupación, angustia e impotencia eso es lo que hoy expresan mis compañeros. No hay información clara de cómo actuar cuando tengamos más pacientes de Covid-19, no dan capacitación al personal, restringen los insumos, no tenemos el equipo de protección completo, también siguen abiertos los consultorios cuando se dijo que se cerrarían para evitar más circulación de personas.
También hemos tenido dos compañeros trabajando con fiebre y aún hoy no sabemos si cursaron la enfermedad. La empresa mantiene un total hermetismo con la información. Y aún no nos dieron la vacuna antigripal. La explicación es una: por su sed de seguir facturando las empresas de salud privada nos ponen en riesgo a los agentes de salud, sin importarles las consecuencias sanitarias de sus decisiones.
Alejandra Vaca González, bioquímica, Hospital Rawson, Córdoba
Varios servicios los han trasladado a otros hospitales, como ginecología por ejemplo. Todo lo que es internación también. Han dado de alta pacientes, han traslado a otros hospitales para desocupar las terapias y los pabellones en la medida que se pueda para pacientes de Covid-19. Han tomado personal en el laboratorio donde trabajo yo, se tomó. Igual todo el servicio, por orden de dirección, vamos a comenzar a hacer guardias de 12 horas. Todo el laboratorio solo va a atender pacientes febriles por guardia, ya sea dengue o con síntomas de coronavirus. Hay todavía mucho dengue y Covid hay casos sospechosos. El personal siempre un poco está con esa incertidumbre de que alcancen las medidas de bioseguridad, guantes, barbijos, batas. Y nosotros también en el laboratorio vamos a recibir una donación de una persona que nos ofrece barbijos o lo que haga falta. Y nos lo va a donar porque también un poco recibimos donaciones de la gente.
Alejandro Parlante, delegado Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), Rosario
La semana pasada predominó el reclamo de elementos de seguridad para enfrentar la pandemia, la deliberación permanente y una incipiente organización. La dirección descomprimió un poco la situación anunciando que el HECA no está en la primera fila, que empezaría a recibir pacientes con Covid-19 luego del desborde de los hospitales Eva Perón y Carrasco y de prometer la llegada de elementos de protección a partir de esta semana.
La promesa fue un nuevo chamuyo, los nuevos protocolos no contemplan el funcionamiento real del hospital y vuelve a estar planteada la organización democrática por abajo exigiendo nuestra participación en el comité de Coronavirus y todas nuestras reivindicaciones.
Mariano Veiga y Gladys Roman, psicólogos y dirigentes de AGIHM, Hospital Moyano, CABA
Nosotros no estamos ajenos a la realidad de todos los hospitales de la CABA. Arrastramos falta de recursos humanos, infraestructura e insumos; y esta crisis del Covid-19, agudizó la situación. Aunque haga mucho marketing ahora, no hay que olvidar que Larreta quiso en el 2018 y el 2019, unificar cinco hospitales!
El GCBA no nos garantiza los materiales necesarios básicos para prevenir los contagios entre pacientes y sobre todo de nosotros hacia las mismas que son población de riesgo (EPOC, enfermedades clínicas diversas y mayoría de mayores de 65 años). Lxs trabajadores precarizados de limpieza, cocina y vigiladores, además de carecer de medidas de prevención; si faltan a trabajar por cualquier razón, ¡les descuentan el salario! Medieval.
Para colmo, la burocracia sindical de AMM no dice ni una palabra. Y SUTECBA, nos dice que tenemos que trabajar al «límite de nuestras fuerzas» y que luego seremos reconocidos por el GCBA. ¡Patrañas! Este es el momento en el que más deberían reconocer nuestro trabajo, aumentando sustancialmente nuestro salario y mejorando de inmediato nuestras condiciones de trabajo, que hoy día, son motivo suficiente para denunciar al GCBA ante el Ministerio de Trabajo.
Orlando Restivo, médico y dirigente de CICOP, Hospital Belgrano, San Martín
El Belgrano se prepara para el aumento de casos de Covid-19 arrastrando algunas carencias que ya existían en la etapa pre-pandemia. En insumos, el hospital cuenta con kits de EPP para las áreas donde se prevé circulen pacientes positivos o sospechosos, pero no para las demás áreas y escaso para limpieza; solo para lxs compañerxs que limpian esas áreas «criticas». Además, no se sabe por cuánto tiempo. Escasean insumos generales: hay lavandina y jabón, pero faltan sueros, alcohol, guantes, barbijos muy pocos, etc. En cuanto a personal plantean una lista de 10 enfermeras y 10 de limpieza, no se sabe cuántos se nombrarán de 10.471 y nadie conoce esa lista. CICOP exigió en el comité de crisis que se reabra el comité de RRHH.
Joana Bordón, mucama y delegada del Hospital Italiano, CABA
Venimos exigiendo en el hospital incluso ya antes de que el presidente suspenda las clases (10-03-2020), hemos planteado con anticipación medidas necesarias y pese a eso hoy sufrimos las consecuencias con 10 trabajadores infectados. Por eso más que nunca debemos integrar los comité de crisis.
Creo que debemos tomar medidas para que los más afectados por el Covid-19 no sean los trabajadores por eso también pedimos testeos masivos para el personal.
Es hora de que la voz de los trabajadores se escuche y que el gobierno haga algo ante la falta de insumos como reestrucuturar las fábricas ya y producir los elementos necesarios. Que realmente se ocupen de la falta en el sistema de salud.
Mirian Carusso, médica y dirigente de CICOP, Hospital Eva Perón, San Martín, PBA
Sintetizando podría decir: responsabilidad y compromiso vs. desprotección y maltrato. El rol del equipo de salud en este momento es crucial y no somos lxs unicxs, pero la población espera de nosotrxs la idoneidad y el compromiso necesarios para actuar frente a la pandemia por Covid-19.
Siendo trabajadorxs enfrentamos a diario la responsabilidad de nuestra profesión y el compromiso con nuestrxs pacientes, compañerxs de tareas, comunidad, nuestras familias, y nos esforzamos para ganar esta batalla contra el coronavirus. Pero el escenario no es seguro y los lugares de trabajo son hostiles. La falta de elementos como: EPP (Equipos de Protección Personal), desinfectantes, medicamentos, y aparatología adecuada hace que estemxs desprotegidxs y vulnerablxs, lo cual es claramente una forma de maltrato.
Por esta razón, el esfuerzo es aún mayor y el desafío es repartir nuestrx energía entre el trabajo propiamente dicho y la lucha constante reclamando mejores condiciones laborales, salarios dignos, y visibilizando la problemática que nos envuelve.
Nosotrxs elegimos ser integrantxs del equipo de salud y como tales, la tarea es compleja ya que estamos inmersos en un sistema que no nos protege y nos maltrata. Aun así batallamos diariamente, pero no somos heroínas y héroes, somos trabajadoras y trabajadores.
Roxana Szyszko, trabajadora social, Hospital Narciso López, Lanús, PBA
Hablo desde la primera línea, de a ratos, por ser paciente con Epoc, pero puedo confirmar el vaciamiento del Estado en el ámbito de Salud, fruto de años de desinversión y profundizado en el gobierno macrista, que pone en jaque nuestras vidas.
Buenos Aires, un aglomerado urbano de más de 12 mil millones de habitantes, en un contexto social donde priman las desigualdades, con trabajadoras y trabajadores con sueldos paupérrimos, precarización laboral, desocupación, personas en situación de indigencia extrema, con problemas y demandas que no se han resuelto, pero no podemos combatir una enfermedad con estómagos vacíos, y sistemas inmunológico débiles.
La realidad de los hospitales provinciales es preocupante, no contamos con insumos de bioseguridad para el personal que está en contacto directo con los infectados, ni tests masivos para detectar casos asintomáticos y sobre todo protocolos que estén alineados en los diferentes niveles. Algunos gremios han salido a denunciar esta situación como CICOP, otros prefirieron romantizar la pandemia. Somos lxs trabajadorxs, donde podemos, los que reclamamos, con urgencia los insumos necesarios básicos para cumplir con la tarea esencial, sin morirnos.
Yanina Luna, administrativa y delegada del hospital Centro de Salud, Tucumán
Los trabajadores autoconvocados del Hospital Centro de Salud de San Miguel de Tucumán, rechazamos la convocatoria del Gobierno solicitando voluntarios.
El gobernador Manzur y la ministra de Salud Rossana Chahla actúan de manera demagógica e irresponsable: no cumplen con lo establecido por la OMS y la OPS, somos el hospital referencia para el Covid-19 y tiene solo 14 respiradores.
El primer llamado de voluntariado fue un fracaso, no se anotó nadie, ya que los profesionales saben de la falta de infraestructura e insumos y no hay equipo de protección personal con normas de bioseguridad.
El personal enmarcado en grupos de riesgo continúa trabajando. El sector de limpieza, está expuesto sin protección y precarizado. Por toda esta realidad, hicimos asambleas y denunciamos en los medios. Por eso fuimos amenazados y quieren trasladar a los que denunciamos. No lo vamos a permitir.
Ahora hay traslados en represalia por las denuncias que hicimos y vamos a pelear para frenarlos.
Amparos para que las ART cubran los riesgos
El lunes 30 hemos presentado los primeros recursos de amparo en el país para obligar a las ART a cubrir a les trabajadores de la salud pública y privada por todos los riesgos que les cause el coronavirus.
Nuestros compañeros César Latorre, delegado general del Hospital Italiano, y Carolina Cáceres, enfermera del Hospital Tornú, son quienes presentaron en la justicia laboral los amparos para que sus ART asuman la cobertura por el virus, ya que se niegan, y también para que sus patronales cumplan con la prevención.
El amparo fue patrocinado por las doctoras Mariana Chiacchio y Claudia Leaños, integrantes del CADHU (Centro de Abogades por los Derechos Humanos), y recayó en el Juzgado Nacional del Trabajo 45, a cargo de la jueza Rosalía Romero.
Latorre afirmó: «El Italiano es el mayor establecimiento de la salud privada del país y ya hay varios trabajadores contagiados por negligencia patronal. Apenas nos enteramos que las ART no cubrirían el coronavirus, surgió la iniciativa del amparo. Por eso exigimos que la ART La Segunda garantice la cobertura y que el Hospital haga un testeo inmediato a todo el personal y esté a disposición de las necesidades sanitarias públicas en forma gratuita».
Cáceres agregó: «Les trabajadores estamos en la primera línea en esta batalla y es absurdo que la ART no nos cubra. Y el gobierno porteño, encima que a Enfermería no nos reconoce como parte de la carrera profesional, no nos protege. Por eso en el amparo demandamos a Provincia ART y al GCBA para que se hagan cargo. Si la justicia nos acepta el amparo sería un gran precedente para todes les trabajadores de la salud, que hoy nos exponemos tanto».
A su vez, la doctora Chiacchio señaló: «El listado de la Ley de ART no incluye como enfermedad laboral al Covid-19 porque es nueva. Pero es evidente que su contagio al personal de salud se debe a su tarea. Por eso la ART no puede negar su cobertura. La Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) parece ir en ese mismo sentido y esperamos que la justicia reconozca ese derecho laboral».
Pablo Vasco