Es imposible una salida de la crisis económica a favor de lxs trabajadorxs con la fórmula de siempre. Sabemos cómo termina: Somos nosotrxs quienes pagamos los platos rotos. Para dar vuelta todo es necesaria una reorientación económica cabal, radical que no sólo es lógica, sino que también es necesaria para que mejore la condición de vida del conjunto de lxs trabajadorxs y el pueblo. Todas las salidas dentro del sistema capitalista son irracionales por donde se las analice. Hasta la tecnología y la automatización en lugar de estar al servicio de que todos trabajemos menos está al servicio de que trabajemos peor: eso es el capitalismo. Pues basta de él.
Aumento salarial general de emergencia con básicos iniciales iguales al costo de la canasta familiar con cláusula de ajuste automática. Con esta propuesta se eliminaría la especulación empresaria de remarcar con el argumento del “costo laboral” y le permitiría a lxs trabajadorxs no perder frente a la inflación. El aumento debe ser de salarios, jubilaciones y planes sociales.
Aplicación de la ley de abastecimiento. Priorizar ante todo el consumo de la propia población. Cortarla con los formadores de precios. Fijar precios máximos y ante desabastecimiento o no cumplimiento expropiación bajo control de los trabajadorxs. Se puede cortar con la especulación solo hace falta decisión política de llevarlo adelante.
Reforma impositiva progresiva. Estamos en el mundo del revés. Los que menos tenemos más pagamos y los que más tienen no pagan, como por ejemplo los bancos, que no aportan nada al estado porque la actividad financiera está exenta. Hoy la recaudación de impuestos se compone por:30% IVA 24% de la seguridad social (16% contribuciones patronales; 8% aporte del trabajador) 22% impuesto a lmpuesto a las ganancias; 10% retenciones; 7% impuesto al cheque; 3% el impuesto a los combustibles; menos del 1% a los bienes personales.
Hay que gravar a las grandes fortunas y rentas de manera permanente. Eliminar el IVA de los productos de la canasta familiar y gravar fuertemente todas las propiedades ociosas. Eliminar el impuesto al salario y aumentárselo a las empresas, entre otras.
Reparto de las horas de trabajo. Reducción de la jornada laboral a 6hs sin pérdida salarial y reparto de las horas de trabajo para atacar a la desocupación. Plan de obras públicas para generar trabajo genuino.
Plan de viviendas populares. Para solucionar el déficit histórico habitacional, lo que además permite mover la economía con insumos nacionales y generar puestos de trabajo genuino. Con planes de adquisición de viviendas acordes a los salarios, sin intermediarios parasitarios como los bancos e inmobiliarias.
Recuperar los resortes fundamentales de la economía. Nacionalización bajo el control de lxs trabajadorxs y usuarios de todos los servicios básicos y los recursos estratégicos.
Reforma agraria y soberanía alimentaria. Para terminar con al monocultivo y los agrotóxicos que destruyen el planeta y desarrollar una alimentación para toda la población argentina. Otra irracionalidad del capitalismo que en el país que se hace comida para 400 millones de personas haya desnutrición infantil.
Nacionalización de la banca Para acabar con la fuga de capitales y tener los ahorros de la nación al servicio del desarrollo del país y cortar con la timba financiera.
Nacionalización del comercio exterior. Para terminar con la especulación del campo y poner las ventajas del comercio internacional al servicio del desarrollo del país
No pago soberano de la deuda externa. Romper acuerdos con el FMI y demás organismos y acreedores usureros. Volcar esa masa de recursos al plan de viviendas, a aumentar los presupuestos de Salud y Educación, responder a la emergencia sanitaria y desarrollar el plan económico obrero y popular.